La emancipaci¨®n de los j¨®venes sigue sin remontar el impacto de la crisis
M¨¢s preparados que la generaci¨®n de hace una d¨¦cada, son pocos los j¨®venes que logran irse de casa antes de los 30
Los j¨®venes catalanes est¨¢n hoy mejor preparados y pueden presumir de un curr¨ªculum m¨¢s brillante que los de hace una d¨¦cada. Pero deben conformarse con lucir esos t¨ªtulos en casa de sus padres. M¨¢s educaci¨®n y mayores competencias digitales no sirven a la generaci¨®n actual para elevar los registros de emancipaci¨®n juvenil, que siguen estancados por debajo de los de 2009 y no remontan, por tanto, el fuerte impacto de la crisis econ¨®mica.
Las malas perspectivas las certifica el Indice Sint¨¦tico de Desarrollo Juvenil Comparado (ISDJC-2018), que analiza varios indicadores sociales y econ¨®micos de 46 territorios europeos: 28 pa¨ªses de la Uni¨®n Europea y 17 comunidades aut¨®nomas espa?olas. Catalu?a encabeza las cifras de emancipaci¨®n juvenil de toda Espa?a, pero est¨¢ por debajo de la media comunitaria.
La conclusi¨®n es que emanciparse antes de cumplir los 30 a?os es un logro. Adem¨¢s, los j¨®venes catalanes tienen m¨¢s dif¨ªcil irse de casa hoy que en 2009, a diferencia de lo que sucede en Navarra, Cantabria, Extremadura, Galicia y Asturias. Son algunas de las conclusiones del ISDJC-2018, un estudio elaborado por el Centro Reina Sof¨ªa sobre Adolescencia y Juventud de la Fundaci¨®n de Ayuda contra la Drogadicci¨®n (Fad). El informe ha radiografiado el grado de desarrollo de la juventud europea con datos de empleo, educaci¨®n, emancipaci¨®n, calidad de vida y salud y uso de las TIC.
Los pobres niveles de emancipaci¨®n juvenil en Catalu?a est¨¢n directamente relacionados con los estragos de la crisis econ¨®mica. Las ¨²ltimas oleadas destacan una lenta recuperaci¨®n del empleo, superior a los valores del conjunto de Espa?a, pero lejana a los niveles de 2009. Adem¨¢s, se incrementa la tasa de temporalidad y los trabajadores por cuenta propia, con lo que no se ahuyenta el fantasma de la precariedad laboral.
Ninguna comunidad aut¨®noma escapa de los pobres registros en empleo y emancipaci¨®n, dato que sit¨²a a Espa?a en los ¨²ltimos puestos de la clasificaci¨®n de desarrollo juvenil comparado, solo por delante de Grecia, Bulgaria, Italia y Ruman¨ªa. En Europa, el 30% de los j¨®venes se emancipa entre los 20 y los 24 a?os, mientras que en Espa?a solo lo hace el 8%.
Las conclusiones del ISDJC son ligeramente m¨¢s pesimistas que los ¨²ltimos datos del bar¨®metro europeo Eurostat, que indica que los j¨®venes espa?oles se emancipan a los 29 a?os, de promedio. Los suecos, afirma Eurostat, son los m¨¢s precoces en abandonar el nido: 21 a?os. Les siguen a poca distancia daneses y luxemburgueses. Los dos estudios coinciden, sin embargo, en que Espa?a, y todas sus comunidades aut¨®nomas, superan la edad media europea de emancipaci¨®n juvenil, que se sit¨²a en los 26 a?os.
En Catalu?a, en la ¨²ltima d¨¦cada la tasa de emancipaci¨®n de los j¨®venes de entre 16 y 29 a?os ha pasado del 32,6% de 2007 al 23,8% de 2017, seg¨²n la Agencia Catalana de la Juventud. En Espa?a, seg¨²n los ¨²ltimos datos del Observatorio de Emancipaci¨®n del Consejo de la Juventud de Espa?a, referidos al primer semestre de 2017, la tasa de los j¨®venes emancipados menores de 29 a?os no llega al 20%.
Anna Maria Mass¨® es actriz y reside en Barcelona. Superada la treintena lamenta que, en lo que se refiere a vivienda, su situaci¨®n sigue tan inestable como cuando termin¨® sus estudios, hace una d¨¦cada. ¡°Ni siendo pluriempleada me alcanza para vivir sola¡±, lamenta. Al margen de los papeles que le puedan llegar para actuar, da clases de interpretaci¨®n, trabaja como animadora en fiestas y es socia del Bizarre Escape Room, una sala de aventuras en el barrio del Poble Sec. La hiperactividad laboral no le reporta solvencia como para independizarse. ¡°No me queda otra que compartir piso¡±.
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