Peret, m¨¢s all¨¢ de la rumba
Un documental hace un retrato ¨ªntimo de uno de los artistas m¨¢s populares de Espa?a que vivi¨® entre dos aguas, como gitano que triunf¨® en un mundo de payos
Para ¨¦l, la m¨²sica era una afici¨®n. Cantaba y tocaba la guitarra en casa, con la familia y los amigos/compadres gitanos en el bar El salchich¨®n, en el Raval barcelon¨¦s, sin tener ni la m¨¢s remota idea de que se convertir¨ªa a?os despu¨¦s en el rey de la rumba catalana. Peret, Pere Pubill Calaf, (Matar¨® 1935, Barcelona 2014) ¡ªcual mantero de estos d¨ªas¡ª tuvo que salir corriendo en m¨¢s de una ocasi¨®n cuando vend¨ªa de todo en la calle, en Barcelona, en Palma de Mallorca o Argentina, si aparec¨ªa la polic¨ªa. Se cri¨® y creci¨® dentro de las costumbres gitanas con las que convivi¨® no sin tensiones porque su vida, durante d¨¦cadas, estuvo entre esas dos aguas. ?l se sent¨ªa gitano, pero viv¨ªa en un mundo, en buena medida, payo. El documental Peret, yo soy la rumba traza un recorrido sobre la vida del genial artista catal¨¢n y compositor de rumbas mundialmente bailadas y, de paso, reivindica la paternidad de la rumba catalana y su famoso ventilador. Un retrato personal e ¨ªntimo, realizado por Paloma Zapata que se estrena ma?ana en una veintena de salas de cine de Espa?a, que ha contado con la complicidad de la familia de Peret que ya en los ¨²ltimos a?os le daba vueltas a la idea de hacer un documental sobre la rumba. ¡°A m¨ª me lo explic¨® cuando ya estaba enfermo, que hab¨ªa recopilado material entrevistando a gitanos de la ¨¦poca. Lo hizo con medios caseros. Cuando muri¨® pens¨¦ que ten¨ªa raz¨®n aunque ese material no era el adecuado¡±, explica Santa Pubill, nieta de Peret e impulsora del proyecto.
Peret muri¨® el 27de agosto de 2014 y grab¨® su ¨²ltima canci¨®n, Maruzzella, ¡ª una versi¨®n de la italiana de Renato Carosone¡ª diez d¨ªas antes de que falleciera por un c¨¢ncer fulminante. Esa fue la ¨²ltima de las 300 canciones que compuso o version¨® a lo largo de su vida, tambi¨¦n para otros cantantes y grupos, en una carrera que se inici¨® en un concurso al que se present¨® con 12 a?os en el teatro T¨ªvoli, de Barcelona, acompa?ado de su prima, con el nombre art¨ªstico de los Hermanos Montenegro. Entonces ya viv¨ªa en el barrio del Raval de Barcelona, en la calle dels Salvador, a d¨®nde fueron a parar muchas familias gitanas.
La de Peret lleg¨® de Matar¨® despu¨¦s de que su padre regresara de la Guerra Civil : ¡°naci¨® en el barrio Los Corrales de chabolas. Nos explicaba que era horrible, hambre, fr¨ªo, barro, miseria¡±, cuenta Santa, una de las confidentes de la extensa familia de mujeres que rode¨® siempre a Peret: su madre, sus t¨ªas, su mujer, hija, primas, nietas. Y muchas mujeres m¨¢s.
El documental recurre a recreaciones de algunos episodios de la vida del cantante, un recurso en el que el narrador es el humorista Andreu Buenafuente. Una de esas recreaciones es el bombardeo en 1938 en el que Peret ¡ª un ni?o de tres a?os¡ª , su abuela y dos de sus t¨ªas resultaron heridos leves: ¡°y dec¨ªan que tranquilos, que eran de los nuestros, desde entonces siempre me ha dado miedo esa expresi¨®n¡±.
