El PSC estrena sede y sonrisas
Tras una d¨¦cada de declive y de ¡®proc¨¦s¡¯ destructor de partidos, los socialistas catalanes retornan a sus mejores a?os
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El PSC estren¨® este domingo su nueva sede como cuartel de noches electorales y lo hizo en un retorno a sus mejores a?os. Tras una d¨¦cada de declive y de proc¨¦s destructor de partidos, los socialistas catalanes volvieron a sonre¨ªr. Manuel Cruz, candidato para el Senado, uno de los ¨²ltimos protagonistas en llegar a la central de Poblenou, entr¨® en el edificio repartiendo abrazos. Cruz hizo acto de presencia justo en el momento en el que la primera tanda de bandejas de comida se vaciaban en pocos minutos. Era el hambre del resistente, de sentir que vali¨® la pena salvar tantas pelotas de partido.
La nueva sede, el Casal Joan Revent¨®s, es un espacio fr¨ªo como la vieja sede de la calle Nicaragua pero con mobiliario y objetos de decoraci¨®n m¨¢s modernos, de un estilo low cost, plancha de madera de Ikea. Tambi¨¦n hay fotos hist¨®ricas de cuando el PSC era el rey del mambo metropolitano y dibujos de Eduardo Arroyo para identificar los ba?os. La c¨²pula del PSC sigui¨® el recuento en una sala de la cuarta planta a la que se accede por un montacargas. Herm¨®genes Alonso, simpatizante socialista, lleva a sus espaldas decenas de noches electorales, desde 1979. Alonso lleg¨® temprano y lamentaba que todav¨ªa no estuviera su ¡°cuadrilla¡±. Alonso quer¨ªa jolgorio, la noche del retorno del mundo de los muertos del PSC bien lo merec¨ªa, pero admit¨ªa que el cuerpo seguramente ya no daba para celebraciones pasada la medianoche.
Alonso recordaba su mejor fiesta electoral: las elecciones de 2003 que llevaron a Pasqual Maragall a la presidencia de la Generalitat. La segunda mejor velada electoral la vivi¨® en el Hotel Majestic, la de la mayor¨ªa absoluta de CiU en 1988. Alonso trabajaba en la empresa de megafon¨ªa de la fiesta pujolista y admite que aquello ¨Cy que Pablo Iglesias, el fundador del PSOE, le perdone¨C fue una noche para no olvidar.
En la segunda tanda de comida, a las 21.50, frente a un plato de tortilla de calabac¨ªn y cervezas sin alcohol, Olga Villa, de 28 a?os y secretaria de feminismo de las Juventudes Socialistas, confirmaba que estas eran las primeras elecciones que viv¨ªa con optimismo. ¡°Estoy en el partido desde 2008 y nunca he vivido un resultado ganador. No hemos ganado, es verdad, pero esto parece un retorno¡±.
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