Cuando Lady Gaga actu¨® en un s¨®tano de Madrid
Se cumple una d¨¦cada del doble concierto que la cantante estadounidense, entonces casi una desconocida, ofreci¨® en la antigua sala Ocho y Medio
?Qu¨¦ sinti¨® el p¨²blico durante la primera actuaci¨®n de los Jackson 5 en 1969? ?O en el debut de Madonna en un club de Nueva York en el 82? Quiz¨¢s, algo similar al primer concierto que Lady Gaga ofreci¨® en Espa?a, frente a un millar de personas en un s¨®tano de la Gran V¨ªa madrile?a. El 27 de febrero de 2009 Lady Gaga (Nueva York, 32 a?os) no hab¨ªa alcanzado el estatus de s¨²per estrella. Su m¨²sica se hab¨ªa popularizado gracias a Internet. Por eso la sala Ocho y Medio, entonces en el 13 de la calle Mesonero Romanos, se llen¨® hasta los topes en el concierto gratuito que organiz¨® su discogr¨¢fica, Universal, y la extinta red social MySpace. Como muchos seguidores se quedaron fuera, Gaga decidi¨® repetir el concierto para ellos.
¡°Hab¨ªa unas 800 personas haciendo cola, muchos maquillados como ella. Como se dice ahora, una fantas¨ªa¡±, relata Borja Prieto, entonces director de contenidos de MySpace. Tan solo hab¨ªa que hacerse amigo de Gaga en aquella red social e imprimir un pantallazo del perfil. ¡°All¨ª me di cuenta del incre¨ªble poder de Internet, Lady Gaga no exist¨ªa en los medios, solo online y, obviamente, lo pet¨®¡±, a?ade Prieto, que ahora dirige Est¨¢ pasando, una agencia de publicidad y marketing.
¡°Uno de los empleados de mantenimiento nos llam¨® porque hab¨ªa cola desde las ocho de la ma?ana¡±, recuerda Bel¨¦n Chanes, miembro del grupo L-Kan y organizadora de la fiesta Ocho y Medio, que actualmente se celebra en la sala But (Barcel¨®, 11). A primera hora de la tarde, la cola llegaba a Callao. Rub¨¦n Linde se pas¨® por all¨ª pocas horas antes del concierto. "Fui a un locutorio para imprimir la entrada y me acerqu¨¦. Nadie daba por hecho que habr¨ªa tanta gente", cuenta Linde, que finalmente no pudo entrar porque no llevaba el DNI.
La avalancha de p¨²blico pill¨® por sorpresa a los promotores. ¡°Acababa de salir su primer disco y se hab¨ªan promocionado los sencillos Just Dance y Poker Face¡±, apunta Angel Carri¨®n, jefe de producto de Universal. ¡°La sala tendr¨ªa que haber sido m¨¢s grande¡±, opina Tony Blanco, Dj y productor y uno de los asistentes. La elecci¨®n de una sala peque?a no fue casual: ¡°Quer¨ªamos hacer un concierto en una sala m¨ªtica de Madrid con la idea de emular los garitos de Nueva York en los que se hab¨ªa curtido¡±, recuerda Carri¨®n.
El tama?o del escenario ¡ªde apenas ocho metros cuadrados¡ª no impidi¨® que la diva botase, bailase y sudase, acompa?ada por Space Cowboy, su Dj, y dos bailarines. ¡°Flipaba con que hicieran coreograf¨ªas en ese peque?o escenario¡±, recuerda Bel¨¦n Chanes. No solo Chanes flip¨®, todos los asistentes sintieron que estaban ante una genuina estrella en potencia aunque actuase en una sala modesta.
Sobre las tablas, embutida en un body color carne, con un cintur¨®n y una americana negros y botas de tac¨®n desgran¨® sus incipientes composiciones: Beautiful Dirty Rich, Money Honey, Love Game y The Fame. Himnos electr¨®nicos que conectaron con una generaci¨®n. Tambi¨¦n se arranc¨® a capella con Quicksand, tema que compuso para Britney Spears. Un gui?o a la realeza del pop del momento, a la que poco despu¨¦s pertenecer¨ªa.
¡°Me sorprendi¨® lo comunicativa que era, la fuerza de su voz¡±, explica Blanco. ¡°Se meti¨® al p¨²blico en el bolsillo desde el minuto uno: tocaba y saludaba a las primeras filas que enloquecieron¡±, a?ade V¨ªctor Hermida, otros de los asistentes.? ¡°Nosotros flipamos, pensamos qu¨¦ l¨ªo, c¨®mo vamos a hacer para que toda esta gente no se enfade. Era lo m¨¢s grande que hab¨ªamos tenido, y eso que por ah¨ª tambi¨¦n pasaron estrellas internacionales como The Ting Tings y los l¨ªderes de Franz Ferdinand y Blur¡±, confiesa Chanes.
¡°Gaga me pregunt¨®: ¡®?Toda esa gente est¨¢ ah¨ª para verme?¡±, recuerdan los organizadores, Prieto y Carri¨®n. ¡°No. Toda esa gente no cabe y se quedaba fuera del concierto¡±. La int¨¦rprete no dud¨® en ofrecer a todos esos seguidores un segundo e improvisado recital. ¡°Flipamos¡±, dicen los organizadores. ¡°Gaga siempre ha buscado que sus seguidores reciban el mejor trato posible", afirma Carri¨®n.
Cuando le preguntan por aquella experiencia no duda de que vivi¨® un ¡°momento hist¨®rico¡± del pop en Espa?a. Casi dos a?os despu¨¦s de aquel mini concierto, a finales de 2010, la artista llen¨® el Palacio de los Deportes, con entradas a m¨¢s de 60 euros. ¡°Estuve en un concierto de Lady Gaga cuando nadie la conoc¨ªa¡±, repiten hoy en d¨ªa los asistentes. Ahora Gaga no solo llena estadios de todo el mundo o protagoniza series sino que acaba de ganar un Oscar. Est¨¢ a la altura de Madonna, Michael Jackson o Prince. ¡°Cuando alguien me dice que va a un concierto de Gaga, les cuento mi experiencia¡±, dice Hermida. ¡°Mi madre sostiene que Lady Gaga est¨¢ ah¨ª gracias a nosotros¡±, bromea Bel¨¦n Chanes, de Ocho y Medio.
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