Peret dej¨® muy pronto el colegio y apenas sab¨ªa leer los carteles ¡°porque la abuela dec¨ªa que en la escuela le llenar¨ªan la cabeza de ideas raras¡±, explica su hija, Rosita, en el documental que ha contado con la colaboraci¨®n de TVE y la televisi¨®n catalana. Desde cr¨ªo vendi¨® en los mercadillos, en la calle y puerta a puerta: ¡°La verdad es que explicaba que no le gustaba vender porque ten¨ªa que enga?ar¡±, apunta en la cinta su sobrina paya C¨¨lia S¨¤nchez-M¨²stich y autora de las memorias del cantante Peret, el alma de un pueblo. Hasta se hizo pasar por italiano para tener m¨¢s gancho en Palma de Mallorca.
Sin calle en Barcelona
La familia de Peret no est¨¢ nada contenta con el Ayuntamiento de Barcelona por la ¡°ausencia de un homenaje como creemos que merece en la ciudad en la que vivi¨® toda su vida y que le quiso tanto¡±, afirma Santa Pubill, la nieta del artista.No est¨¢n muy conformes, tampoco, con el mural mosaico que el consistorio impuls¨® como homenaje a la rumba en el que est¨¢ Peret ¡ªel retrato m¨¢s grande¡ª pero comparte espacio con m¨¢s, como Estopa o Gertrudis o Dusminguet: ¡°Es que no estamos hablando de lo mismo. Nosotros pensamos que Peret, como creador de un g¨¦nero, como lo es la rumba catalana, se merece una calle y lo pediremos¡±. De momento, los Pubill empiezan a estudiar otro proyecto de Peret que se qued¨® en el tintero, una escuela de rumba catalana.
Entre viaje y viaje ¡ªtambi¨¦n fue a Argentina y siempre en compa?¨ªa de las mujeres del clan¡ª recalaba en su barrio, el Raval, la calle de la Cera y el cine Padr¨®, donde Televisi¨®n Espa?ola grab¨® en 1974 A su aire, con un Peret que comparti¨® escenario con su familia y amigos. ¡°Fue como una perla en el archivo de TVE que ha sido muy importante para el documental. Un concierto aut¨¦ntico entre las grabaciones de plat¨® con Valerio Lazarov con sonido en playback¡±, comenta la directora de Peret, yo soy la rumba. Conoci¨® al artista en 2009 en el rodaje del video clip de la canci¨®n El muerto vivo. Zapata apunta que le interes¨® el personaje y explicar el origen de un g¨¦nero musical, el de la rumba catalana, que naci¨® en la calle. Lo dice despu¨¦s de haberse empapado de la lectura de Peret.Biograf¨ªa ¨ªntima de la rumba catalana, de Juan Puchades.
Un Peret al que le gustaban, y mucho, las mujeres, fueran gitanas o payas. Se fue a vivir con una paya, Lola, a Valencia. Una relaci¨®n que se cort¨® en seco porque su madre, Rosita, simul¨® una grave enfermedad para hacerle jurar que se casar¨ªa con una gitana. Lo jur¨® y se cas¨®, a los 22 a?os, con Santa que se sum¨® a la amplia familia que viv¨ªa en el pisito del Raval.
A finales de los 50 grab¨® su primer single Patio Flamenco, con dos temas, Lola y Recuerda. En esa misma ¨¦poca, Peret se engancha al fen¨®meno del turismo y se va al tablao Los Claveles de Calella de Mar. Cantaba, s¨ª, pero tambi¨¦n jugaba a cartas y ganaba mucho dinero. Una habilidad en el juego que aprendi¨®, reconoci¨® el mismo Peret, gracias a unas prostitutas de Palma de Mallorca que se entreten¨ªan con los naipes entre cliente y cliente. ¡°Mi abuelo era mujeriego, eso no lo escondi¨® nunca y mi abuela lo entendi¨® as¨ª. Ella era una mujer gitana muy tradicional, se quer¨ªa quedar en casa con la familia. Pero que a mi abuelo le gustaran las mujeres no quiere decir que fuera machista. M¨¢s bien todo lo contrario, sobre todo dentro de las costumbres de los gitanos. La verdad es que ¨¦l aprendi¨® mucho e intent¨® influir e instruir dentro de su comunidad. Siempre nos anim¨® a que estudi¨¢ramos y fu¨¦ramos independientes¡±, comenta Santa.
