El arte serio se parte de risa

El escritor Caballero Bonald sentenci¨® en estas p¨¢ginas hace un par de a?os: ¡°La literatura, sin humor, es un serm¨®n¡±. Y el poeta y pintor franc¨¦s Jean Cocteau defend¨ªa que ¡°tener estallidos de risa denota un alma excelente¡±. No parece, por tanto, tan descabellada la propuesta de Du¨®logos: un ciclo que marida algunos de los c¨®micos m¨¢s irreverentes con artistas de diferentes ramas en Conde Duque, en cinco sesiones, desde el pasado jueves hasta abril.

La propuesta parte del clarinetista Daniel Broncano: dirige el festival M¨²sica en Segura, y el a?o pasado le propuso a su hermano David subir al escenario con el pianista cl¨¢sico Mario Mora, para conjugar sonatas y mon¨®logos. El p¨²blico no solo fue masivo, sino mucho m¨¢s joven de lo que acostumbran quienes se acercan a este tipo de arte. Conde Duque retoma la idea, de nuevo con Daniel Broncano al frente, y la expanden: Ignatius compartir¨¢ coreograf¨ªa con la bailarina de danza contempor¨¢nea Poliana Lima; Quequ¨¦ recitar¨¢ a Calder¨®n de la Barca junto a la compa?¨ªa Grumelot; Joaqu¨ªn Reyes debatir¨¢ sobre un lienzo invisible con el artista conceptual Jaime Vallaure, y Javier Cansado har¨¢ de improvisado rapsoda con el escritor y recitador Ernesto Rodr¨ªguez.

El ciclo se estren¨® el jueves con David Broncano y Mario Mora sobre el escenario, ante un piano de cola. En todos los casos, el humor y el arte compartir¨¢n espacio de la forma m¨¢s equitativa posible. Puede que hasta se confundan. ¡°A quienes son habituales de mis conciertos les he dicho que no se esperen un concierto, y a quienes vienen por los mon¨®logos de David, que no se esperen un mon¨®logo¡±, avis¨® el pianista, y a?adi¨®: ¡°Eso s¨ª, lo que sale de ah¨ª es una mezcla explosiva. No s¨¦ si para bien o para mal. De momento se han agotado las entradas, no me hago responsable¡±.

Ignatius asegura que se va a tomar muy en serio las coreograf¨ªas de su compa?era de baile, y que piensa ¡°llenar el escenario con su cuerpo¡±. Joaqu¨ªn Reyes le responde: ¡°Claro que vas a hacerlo. En tus funciones siempre te quitas la camisa y expandes tu cuerpo, y obligas a alguien del p¨²blico a chuparte un pez¨®n. Es muy pl¨¢stico todo¡±. Respecto a su n¨²mero con el artista conceptual, el humorista chanante afirma: ¡°Yo estudi¨¦ Bellas Artes y s¨¦ mucho de arte conceptual. Mis obras eran tan cutres que me met¨ª de lleno el arte pobre, ese movimiento italiano¡±. Quequ¨¦, que interpretar¨¢ La vida es sue?o con lo dos componentes de la compa?¨ªa Grumelot, anticipa: ¡°Aqu¨ª se habla de acercar la cultura al pueblo, pero yo quiero mantener el elitismo en torno a la obra de Calder¨®n. Que no se entienda nada, que ser¨¢ lo m¨¢s probable cuando me toque recitar a m¨ª¡±.

Iniciativas como la de Conde Duque coinciden con lo que apuntan algunos expertos sobre la ¡°intelectualizaci¨®n del humor¡± con la hornada de nuevos c¨®micos, frente al estilo m¨¢s sencillo y escatol¨®gico de Ar¨¦valo o Los Morancos. ¡°Podr¨ªa ser, en cuanto a que conlleva una reflexi¨®n¡±, opina Ignatius.

Aunque el humorista canario advierte: ¡°Pero conlleva un peligro. La comedia no puede convertirse en un di¨¢logo bizantino, porque al fin y al cabo, consiste en hacer re¨ªr a la gente. Es bonito que nos emparenten con este tipo de artes en Conde Duque, pero al final del d¨ªa, yo tengo m¨¢s que ver con Ar¨¦valo que con una bailarina contempor¨¢nea¡±.