¡°Un director de festival no disfruta de ning¨²n concierto¡±
Jos¨¦ Mor¨¢n es el m¨¢ximo responsable del festival Para¨ªso y conoce como pocos el engranaje de estos acontecimientos
Que un evento como Para¨ªso, seg¨²n est¨¢ de competido el universo festivalero, cierre su segunda edici¨®n con una asistencia de 25 mil asistentes es para celebrar. M¨¢s si su principal inter¨¦s se centra en "cuidar la experiencia del p¨²blico". Jos¨¦ Mor¨¢n (Le¨®n, 1967), su m¨¢ximo responsable, conoce como pocos el engranaje de estos grandes acontecimientos, durante quince a?os capitane¨®, junto a su hermano, un trasatl¨¢ntico como el Festival Internacional de Benic¨¤ssim y, estos ¨²ltimos cuatro a?os, se ha encargado de aportar contenido a las fiestas de San Isidro en calidad de director art¨ªstico.
?Cu¨¢ndo coge vacaciones?
Ese es un t¨¦rmino que no manejo. Intentar¨¦ desconectar una semana a finales de junio y volver corriendo. Tampoco me quejo, aunque me encantar¨ªa que ya hubiera pasado este mes. Lo m¨¢s duro es el cierre de la administraci¨®n.
?Se consigue disfrutar un festival siendo director?
Es imposible. Un director de cualquier evento no disfruta de ning¨²n concierto. Nuestra forma de disfrutar, o al menos la m¨ªa, es ver que la gente se lo est¨¢ pasando bien y que todo funciona. Son mil las tareas que surgen. Yo me paso la mayor parte del tiempo en la oficina resolviendo incidencias. El buen director es aquel que gestiona adecuadamente las crisis. Y en un festival todo son peque?as crisis.
Algo ver¨ªa
Lo ¨²nico que pude ver medianamente tranquilo fue Channel Tres, que me interesaba mucho. Lo dem¨¢s, muy poco. Me acerque a Peggy Gou y a Talabot, pero cinco minutos.
?C¨®mo es el trabajo previo? ?Es de los que est¨¢ todo el d¨ªa escuchando m¨²sica o tiene un equipo detr¨¢s?
Es un trabajo coral. Todos tenemos una inquietud musical af¨ªn. Aunque tambi¨¦n tenemos asesores externos para estar en forma y no perdernos nada.
?Es de Spotify o sigue comprando religiosamente en formato f¨ªsico?
Mi manera de escuchar m¨²sica son plataformas. No suelo comprar, m¨¢s all¨¢ de pagar mis cuotas. Luego hay que almacenar y no soy nada coleccionista.
?Qu¨¦ opini¨®n tiene sobre la m¨²sica urbana y el reggaeton, la tendencia del momento en muchos macrofestivales?
Somos conscientes que hay un movimiento del que debemos hacernos eco. Ya estamos prestando atenci¨®n y, sin duda, habr¨¢ m¨¢s presencia de algunos artistas que enriquezcan el festival. Somos bastante ecl¨¦cticos, viajamos por diferentes sonidos y vemos que nuestro p¨²blico tiene esa inquietud musical.
?Le molesta que se hable de Para¨ªso como el S¨®nar madrile?o?
Si nos tienen que comparar con alguien, mejor que sea con el S¨®nar. Pero nosotros celebramos el festival en un entorno natural, eso ya crea unas diferencias. Por otro lado, S¨®nar es tan grande que abarca muchas propuestas diferentes. Nosotros tenemos 49 actuaciones y debemos seleccionar muy bien lo que queremos. De todos modos, en mayo firmamos un acuerdo con ellos donde pretendemos aprovechar su conocimiento, sus contactos, su capacidad de creaci¨®n¡ Siempre manteniendo la independencia de Para¨ªso.
?C¨®mo vive el cambio de gobierno?
Madrid ha vivido en este ¨²ltimo tiempo una subida exponencial, no solo de ofertas, sino tambi¨¦n de creadores, de talento que ha decidido, en vez de irse a Barcelona, venir a Madrid. Eso lo percibimos todos los que nos dedicamos a la cultura. La nueva concejala de este ¨¢rea ser¨¢ Andrea Levy, que parece tiene una visi¨®n m¨¢s contempor¨¢nea de la cultura y empatiza con la parte musical. As¨ª que de momento tiene un voto de confianza.
Los festivales cada vez tienen m¨¢s presencia en la econom¨ªa de la ciudad. ?Qu¨¦ le pedir¨ªa a los nuevos regidores?
Existen muchas diferencias en las normativas para desarrollar un festival. Necesitamos una regulaci¨®n. Ahora mismo, en Madrid no se aplican la misma normativa en un distrito que en otro. Esto crea unos problemas brutales. Nos estamos rigiendo por un reglamento de hace 20 o 30 a?os, donde se obedece m¨¢s a construcciones de edificios que a eventos ef¨ªmeros, como somos los festivales. Me gustar¨ªa que las administraciones entendiesen el momento que vivimos. Es muy dif¨ªcil trabajar cuando la licencia de funcionamiento te la conceden 24 horas antes o incluso el mismo d¨ªa del evento. Animar¨ªa al nuevo gobierno a que metiese mano a esta situaci¨®n y crease una normativa aplicable a todos los promotores, en todos los distritos, para trabajar. Somos una industria.
"La sala maravillas era un refugio para marineros"
Jos¨¦ Mor¨¢n ahora vive en la zona de Pr¨ªncipe P¨ªo. Sin embargo, durante muchos a?os fue un ejemplar vecino de Malasa?a, donde regent¨® entre 1992 y 2000 la sala Maravillas. ¡°Fue un momento dorado. Era un refugio para marineros. Una bah¨ªa tranquila, donde se pod¨ªa escuchar buena m¨²sica. Est¨¢bamos en el momento y el lugar adecuados¡±, explica el que fuera cabecilla del movimiento indie. All¨ª se celebraron conciertos de Stereolab, Pastels, Los Planetas, Australian Blonde o Se?or Chinarro. ¡°Reuni¨® a un mont¨®n de personas que posteriormente fueron referentes en sus ¨¢reas¡±, sentencia sobre este espacio que no superaba el aforo de las 300 personas.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.