3.323 manifestaciones en un solo a?o
La regi¨®n acogi¨® una media de casi 10 protestas al d¨ªa durante 2018 y se prev¨¦ un aumento para este a?o
Si una imagen dio la vuelta al mundo y se convirti¨® en viral en las redes sociales durante el a?o pasado, fue sin duda la manifestaci¨®n de miles y miles de mujeres con motivo del 8 de marzo. Esa multitudinaria protesta logr¨® ser la punta de lanza de las 3.323 protestas que registr¨® la regi¨®n durante 2018, cuando se ha vivido un ligero repunte respecto al a?o anterior. La gr¨¢fica de las concentraciones en los ¨²ltimos 11 a?os tiene forma de diente de sierra, con un m¨¢ximo durante el movimiento 15-M, y con un ligero decremento cuando este colectivo form¨® un partido pol¨ªtico y accedi¨® a las instituciones.
Las manifestaciones han subido en el ¨²ltimo ejercicio, al pasar de 3.189 en 2017 a las 3.323 durante el a?o pasado. Seg¨²n fuentes de la Delegaci¨®n del Gobierno en Madrid, el n¨²mero de participantes en esas concentraciones ha bajado en el segundo semestre. Si los organizadores informaban de que iba a haber un millar de asistentes, muchas veces no se ha pasado de tres o cuatro centenares. Y eso en el mejor de los casos, seg¨²n estas fuentes.
Para celebrar una manifestaci¨®n de forma legal es necesario comunicar con un m¨ªnimo de 10 d¨ªas de antelaci¨®n qui¨¦n la organiza, el horario, el recorrido previsto, el objetivo, el n¨²mero aproximado de personas y el dispositivo de seguridad. En caso de urgencia, este plazo puede acortarse a 24 horas. No se trata de que la Delegaci¨®n de Gobierno autorice la marcha, como popularmente se cree. Al rev¨¦s. Ese conocimiento previo motiva que se env¨ªe a la polic¨ªa para garantizar el derecho a manifestarse de manera segura.
La legislaci¨®n actual solo recoge que sean denegadas cuando pueda verse alterado el orden p¨²blico o corran riesgos las personas o los bienes. Durante el ejercicio anterior se dejaron sin celebrar 625 protestas y se prohibieron otras 141 por incumplir los requisitos previstos o por ir en contra del ordenamiento legal.
La gr¨¢fica desde 2008 muestra que los madrile?os han salido m¨¢s a la calle para mostrar sus protestas. Para la profesora del departamento de Sociolog¨ªa III (Tendencias Sociales) de la UNED y especialistas en manifestaciones, Ver¨®nica D¨ªaz Moreno, el punto de inflexi¨®n fue el 15-M, que irrumpe en la Puerta del Sol. ¡°Ese a?o se recoge poco porque comienza en mayo. Desde ah¨ª, subi¨® hasta 2013 que es el momento en m¨¢s se resienten los recortes de todo tipo¡±, explica la profesora de la UNED, que recuerda que ese a?o es cuando surgen las mareas y se da una mayor participaci¨®n democr¨¢tica.
Fin del 15-M
La ca¨ªda que se produce entre 2014 y 2016 obedece, seg¨²n la profesora, a que la gente piensa que se est¨¢ saliendo de la crisis econ¨®mica y que gran parte del movimiento del 15-M ya ha entrado en las instituciones. ¡°Que la gente salga a la calle es un buen s¨ªntoma. La poblaci¨®n defiende sus intereses porque algo no est¨¢ funcionando y quiere que los pol¨ªticos se lo solucionen¡±, recuerda D¨ªaz Moreno.
La profesora recuerda c¨®mo estos movimientos sociales han logrado sus objetivos. La marea verde evit¨® que se produjeran recortes en educaci¨®n. La marea blanca fren¨® la privatizaci¨®n de hospitales p¨²blicos, como el de M¨®stoles. Los colectivos contra las hipotecas obligaron a que se pararan los desahucios. Las mujeres evitaron que se aprobara la ley del aborto, que penalizaba de nuevo esta pr¨¢ctica. ¡°No es casual que los mayores salgan ahora a la calle y se manifiesten para mantener sus pensiones. Ahora se le tiene en cuenta y se evita que haya cambios¡±, a?ade la docente de la UNED.