De Los Claveles, salt¨® a Madrid, al tablao El Duende, de Pastora Imperio y Gitanillo de Triana. Fue entonces cuando empez¨® a ser conocido en el artisteo: ¡°Es en ese momento cu¨¢ndo se acu?a el t¨¦rmino de rumba catalana, dec¨ªan que hab¨ªa un grupo de gitanos catalanes que hac¨ªan una rumba diferente¡±, explica Petitet en el documental, otro artista de la rumba e hijo de El Huesos, uno de los palmeros de Peret. El propio cantante hab¨ªa sostenido en numerosas entrevistas que la rumba catalana era la mezcla del rock de Elvis y ritmos caribe?os, especialmente del cubano P¨¦rez Prado.
¡°Yo no soy ning¨²n rey de nada, pero s¨ª he creado un g¨¦nero de rumba, la catalana¡±, manten¨ªa Peret cuando surgi¨® el debate del origen de la rumba catalana: ¡°Eso le amarg¨® bastante y coincidi¨® en su etapa de retiro espiritual, cuando sab¨ªan que ¨¦l no dir¨ªa nada¡±, a?ade Santa. Pero antes de ese retiro ¡ª¡±he visto una luz¡±, resum¨ªa el artista en 1982¡ª Peret se hizo mundialmente famoso. Las discotecas y los tablaos a finales de los 50 y los sesenta cerraban las noches con las rumbas de Peret y sus gitanos, sus inseparables palmeros: Toni y El Huesos. La noche del Hawaiano fue uno de sus primeros t¨ªtulos (1963) de ¨¦xito con una genuina actuaci¨®n que se ve en el documental que refleja otros hits gloriosos de Peret, como Mataron al gitano Ant¨®n (1968) o Una l¨¢grima (1972) ¡ª con una versi¨®n en italiano memorable¡ª que empez¨® a llevar su rumba por ciudades espa?olas y de Europa, primero, para dar el salto a Am¨¦rica.
Giras y m¨¢s giras con un p¨²blico payo que se rend¨ªa al ritmo de la m¨²sica y al duende que ten¨ªa Peret en los escenarios. Borriquito como t¨² (la canci¨®n es de 1968 aunque la fecha de lanzamiento fue 1971) surgi¨® tras una noche de juerga con Peret al volante ri¨¦ndose de s¨ª mismo y de los que quieren aparentar ser m¨¢s de lo que se es. Iba de bolo en bolo cuando un directivo de Televisi¨®n Espa?ola le dijo que ten¨ªa que representar a Espa?a en Eurovisi¨®n ¡ª ¡°ya que no has hecho el servicio militar, est¨¢s en deuda¡±, m¨¢s o menos le conminaron¡ª a lo que se opuso: ¡°No me apetec¨ªa nada¡±, lleg¨® a reconocer en 1974. Fue con Canta y se feliz y qued¨® noveno. ¡°Y con muchos problemas porque le amenazaron y hasta la familia lleg¨® a tener escolta policial¡±, dice su nieta. ¡°A Peret le dieron un permiso de armas especial y en esos tiempos llevaba rev¨®lver¡±, concreta Jorge? Ragna, el que fue manager-tour del artista catal¨¢n a?os despu¨¦s. Unas amenazas que se situaron en la extrema izquierda en un momento en el que en la Espa?a de Franco ordenaba la ejecuci¨®n del anarquista Salvador Puig Antich. La fama le llev¨® a ser protagonista de pel¨ªculas muy identificativas de ese tardofranquismo, como Amor a todo gas (Ram¨®n Torrado, 1968),
¡°Contaba que empez¨® a cansarse de tanta gira y tantos conciertos¡±, relata la directora del documental que se apoya en un acontecimiento familiar, la boda de Amy, la bisnieta de Peret, para trabar la historia de su proyecto. Saboreando fue uno de sus rumbas estrella de finales de los setenta, cuando la familia Pubill ya hab¨ªa dejado atr¨¢s el piso de la calle Salvadors. Primero fueron a uno del Eixample y ya con una situaci¨®n financiera m¨¢s holgada compraron otro en la zona alta de Barcelona, en Tenor Vi?as y una finca en Matar¨® donde se instal¨® toda la familia ¡ª un reinado de mujeres, a todas luces¡ª y donde Peret jugaba a front¨®n.
