El despliegue de la fibra ¨®ptica se atasca en 800 municipios catalanes

A falta de avances sobre la instauraci¨®n de la rep¨²blica catalana, erigir una ¡°naci¨®n digital¡± antes de 2023 es uno de los compromisos adquiridos por el Gobierno de Quim Torra. El president y sus consejeros la condicionan a la extensi¨®n de la banda ancha a todos los rincones de cada comarca, y reafirman el compromiso del Govern de desplegar, antes de cinco a?os, una completa red de fibra ¨®ptica que alcance incluso a los pueblos de menos de 100 vecinos. Sin embargo, el tiempo corre en su contra y de los 947 municipios catalanes, actualmente solo 141 est¨¢n conectados.

El consejero de pol¨ªticas digitales y administraci¨®n p¨²blica, Jordi Puigner¨®, est¨¢ realizando en los ¨²ltimos meses una gira de visitas a ayuntamientos, diputaciones y consejos comarcales. En cada caso repite un mismo mensaje: todas las capitales de comarca estar¨¢n conectadas por fibra ¨®ptica en 2020 y todos los pueblos de m¨¢s de 50 habitantes tendr¨¢n instalado el servicio en 2023. En Catalu?a hay 947 municipios y son una peque?a minor¨ªa los que no suman medio centenar de habitantes. Seg¨²n la clasificaci¨®n de los micropueblos catalanes, entre los diez m¨¢s peque?os, solo seis no llegan a los 50 vecinos. El compromiso adquirido pone en un aprieto al Govern porque la red de fibra ¨®ptica de la Generalitat es, a d¨ªa de hoy, exigua. Solo alcanza a 141 municipios. Fuentes de la consejer¨ªa afirman que hay algunos despliegues que avanzan a buen ritmo y que, en breve, ya ser¨¢n 200 los n¨²cleos conectados.

En las capitales, los deberes est¨¢n sensiblemente m¨¢s avanzados: hay 29 que est¨¢n enchufadas a la fibra y existen proyectos avanzados en Les Borges Blanques, Solsona, Sort, El Vendrell y Banyoles. Seg¨²n el calendario fijado, en poco m¨¢s de un a?o se deber¨ªa conectar a Gandesa, Falset, Moi¨¤, Montblanc, El Pont de Suert, Puigcerd¨¤, Valls y Vielha.

Hay operadoras privadas que han instalado su propia red de fibra ¨®ptica en varios pueblos y ciudades pero esta infraestructura no computa para los planes de la Generalitat, que solo mide los kil¨®metros de la Xarxa Oberta de Catalunya (XOC). Una red propia, p¨²blica y neutral es la ¨²nica manera de asegurar la igualdad de acceso al servicio, se alega desde Pol¨ªticas Digitales. La Generalitat defiende que la Xarxa Oberta impide que la red de fibra ¨®ptica sea coto privado de ning¨²n operador de telecomunicaciones. La XOC, definida por la Generalitat como ¡°un proyecto de pa¨ªs¡±, la gestiona Cellnex, del grupo Abertis, tras compr¨¢rsela a Mediapro por 34 millones de euros.

La ronda del consejero Puigner¨® por diputaciones y consejos comarcales no pretende solo difundir las buenas intenciones del gobierno. El despliegue de la fibra tiene un coste econ¨®mico y el consejero es el encargado de buscar alianzas entre administraciones para rebajar la factura de la Generalitat. En Lleida, donde Puigner¨® firm¨® un pacto con Joan Re?¨¦, presidente de la Diputaci¨®n hasta ser detenido por un delito de corrupci¨®n, es necesario tender 1.500 kil¨®metros de cable nuevo. La Generalitat llevaba gastados 15 millones de euros con los que ha cubierto 500 kil¨®metros.

El compromiso de la Generalitat implica prestar conectividad de banda ancha a los municipios antes de 2023, lo que supone garantizar una conexi¨®n de al menos 20 megas. Una velocidad ut¨®pica, ahora, para muchos municipios, sobretodo del ¨¢mbito rural. Oriol Ba?os regenta R¨²stic Vilella, una casa rural para quince personas en Gisclareny (Bergued¨¤). ¡°Si necesitas internet para mandar un correo, te vale, pero la conexi¨®n a menudo va muy lenta¡±, dice. Se considera afortunado por tener acceso a una velocidad de 12 megas, algo excepcional en la zona.

Penurias de conexi¨®n

Su vecino, Enric Franch, due?o del restaurante Cal Miseria, lo tiene peor. En su negocio la cobertura es p¨¦sima y tiene contratado un paquete de acceso a internet que restringe su uso a 10 gigas al mes. ¡°Cuando los clientes me piden la contrase?a del wifi, les tengo que decir que no porque si los ni?os se ponen a mirar la tablet, se pulen la conexi¨®n¡±, apunta. Su restaurante no tiene p¨¢gina web, ¡°a nosotros se nos conoce por el boca-oreja¡±, ni tampoco puede aceptar pagos con tarjeta porque la poca cobertura inhabilita el dat¨¢fono. Si alg¨²n cliente no lleva dinero en el bolsillo, Enric le facilita un n¨²mero de cuenta para que, cuando pueda, le haga una transferencia. ¡°En veinte a?os solo me ha fallado una pareja, la gente es agradecida y cumple¡±, celebra. Ferran Puig es el presidente de Concatur, la confederaci¨®n catalana de agroturismo y turismo rural. Refiere que, junto con los reproches por los intrincados accesos, las quejas por una buena conexi¨®n a internet son una demanda recurrente: ¡°Y eso que la clientela del turismo rural supuestamente viene a descansar y desconectar¡±.

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