?ltimo desalojo policial entre protestas en el Barrio do Cura
Unos 12 'sin techo' son expulsados en Vigo de un inmueble de la calle Llorente y quedan sin "soluci¨®n habitacional". La federaci¨®n de asociaciones vecinales denuncia presiones a una pareja residente en una vivienda que se busca demoler
El Barrio do Cura, ese valioso territorio enclavado en el coraz¨®n de Vigo que sirvi¨® de cobijo durante m¨¢s de una d¨¦cada de avatares inmobiliarios a un centenar de personas sin hogar, queda definitivamente vac¨ªo. Los ¨²ltimos okupas del en¨¦simo inmueble desalojado, el n¨²mero 14 de la r¨²a Llorente, entre Pi y Margall y Torrecedeira, fueron forzados esta semana por la polic¨ªa nacional a abandonar el edificio. Eran una docena de vecinos sin techo, algunos con perros a su cargo, otros con problemas de movilidad y necesidad de muletas y una mujer enferma grave que inmediatamente tuvo que ser trasladada en una ambulancia del 061 al hospital. Durante todo el proceso, en el que se vivieron algunos momentos de tensi¨®n entre las personas obligadas por orden judicial a retirar sus pertenencias y marcharse a ninguna parte, la calle qued¨® cortada por los coches de los agentes. La escena se prolong¨® un par de horas, el tiempo con el que contaron los sin techo para recoger sus cosas y sacarlas de all¨ª.
Seg¨²n explica Juan Miguel Carollo, l¨ªder de la Acampada contra la Pobreza que perdura en la plaza del Ayuntamiento desde hace dos a?os y medio para pedir una salida digna para los cientos de personas sin hogar que hay en Vigo, estos 12 vecinos han sido desalojados sin que se les brinde ninguna "soluci¨®n habitacional". Uno de ellos, explica el activista que acoge cada noche a personas que quedan fuera de los albergues, "padece una fisura en la pelvis" por la que necesita m¨¢s de un mes de reposo. Otra es una persona con sobrepeso y dificultades de movilidad y dos de los residentes tienen problemas de alcoholismo que deben ser tratados. Por su parte, la mujer enferma, explica Carollo, "deber¨ªa estar hospitalizada hace tiempo". Algunos cobran alg¨²n tipo de prestaci¨®n, como la Risga, pero no est¨¢n capacitados para buscar una habitaci¨®n de alquiler y para esto, sigue reivindicando el portavoz de la Acampada, necesitar¨ªan que los servicios sociales les echasen una mano. "All¨ª ten¨ªan que haber ido los servicios sociales, con la polic¨ªa o como fuese, pero antes de desalojar hab¨ªa que haber estudiado cada caso, porque algunos necesitan claramente que los encaucen, que tengan alg¨²n tipo de seguimiento", denuncia Carollo.
El Ayuntamiento recuerda que hay camas vacantes en el albergue municipal y que existe la alternativa del concertado de los Hermanos Misioneros de los Enfermos Pobres de Teis. Aunque en estos refugios existen normas que obligan a estancias breves seguidas de periodos de espera en las que las plazas deben quedar libres para otras personas.
Las quejas por el tratamiento que se est¨¢ dando a las personas que moraban el Barrio do Cura no se han hecho esperar. Adem¨¢s de la Acampada contra la Pobreza, han manifestado su malestar el colectivo Os Ningu¨¦ns y la propia Federaci¨®n de Asociaciones Vecinales Eduardo Chao (Favec). En especial acerca del otro caso de desalojo que ha aflorado en los ¨²ltimos d¨ªas, el de una vivienda en la calle Santa Marta que se planea demoler habitada por una pareja.
La presidenta de Favec, Mar¨ªa P¨¦rez, denunci¨® el mi¨¦rcoles la "presi¨®n" ejercida por el Ayuntamiento de Vigo contra estos residentes durante la lectura de un manifiesto realizada ante unas 40 personas concentradas delante del domicilio. Portaban pancartas en las que se pod¨ªan leer mensajes como "Ning¨²n desalojo sin realojo" y "En contra de la expulsi¨®n reaccionaria". P¨¦rez critic¨® que aquel d¨ªa de madrugada y a primera hora de la ma?ana agentes de la Polic¨ªa Local se desplazasen a la vivienda para levantar un informe. La l¨ªder vecinal considera este m¨¦todo como un modo de ejercer "presi¨®n" sobre los dos residentes para que abandonasen la casa.
Seg¨²n informa la agencia Europa Press, la presidenta de la Federaci¨®n Eduardo Chao explic¨® que el pasado mes de abril la empresa que lleva a cabo las obras de demolici¨®n y urbanizaci¨®n del Barrio do Cura instal¨® ante este edificio una valla de dos metros de altura en la que se indicaban resoluciones municipales que inclu¨ªan plazos de desalojo debido al "mal estado" de la vivienda, entre otros motivos. Mientras, dijo, la "¨²nica alternativa" que se les ofreci¨® a estas personas, que residen en este domicilio "desde hace 12 a?os", fue la reubicaci¨®n en un plazo m¨¢ximo de cinco d¨ªas tras el desalojo en el espacio determinado por el Servizo Municipal de Benestar Social. Adem¨¢s, Mar¨ªa P¨¦rez record¨® que, aunque la titularidad del domicilio corresponde al Ayuntamiento, estas personas llevaron a cabo obras de mejora durante los ¨²ltimos a?os gracias a un permiso municipal.
La representante de la federaci¨®n de asociaciones vecinales lamenta la falta de planificaci¨®n de "pol¨ªticas de justicia social" ejercida por el gobierno local y calificado como "publicidad medi¨¢tica" que Abel Caballero considere que no existe un problema de personas sin hogar en la ciudad. Los propietarios, seg¨²n P¨¦rez, no alquilan domicilios a las personas que perciben la Renta de Inclusi¨®n Social de Galicia Risga y que, mientras, los precios no dejan de crecer.
Ante esta situaci¨®n el portavoz del Foro Socieducativo Os Ningu¨¦ns, Ant¨®n Bouzas, tambi¨¦n reclama "una soluci¨®n habitacional" para las personas que viven en este tipo de viviendas y denuncia que, en el marco de las obras de desalojo y reforma del barrio, se intentasen tapiar edificios en los que todav¨ªa permanec¨ªan sus residentes. El hecho al que se refiere, y que tambi¨¦n recuerda Juan Carollo, es la clausura hace pocos meses de uno de los edificios de okupas del Barrio del Cura sin que se indagase previamente si quedaba alguien dentro. Efectivamente, en su interior dorm¨ªa una persona. La casa estaba siendo cerrada dentro del plan de transformaci¨®n del barrio y fue gracias a que se present¨® en el lugar para advertir a los obreros un compa?ero que estaba ausente que pudo salir el que faltaba.
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