P¨¢nico a la P¨²nica en el PP de Madrid
Las declaraciones de Aguirre y Cifuentes, fijadas para octubre, marcar¨¢n el inicio de la legislatura madrile?a y la campa?a nacional si hay repetici¨®n electoral en noviembre
En los despachos del PP, las agendas guardan dos fechas subrayadas en rojo. El 1 de octubre, Cristina Cifuentes declarar¨¢ como imputada en la pieza del caso P¨²nica que investiga la presunta financiaci¨®n ilegal de la formaci¨®n conservadora. Y el 18 de octubre, Esperanza Aguirre pasar¨¢ por el mismo trago. La cita en los juzgados de las dos expresidentas madrile?as marcar¨¢ el d¨ªa a d¨ªa de su formaci¨®n en las pr¨®ximas semanas. Afectar¨¢, seg¨²n admiten fuentes populares, al inicio de la legislatura en Madrid, donde Isabel D¨ªaz Ayuso tendr¨¢ que hacer equilibrios para mantener la paz interna del gobierno que une a PP y Cs mientras busca el apoyo de Vox. Impactar¨¢ de lleno en la campa?a de Pablo Casado si hay una repetici¨®n de las generales. Y mantendr¨¢ en tensi¨®n a quienes a¨²n temen a la guada?a de las imputaciones por sus antiguas responsabilidades en Madrid, donde el 57% de los consejeros de Aguirre est¨¢n o han estado imputados.
¡°A nadie se le escapa que quitarle al PP el mantra de que es un partido corrupto es absolutamente imposible¡±, reconoce un representante popular con varios lustros de trabajo en el partido a sus espaldas. ¡°Estamos probablemente en la antesala de generales, y en plena campa?a de las elecciones tendr¨¢n que declarar Esperanza, Cristina, el otro y el de la moto¡±, lamenta sobre las 40 imputaciones decididas a principios de septiembre por el juez Manuel Garc¨ªa Castell¨®n. Y remata: ¡°Nos presentamos a la legislatura y a unas posibles elecciones con un ambiente t¨¦trico y lamentable. Da grima. Echa para atr¨¢s. Est¨¢ todo cuestionado¡±.
¡°?Preocupaci¨®n?¡±, se pregunta otro alto cargo que cuenta con la confianza de la direcci¨®n nacional. ¡°El temor puede venir porque la P¨²nica pueda acabar afectando en alg¨²n momento a gente indiscutiblemente muy de confianza de Casado¡±, razona. ¡°Ser¨ªa un roto importante¡±.
Desde que el juez Manuel Garc¨ªa Castell¨®n decidi¨® imputar a Aguirre y Cifuentes, el presidente nacional el PP ha hecho un esfuerzo expl¨ªcito por desvincularse del pasado de su partido. ?l, que trabaj¨® codo con codo con Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar y Mariano Rajoy, es un l¨ªder nuevo para una etapa nueva, seg¨²n argument¨® esta semana, mientras procuraba separarse tambi¨¦n de Aguirre, su madrina pol¨ªtica.
¡°En el PP no cabe ninguna conducta que no sea ejemplar y no vamos a tolerar que nadie haga lo que no tenga que hacer¡±, dijo Casado, mientras el PP de Madrid segu¨ªa revuelto por las consecuencias de que se est¨¦ investigando a sus dos ¨²ltimas presidentas. Y a?adi¨®: ni a ¨¦l ni a su nuevo equipo se les puede ¡°hacer responsables de lo que pas¨® hace d¨¦cadas¡±.
Sin embargo, las consecuencias de las investigaciones de esos casos de corrupci¨®n pasados afectan al presente del PP de formas insospechadas. El Gobierno de la Comunidad de Madrid no ha aclarado a¨²n si los diputados que han sido designados para puestos ejecutivos mantendr¨¢n o dejar¨¢n el acta. Y esa decisi¨®n mantiene al grupo parlamentario en tensi¨®n: si por esas renuncias corre la lista, podr¨ªa acabar entrando en la C¨¢mara Juan Soler, exsenador, exdiputado y exalcalde de Getafe imputado en el caso Teatro (que investiga las presuntas irregularidades en la licitaci¨®n de la construcci¨®n de un teatro en la localidad madrile?a), que as¨ª volver¨ªa a estar aforado; adem¨¢s de otros aspirantes con un horizonte judicial dudoso.
¡°No es obligatorio dejar el acta al entrar en el Gobierno, pese a lo cual varios de ellos lo har¨¢n. Seguramente no ser¨¢n todos¡±, aseguran desde la Real Casa de Correos.
¡°Y no se puede mirar a situaciones del pasado con ojos de hoy, medir el pasado en funci¨®n del presente¡±, discrepa una fuente de la m¨¢xima confianza de Isabel D¨ªaz Ayuso, la nueva presidenta de la Comunidad de Madrid. ¡°En ese gobierno hab¨ªa dos golfos que estaban todo el tiempo a lo suyo¡±, apunta sobre los Ejecutivos que presid¨ªa Aguirre, en referencia al expresidente Ignacio Gonz¨¢lez, que estuvo en prisi¨®n preventiva por el caso Lezo, y a Francisco Granados, tambi¨¦n imputado. ¡°El resto firmaban lo que les dec¨ªan¡±.
Fuentes populares reconocen que la formaci¨®n conservadora estrena su gobierno de coalici¨®n con Ciudadanos ¡°en un contexto muy complicado¡±. La instrucci¨®n del caso P¨²nica se une a la investigaci¨®n del caso Avalmadrid en la Asamblea, que probablemente incluya la fiscalizaci¨®n de un aval concedido a una empresa participada por el padre de D¨ªaz Ayuso en 2011, cuando la hoy presidenta no era cargo p¨²blico. En paralelo, los estrategas del PP observan c¨®mo Cs intenta marcar perfil propio seg¨²n va cobrando fuerza la posibilidad de que haya una repetici¨®n de las elecciones generales. Y eso afecta al d¨ªa a d¨ªa de un gobierno de coalici¨®n que ha echado a andar marcado por las dudas y la desconfianza.
¡°Hemos dejado que se creen causas generales contra nosotros la pasada legislatura¡±, record¨® una fuente de la direcci¨®n del PP de Madrid sobre las comisiones de investigaci¨®n que fiscalizaron la labor de gobierno de la formaci¨®n conservadora, que lleva al frente de la regi¨®n ininterrumpidamente desde 1995. ¡°Y le han cogido afici¨®n¡±, ironiz¨® sobre el decisivo apoyo a la comisi¨®n de Avalmadrid de Cs, el socio gubernamental del PP. ¡°Espero que no se convierta en una trituradora de personas¡±.
Ser¨¢ un oto?o de penitencia para el PP. No es solo previsible que arranque la comisi¨®n de Avalmadrid, ni que lleguen las declaraciones de la P¨²nica. Se continuar¨¢n instruyendo los casos Lezo, G¨¹rtel, Campus de la Justicia¡ Y ya hay dirigentes del PP que temen que cualquier novedad en esos casos de corrupci¨®n sirva a Ciudadanos para tensar a¨²n m¨¢s la fr¨¢gil alianza de gobierno que le une con la formaci¨®n conservadora.
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