El prior de Taiz¨¦ reta a los j¨®venes europeos a tener confianza y valor
M¨¢s de 12.000 j¨®venes se han reunido en un pabell¨®n de la feria de muestras de Ifema, en la capital espa?ola
Los cinco d¨ªas que dura el encuentro de j¨®venes europeos convocado en Madrid por la comunidad ecum¨¦nica de Taiz¨¦ entr¨® ayer en plena actividad una vez instalados en centros religiosos y casas particulares los aproximadamente 12.000 participantes extranjeros, a los que se han unido varios miles de chicas y chicos espa?oles. Se trata de una Babel de lenguas y religiones con centro en la feria de muestras Ifema, cuyo pabell¨®n 4 ha sido transformado en una iglesia provisional, alumbrada por una luz tamizada para la ambientaci¨®n.
El fundador de Taiz¨¦, el hermano Roger, fue inicialmente un te¨®logo protestantes, que m¨¢s tarde se convirti¨® al catolicismo, y su sucesor, el hermano Alois, es cat¨®lico, pero el encuentro es un crisol de religiones cristianas con un pasado de enfrentamientos y recelos, y muchas veces de terribles guerras de religi¨®n, que hoy se hermanan como si fueran una sola. Lo dijo ayer Alois en la alocuci¨®n que pronunci¨® en la catedral de la Almudena, en presencia de su titular, el cardenal arzobispo Carlos Osoro. ¡°Estos d¨ªas, estamos juntos procedentes de tantos pa¨ªses diferentes, y los que nos acogen son de diversas generaciones. Con todas estas personas que antes no conoc¨ªamos, vivimos la experiencia de una comuni¨®n y en ella encontramos una alegr¨ªa. Nuestra peregrinaci¨®n de confianza es tambi¨¦n una aventura interior. Querr¨ªa esta tarde llevar vuestra atenci¨®n a este aspecto de nuestra reuni¨®n: la confianza en los dem¨¢s, la confianza en nosotros mismos y la confianza en Dios son realidades ¨ªntimamente ligadas. La confianza no es ni ciega, ni ingenua, ni so?adora, sabe discernir el bien y el mal. Es la certeza de que, en cualquier situaci¨®n, incluso en las tinieblas, un camino de vida puede abrirse¡±.
Gran parte de su meditaci¨®n, en varios idiomas, se centr¨® en ilustrar a los reunidos sobre la necesidad de tener confianza y valor. Para ello cit¨® a santa Teresa de ?vila, ¡°esa mujer excepcional del siglo XVI que a¨²n hoy nos inspira¡±. Invit¨® a cantar las palabras de la m¨ªstica espa?ola: ¡°Nada te turbe, nada te espante, quien a Dios tiene nada le falta¡±, y sobre todo, a ser valientes a la manera que lo fue la m¨ªstica espa?ola.
La oraci¨®n escuchada en Ifema, la primera del encuentro, congreg¨® con una sola vos a todos los j¨®venes en torno a los hermanos de la comunidad de Taiz¨¦, en cuyo monasterio conviven hermanos de decenas de iglesias si se tiene en cuenta que los evang¨¦licos, com¨²nmente conocidos como protestantes o luteranos, forman cientos.
En un pabell¨®n inmenso de Ifema, lleno hasta el fondo, los cantos de Taiz¨¦ sonaron en muchos idiomas y, tambi¨¦n, el impresionante silencio que se mantuvo durante minutos, respetado por miles de j¨®venes para aportar el indudable tono espiritual al encuentro.
Este domingo, fiesta de guardar para todo cristiano, los j¨®venes se reparten por las iglesias y templos de sus respectivas confesiones, convenientemente informados por la organizaci¨®n de sus lugares concretos, y se anunciar¨¢ la sede del pr¨®ximo encuentro europeo, a finales de 2019, con varias capitales en la lista de espera.
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