Las aerol¨ªneas reabren el debate sobre el ruido del aeropuerto de El Prat

Nuevo cap¨ªtulo del debate sobre si el aeropuerto de Barcelona-El Prat debe operar con pistas independientes o segregadas. Las compa?¨ªas a¨¦reas, agrupadas bajo las siglas ALA, reclaman que ha llegado a hora de reestudiar un modelo que garantiza menos molestias para los vecinos pero que encorseta la actividad del aeropuerto. Javier G¨¢ndara, presidente de ALA, ha avanzado que reabrir¨¢n las negociaciones con los ayuntamientos que se constituyan tras las elecciones municipales.

El aeropuerto de Barcelona-El Prat funciona de manera distinta de como fue dise?ado. "Totalmente diferente", apunta Javier G¨¢ndara, presidente de la Asociaci¨®n de L¨ªneas A¨¦reas y director general de Easyjet en Espa?a. Con la operativa primitiva, los ruidos que sufr¨ªan los municipios afectados por las maniobras de despegue y aproximaci¨®n motivaron movilizaciones vecinales hasta lograr, en 2006, un protocolo que obliga a los aviones a desviarse expresamente hacia el mar para mitigar el impacto ac¨²stico sobre las zonas residenciales.

Gav¨¤, Viladecans, Castelldefels, Begues, El Prat, Sant Boi, Begues y hasta Sitges se dicen afectados por el bramido de los motores. La adopci¨®n de una configuraci¨®n de pistas segregadas aminor¨® la huella de ruido, pero la paz vecinal entre aeropuerto y municipios se tensiona, despu¨¦s de que ALA, una entidad que agrupa a m¨¢s de 70 compa?¨ªas, plantee reestudiar la conveniencia de un modelo que considera ineficiente para el funcionamento de la instalaci¨®n.

El protocolo de pistas segregadas implica racionar las operaciones de despegue y aterrizaje de cada pista, y contempla un giro a la izquierda, hac¨ªa el mar, en las maniobras de salida. Con el formato de pistas independientes se logra m¨¢s rotaci¨®n de movimientos en cada una de las pistas principales, a costa de que los aviones sobrevuelen los tejados de los barrios residenciales pr¨®ximos al aeropuerto. Los Ayuntamientos han insistido reiteradamente en que no hay otra opci¨®n posible al modelo actual porque es menester preservar la calidad de vida de los vecinos. El tema es tan sensible que algunos municipios, caso de Castelldefels, incluso tienen una oficina de atenci¨®n ciudadana centrada en tratar la problem¨¢tica de los ruidos de los aviones.

Pero el modelo de funcionamiento actual no convence a las compa?¨ªas a¨¦reas y Javier G¨¢ndara, en una comparecencia convocada para anunciar el balance de actividad aeroportuaria, aprovech¨® para demandar que se revise. Erigido en portavoz de las compa?¨ªas a¨¦reas, alega que carece de sentido plantear crecimientos del aeropuerto mediante "una terminal sat¨¦lite" si se sigue estando sujeto a unos par¨¢metros que limitan las operaciones. Preguntado sobre la negativa tajante que muestran los consistorios cada vez que se plantea la posibilidad de revisar el protocolo, G¨¢ndara apunt¨® que "hay elecciones municipales", y dijo confiar en que los comicios dejen unos consistorios abiertos a iniciar un di¨¢logo "sin l¨ªneas rojas". A?adi¨® que "la industria est¨¢ abierta a hacerse cargo de seg¨²n qu¨¦ temas", en referencia a la posibilidad de que las compa?¨ªas paguen compensaciones a los consistorios. "El derecho al medio ambiente est¨¢ ah¨ª, pero tambi¨¦n existe el derecho a la movilidad de los ciudadanos", apunt¨®.