Guindalera, un s¨ªmbolo de resistencia teatral
El espacio esc¨¦nico cumple 15 a?os y lo celebra con el estreno de ¡®Sobre padres e hijos¡¯, del ruso Turgu¨¦nev
¡°Uno de los principios m¨¢s b¨¢sicos de la vida es el enlace entre los tiempos, la transmisi¨®n patrimonial de valores. Un mundo sin tradici¨®n crea hu¨¦rfanos¡±. La frase del autor ruso Iv¨¢n Turgu¨¦nev en su obra Padres e hijos es un fiel reflejo de lo que durante 15 a?os se ha vivido entre las paredes del Espacio Guindalera, s¨ªmbolo de resistencia tit¨¢nica sobre la escena y uno de los espacios m¨ªticos del teatro independiente en Madrid.
Tras no pocas penalidades y amenazas de cierre, este espacio celebra su quince aniversario con el estreno esta semana de Sobre padres e hijos, basada en el cl¨¢sico de Turgu¨¦nev (1818-1883). Una obra sobre los choques generacionales que han marcado la historia mundial y que, m¨¢s all¨¢ de los conflictos puntuales en cada ¨¦poca, apunta al amor como el valor m¨¢s hermoso que los padres pueden transmitir y dejar a sus hijos. Es precisamente el amor por el teatro la herencia que los fundadores de La Guindalera, la pareja formada por Juan Pastor (Alicante, 1943) y Teresa Valent¨ªn Gamazo, han dejado a su hija, la actriz Mar¨ªa Pastor, de 40 a?os, que ha tomado el relevo de una tradici¨®n basada en un compromiso sin concesiones y un teatro independiente.
La conversaci¨®n entre Juan, Teresa y Mar¨ªa, reunidos esta ma?ana en el escenario de El Espacio la Guindalera (carecen desde hace a?os de permiso oficial para hacerse llamar teatro) supone todo un recorrido vital, en el que se mezclan los sinsabores y la felicidad, las angustias pero tambi¨¦n la decisi¨®n y confianza por la realizaci¨®n de un sue?o. El esplendor econ¨®mico que se viv¨ªa cuando se abri¨® el centro, en 2003, con una compa?¨ªa que lleg¨® a tener a 30 actores contratados y dados de alta en la Seguridad Social, es ya cosa del pasado.
La crisis y las continuas dificultades administrativas, sin subvenciones y escasas ayudas muy puntuales, han amenazado en numerosas ocasiones con el cierre de esta sala de 75 butacas, en la calle Mart¨ªnez Izquierdo n¨²mero 20, en el populoso barrio de La Guindalera. Pero aqu¨ª sigue esta familia, persiguiendo nuevos proyectos no solo teatrales, tambi¨¦n musicales, po¨¦ticos, de talleres de investigaci¨®n y de encuentros con sus socios (unos 200 en estos momentos) y el espectador.
¡°La m¨¢xima que ha guiado mi viaje en esta aventura ha sido hacer del cambio una herramienta de trabajo. Aprend¨ª hace muchos a?os que hay que aceptar los cambios y adaptarse a ellos¡±, asegura Teresa, gerente y responsable de las producciones del centro. ¡°No abrimos un espacio a ciegas. Lo hemos podido mantener muy dignamente diez a?os. Todo lo que gan¨¢bamos fuera con nuestros lo invert¨ªamos aqu¨ª. La crisis nos desbarat¨® y tuvimos que empezar a salir con obras de la compa?¨ªa a teatros p¨²blicos¡±, a?ade Valent¨ªn Gamazo.
¡°Ha sido una elecci¨®n de vida. Nos hemos guiado por la coherencia y la integridad y hemos renunciado a muchas cosas, entre otras a tener estabilidad econ¨®mica y a tener proyecci¨®n de futuro¡±, asegura Juan Pastor, actor, director y autor de la dramaturgia de Sobre padres e hijos. La funci¨®n, protagonizada por Jos¨¦ Margarita Lascoiti, Mar¨ªa Pastor, Jorge Tejedor y Antonio Lafuente, estar¨¢ en cartel hasta el pr¨®ximo 16 de diciembre.
¡°Un hijo tiene que romper con sus padres para iniciarse y desarrollarse¡±, confiesa Mar¨ªa Pastor, actriz y principal protagonista de los ¨²ltimos montajes de este escenario, de 40 a?os. ¡°Para m¨ª ha sido un conflicto porque nunca he roto del todo. No he salido de Guindalera por convicci¨®n. Yo no he renunciado a salir fuera, he elegido quedarme aqu¨ª. Mis padres son para m¨ª una inspiraci¨®n, porque son dos personas ¨ªntegras, algo muy dif¨ªcil de encontrar en esta profesi¨®n. Yo he crecido con la pasi¨®n que ponen en su trabajo. Forman un t¨¢ndem perfecto. Siempre he so?ado con ser actriz, aunque mis padres seguro que hubieran preferido que hubiera elegido otra profesi¨®n¡±, a?ade Mar¨ªa Pastor, que conoce de primera mano los sufrimientos del oficio teatral.
¡°Los est¨ªmulos y desaf¨ªos que he vivido como actriz en este espacio son dif¨ªciles de encontrar fuera. Mis necesidades art¨ªsticas las tengo cubiertas¡±, explica la actriz, que asume la necesidad de un cambio pero preservando los valores marca de la casa.
La forma de trabajo y la metodolog¨ªa que ha marcado la filosof¨ªa de este centro se abre tambi¨¦n ahora a otros mundos art¨ªsticos, con la apertura de otro rinc¨®n reci¨¦n abierto con vistas a un patio interior. All¨ª, hay lugar para la poes¨ªa, la m¨²sica y los encuentros con el p¨²blico. Al tradicional licor de guindas con el que despu¨¦s de cada funci¨®n invitan a los espectadores, se a?ade tambi¨¦n ahora vino y cava. Todo para celebrar este milagro esc¨¦nico que busca no solo sobrevivir, sino invertir en futuro.
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