¡°Fui mantero y ahora soy imagen de la integraci¨®n¡±

Viste pantalones vaqueros, chaqueta impecable y camisa a cuadros. Habla un espa?ol muy correcto con marcado acento africano. Como se ve en la sesi¨®n de fotos, es coqueto. Luego se comprueba cuando se niega a desvelar su edad. Mamadou Thiaw naci¨® en Dakar (Senegal) y lleva m¨¢s de 20 a?os en Espa?a, donde comenz¨® trabajando como mantero durante ocho meses, luego encaden¨® varios trabajos y ahora dirige M¨¢s Humano Casa de Senegal, una instituci¨®n que asesora a subsaharianos cuando llegan a Madrid. ¡°Soy una buena imagen de la integraci¨®n¡±, resume ante una bandera de su pa¨ªs y otra de su pa¨ªs de acogida.

?C¨®mo lleg¨® a Espa?a?

Con un visado de turista, pero cuando llegu¨¦ no fue como yo esperaba: mis conocidos me dijeron que en Europa sobraba el trabajo, pero me cost¨® encontrar uno. Vi que era dif¨ªcil conseguir trabajo porque para eso tienes que tener permiso de residencia. Y no te dan permiso de trabajo si no tienes trabajo. Es la pescadilla que se muerde la cola.

?Qu¨¦ hizo entonces?

Varios compatriotas me dijeron que lo ¨²nico que se pod¨ªa hacer era la venta ambulante. Te llevamos a una tienda, compras cosas y las vendes en la calle. Yo no lo hab¨ªa visto antes. Y as¨ª empec¨¦. Trabaj¨¦ unos ocho meses de mantero. Es la ¨²nica manera de ganarte la vida cuando no tienes papeles. Mi primer puesto de mantero fue en el metro de ?pera, lo que llamaba mi oficina estaba en las escaleras.

?C¨®mo es la vida de mantero?

Los manteros son muy solidarios entre ellos, porque su vida no es nada f¨¢cil. Es una manera de ganarse la vida, de sobrevivir. Siempre est¨¢s pendiente de la Polic¨ªa Municipal y de la Polic¨ªa Nacional, unos requisan la mercanc¨ªa y otros te pueden llevar a comisar¨ªa varios d¨ªas por no tener documentaci¨®n en regla. Puedes estar tres o cuatro d¨ªas detenido, pero al d¨ªa siguiente est¨¢s otra vez en la calle vendiendo. La vida de un mantero es as¨ª, no tenemos nada claro de hoy a ma?ana. Sol¨ªa ganar unas 2.000 o 3.000 pesetas al d¨ªa [entre 12 y 18 euros].

?Por qu¨¦ no hay mujeres manteras?

Cuando yo era mantero, hab¨ªa mujeres, sobre todo en la estaci¨®n de Atocha, porque era m¨¢s amplia. Pero las cosas han cambiado mucho. Algunas mujeres, sobre todo las m¨¢s mayores, siguen trabajando en algo similar, pero vendiendo en rastrillos o mercadillos, y con su licencia. Es un trabajo como cualquier otro. En cuanto a las mujeres j¨®venes, algunas optan por v¨ªas que dan m¨¢s dinero, como la prostituci¨®n.

?Por qu¨¦ se considera imagen de la integraci¨®n?

Porque llevo m¨¢s de 20 a?os aqu¨ª, he sido mantero, he trabajado por cuenta ajena, y luego impuls¨¦ la Casa de Senegal, una asociaci¨®n cuyo objetivo es ayudar a los senegaleses y africanos a integrarse. Nuestras puertas est¨¢n abiertas para todos.

?C¨®mo surge Casa de Senegal?

De 2006 a 2008 hubo una gran llegada de cayucos a Espa?a. En ese momento pensamos, ?por qu¨¦ no abrimos un lugar donde asesorar a aquellos senegaleses o subsaharianos que llegan a Espa?a? Tomamos la decisi¨®n de abrir Casa de Senegal como una palanca donde todos pueden acudir para asesorarse y orientarse sobre cu¨¢les son sus derechos y deberes en el plano social, laboral¡­

?C¨®mo es la situaci¨®n de los senegaleses en Madrid?

En general, buena. Son gente trabajadora, que trata de integrarse, no son problem¨¢ticos. Algunos se ven obligados a vivir en pisos con mucha gente.

?C¨®mo abordar¨ªa usted el tema de la inmigraci¨®n?

La inmigraci¨®n no es un problema de los pa¨ªses africanos y de Espa?a, sino un problema global. Por eso debe tener una soluci¨®n global. Abogo por una inmigraci¨®n regular, ordenada y segura. As¨ª no perder¨ªamos nuestra dignidad. Pero si tenemos que saltar las vallas y venir con cayucos de modo irregular, una vez que estamos en la sociedad nos miran con otros ojos y nos despojan de dignidad.

?Cree que la sociedad espa?ola es racista?

El racismo no se puede generalizar. Hay algunos casos, pero los racistas son personas inconscientes. El racismo existe tambi¨¦n en Senegal y en ?frica, como hemos visto con guerras absurdas entre etnias. En Espa?a no veo racismo en general. Yo lo he sufrido poco, alguna discusi¨®n, pero poco m¨¢s. Incluso cuando no ten¨ªa papeles me pidieron pocas veces la documentaci¨®n.