El auge de ERC en los sondeos

Tras una inesperada derrota en las pasadas elecciones auton¨®micas, ERC vuelve a liderar las encuestas. Seg¨²n ¨¦stas, Esquerra se encontrar¨ªa en una senda de crecimiento, especialmente a costa de arrebatar apoyos a Junts per Catalunya, y se erigir¨ªa como primer partido en el espacio independentista, una posici¨®n que ocup¨® tanto en las elecciones generales de 2015 y 2016, como en la pr¨¢ctica totalidad de los sondeos previos a las elecciones catalanas de 2017.

Estos indicios de recuperaci¨®n electoral de ERC han ido acompa?ados de un cambio profundo en su estrategia pol¨ªtica. Esquerra ha dejado atr¨¢s la v¨ªa unilateral y apuesta ahora por una estrategia de largo plazo que pasa por la consolidaci¨®n de mayor¨ªas m¨¢s amplias favorables a la independencia. Esquerra parece haber incorporado en sus c¨¢lculos los elevados costes de la ruptura unilateral. La fortaleza del Estado y la falta de apoyos internacionales del independentismo fueron sistem¨¢ticamente infravalorados por los partidos nacionalistas durante los a?os de proceso soberanista, pero ambas cuestiones se vislumbraron con claridad tras el oto?o del pasado a?o.

La coincidencia temporal entre el auge demosc¨®pico de ERC y su estrategia de ¡°ensanchar la base independentista¡± ha provocado que muchos analistas consideraran que existe una relaci¨®n de causa-efecto entre ambas cuestiones. Desde esta perspectiva, ERC estar¨ªa recuperando posiciones gracias a haberse apeado de la v¨ªa unilateral. Pero, ?realmente Esquerra est¨¢ obteniendo r¨¦ditos de su proceso de moderaci¨®n? A mi entender, se trata de una conclusi¨®n precipitada, pues ignora el elemento m¨¢s relevante tras la inesperada derrota de ERC en las pasadas elecciones catalanas.

Durante los meses anteriores a las elecciones del 21-D, las siglas de PDeCAT parec¨ªan cotizar a la baja. Seg¨²n las encuestas, los exconvergentes apenas lograban atraer a uno de cada cuatro votantes de Junts pel S¨ª. Todos los indicios apuntaban, pues, que Esquerra lograr¨ªa finalmente erigirse como primera fuerza en las elecciones catalanas. Sin embargo, durante las semanas previas a los comicios muchos de sus votantes decidieron pasarse a ¨²ltima hora a las filas de Junts per Catalunya.

Seg¨²n las encuestas que disponemos, esta fuga de votos de ERC justo antes de las elecciones s¨®lo puede explicarse por un factor, el ¡°efecto Puigdemont¡±. El expresidente de la Generalitat consigui¨® formular una exitosa campa?a electoral en torno a un mensaje sencillo, pero muy poderoso: la restituci¨®n del presidente leg¨ªtimo. Con este eslogan, Puigdemont logr¨® convencer a muchos votantes de la ¨®rbita de ERC de que la mejor f¨®rmula para expresar el rechazo al 155 y a la destituci¨®n del gobierno leg¨ªtimo era votando a la lista del presidente destituido.

En definitiva, Puigdemont fue capaz de articular una exitosa estrategia para aglutinar de forma coyuntural el voto de protesta al 155 y a los procesos judiciales abiertos contra el gobierno auton¨®mico. Con ello, Junts per Catalunya se erigi¨® como una candidatura mucho m¨¢s transversal de lo que es el PDeCAT, atrayendo a muchos votantes de la izquierda.

No obstante, este ¡°efecto Puigdemont¡± se ha ido apagando con el tiempo y los votantes de la ¨®rbita de ERC han regresado progresivamente a su partido originario. De hecho, seg¨²n los datos del CEO, apenas tres meses despu¨¦s las elecciones del 21-D, uno de cada diez votantes de Junts per Catalunya ya declaraban que ante unas eventuales nuevas elecciones optar¨ªan por ERC.

Las encuestas muestran de forma inequ¨ªvoca que Esquerra est¨¢ creciendo y lo hace esencialmente a costa de Junts per Catalunya. Las nuevas adhesiones que recibe Esquerra no parecen estar particularmente relacionadas con tener posturas m¨¢s moderadas en torno al proyecto independentista, sino m¨¢s bien con ser de izquierdas. As¨ª pues, los datos no son del todo compatibles con la tesis de que el auge de ERC se deba al proceso de moderaci¨®n de su discurso independentista. La explicaci¨®n alternativa m¨¢s razonable es pensar que se estar¨ªa beneficiando del progresivo desvanecimiento del ¡°efecto Puigdemont¡±.

En definitiva, el ascenso de ERC en las encuestas podr¨ªa no deberse tanto a m¨¦ritos propios, como al agotamiento de la estrategia de su principal rival. Puigdemont dise?¨® una exitosa campa?a para aglutinar el voto estrat¨¦gico de rechazo al 155, pero se trataba de una estrategia coyuntural, con efectos a corto plazo. Es por este motivo que el entorno exconvergente le urge articular un discurso que sea eficaz m¨¢s a all¨¢ del corto plazo. El ¡°efecto Puigdemont¡± parece haber sido tan exitoso como fugaz.