La manifestaci¨®n m¨¢s numerosa en 2018 se produjo el 8 de marzo, d¨ªa de la mujer. ¡°Hab¨ªa mucha reivindicaci¨®n social, como acabar con las brechas salariales, profesional y las diferencias entre el hombre y la mujer¡±, explica la profesora. A ello tambi¨¦n se uni¨® un panorama muy inestable, como el PP arrinconado por los esc¨¢ndalos pol¨ªticos en los tribunales. ¡°Esa movilizaci¨®n femenina hace que aumente en todos los dem¨¢s aspectos de la vida social¡±, asegura D¨ªaz Moreno.
Lo que s¨ª ha cambiado es la forma de manifestarse en estos a?os. Si antes consist¨ªan en hacer un recorrido detr¨¢s de una pancarta y soltar varias soflamas. Ahora se busca montar algo llamativo, y no solo reivindicativo, para poder en los medios de comunicaci¨®n y tener as¨ª m¨¢s visibilidad. ¡°Se buscan esl¨®ganes muy llamativos, que haya fiesta o batucada. En algunos casos como el Pacma [partido en defensa de los animales] se desnudan para captar la atenci¨®n¡±, describe Ver¨®nica D¨ªaz. ¡°Un hecho destacado es que todas estas protestas son muy heterog¨¦neas¡±, a?ade.
?Cu¨¢l ser¨¢ la evoluci¨®n de las manifestaciones en Madrid en 2019? Todo va a depender de los resultados de las elecciones generales y municipales. ¡°Si gana la derecha, habr¨¢ m¨¢s movilizaciones. Ya se ha visto en Andaluc¨ªa con la llegada de Vox, que la gente ha salido a la calle para reivindicar sus derechos. Si eso ocurre a nivel nacional, habr¨¢ muchas m¨¢s manifestaciones¡±, aventura la profesora de la UNED.
Tradicionalmente, las personas de izquierda o m¨¢s progresistas son las que m¨¢s se han manifestado. Seg¨²n D¨ªaz Moreno, eso se debe a que son los que m¨¢s tienen que perder, en especial en sus derechos. En temas tan delicados como la educaci¨®n, la sanidad y los derechos fundamentales. ¡°Si en las elecciones gana un bloque de izquierdas, se podr¨¢n manifestaciones puntuales como la de Col¨®n, pero no tan continuas como en la otra opci¨®n¡±, concluye la docente de la UNED.
El error de los taxistas al tomar la calle
El salir a la calle y reivindicar alg¨²n derecho suele tener una repercusi¨®n importante. Los medios de comunicaci¨®n suelen hacerse eco de las protestas m¨¢s destacadas y los pol¨ªticos meten esos temas en sus agendas, sobre todo si tienen un car¨¢cter negativo. As¨ª lo mantiene la profesora del departamento de Sociolog¨ªa III (Tendencias Sociales) de la UNED, Ver¨®nica D¨ªaz Moreno, que cita como excepci¨®n reciente la huelga de 16 d¨ªas protagonizada por los taxistas iniciada el pasado 21 de enero.
¡°Se pasaron de frenada. Gran parte de la poblaci¨®n se les ech¨® encima porque se deterior¨® la imagen de Madrid en una feria tan importante como Fitur¡±, se?ala D¨ªaz Moreno. ¡°No midieron cu¨¢les iban a ser las consecuencias y se enfrentaron con un presidente regional como ?ngel Garrido que no ten¨ªa nada que perder porque no iba a repetir como candidato¡±, afirma la profesora de la UNED. A ello tambi¨¦n se uni¨® que Garrido no quer¨ªa una soluci¨®n similar a la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau. ¡°Buscaba hacer lo contrario que en Catalu?a¡±, resume D¨ªaz Moreno.
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