¡°En cualquier caso, Peret tuvo vista y en un momento en el que corr¨ªa cierto peligro de que se le pudiera encasillar con una ¨¦poca pasada, se retir¨®", opina Ragna, tambi¨¦n entrevistado en el documental. En 1982, Peret se convierte en el ¡°hermano Pedro¡± de la Iglesia Evang¨¦lica de Filadelfia. Precisamente una de sus rumbas religiosas fue el germen de uno de sus ¨¦xitos m¨¢s redondos: Gitana hechicera. No le sal¨ªa a Peret la m¨²sica que buscaba cuando le hicieron el encargo de tema para la clausura de los Juegos Ol¨ªmpicos de Barcelona y se acord¨® del estribillo de uno de sus temas de iglesia: ¡°Jesucristo es poderoso, Jesucristo tiene poder¡±. Cambi¨® Jesucristo por Barcelona y la letra de la rumba ya sali¨® sola.
Peret acab¨® desenga?ado de la iglesia ¡ªla calific¨® de secta¡ª y la dej¨® a la vez que empezaba a componer temas para otros, como Chipen o Los Amaya. ¡°Cada vez que cog¨ªa un taxi me dec¨ªan lo mismo, que volviera a cantar", explicaba en una entrevista a Justo Molinero. Y regres¨® en plena Barcelona preol¨ªmpica con m¨¢s rumbas como No se pue aguantar (1991). Los conciertos se sucedieron y las giras tambi¨¦n. Ragna, el manager que le acompa?¨® a Peret en 30 conciertos desde 2008 a 2014, destaca del artista la seriedad en sus compromisos y lo disciplinado que era: ¡°Pod¨ªa salir de Benidorm de un concierto por la noche y conducir hasta Lugo porque ten¨ªa otra actuaci¨®n al d¨ªa siguiente. Se tomaba la profesi¨®n muy en serio¡±. Cuenta que era muy inteligente y con una capacidad musical extraordinaria: ¡°En sus primeros a?os hizo muchas adaptaciones musicales de temas caribe?os. Por ejemplo, su Mataron al gitano Ant¨®n era una adaptaci¨®n de Mataron al negro Bemb¨®n de Ismael Rivera. Y tambi¨¦n adapt¨® a su ritmo de rumba otras canciones de autores caribe?os como P¨¦rez Prado o Rolando Laserie y se preocup¨® en poner los derechos de ellos¡±.
Ragna, que defin¨ªa a Peret como un hombre muy inteligente y bien informado, cuenta que los pol¨ªticos no le gustaban nada porque enga?aban: ¡°Dijo tenerlo claro desde que Adolfo Su¨¢rez dijo aquello de puedo prometer y prometo¡±. Pese a ese desapego pol¨ªtico, Peret se apunt¨® al Concierto por la Libertad que organiz¨® ?mnium en 2013 en el Camp Nou: ¡°entonces le tacharon de independentista y eso no es verdad. Mi abuelo defend¨ªa las libertades y el derecho a decidir para ¨¦l era una de ellas¡±, apostilla Santa. Para la ocasi¨®n, Peret volvi¨® darle una vuelta a Gitana Hechicera y ¡°Barcelona poderosa¡± se torn¨® en ¡°Catalu?a poderosa¡±.
Su nieto, el tambi¨¦n m¨²sico y guitarrista Dani Pubill, que asumi¨® la direcci¨®n musical de Peret en los ¨²ltimos once a?os, explica que su abuelo estaba cansado de tanto viaje y que rechaz¨® muchas ofertas, como una gira por Jap¨®n en 2012: ¡°lo que s¨ª ten¨ªa ganas era de hacer m¨¢s canciones y volver un poco al origen de todo, a cuando la m¨²sica era, como dec¨ªa, una afici¨®n. En cuanto supo el diagn¨®stico y que le quedaba poco tiempo de vida me dijo que quer¨ªa grabar un disco y as¨ª lo hice con una base y su voz¡±. Desde el respecte fue el disco p¨®stumo de Peret que poco antes de morir, cuando ya estaba entre m¨¦dicos y hospitales, subi¨® al que fue su ¨²ltimo escenario, en Valls (Alt Camp): ¡°Me han dicho que lo ten¨ªa que cancelar. Pero aqu¨ª estoy¡±.
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