Los premios Gaud¨ª arrancan en un clima de precariedad del cine catal¨¢n

El panorama del cine catal¨¢n es desolador: nueve de cada 10 municipios catalanes no tienen una oferta cinematogr¨¢fica regular; de los 235 cines que hab¨ªa en Catalu?a en 2000 quedaban 137 en 2018; la cuota de pantalla de la producci¨®n catalana (pel¨ªculas con participaci¨®n catalana en la producci¨®n, en la lengua que sea) ha bajado hasta el m¨ªnimo hist¨®rico de un 5,3% del total de espectadores de cine; el n¨²mero de espectadores de pel¨ªculas en catal¨¢n ha tocado fondo con un 2,13%. Son algunos de los datos que muestra el Estudio sobre la exhibici¨®n cinematogr¨¢fica y el acceso del p¨²blico a la producci¨®n catalana, firmado por el investigador Francesc Vilallonga, de la Universitat Ramon Llull, por encargo de la Acad¨¨mia del Cinema Catal¨¤ y que se ha presentado en Barcelona este mi¨¦rcoles, d¨ªa en el que arranca la carrera por los premios Gaud¨ª, los galardones que entrega la Acad¨¨mia. Los casi 500 acad¨¦micos empezar¨¢n a votar este jueves entre las 59 pel¨ªculas y los premios se entregar¨¢n el 19 de enero en una gala en el auditorio del F¨°rum CCIB, en Barcelona.

"La soluci¨®n a esta situaci¨®n est¨¢ en la voluntad pol¨ªtica de tener un audiovisual normal. La pol¨ªtica de bienestar olvida que la cultura es la gran favorecedora de la libertad de pensamiento", ha se?alado Isona Passola, presidenta de la Acad¨¨mia, que ha criticado que la Generalitat siga con unos presupuestos prorrogados y ha recordado que la tasa del audiovisual, "peleada y justa", fue impugnada por el Tribunal Constitucional. La presidenta ha destacado que de las 14 pel¨ªculas de ficci¨®n en catal¨¢n que optan a los Gaud¨ª, "solo tres pasan de un mill¨®n de euros de presupuesto".

Vilallonga, cuyo estudio cuenta con una parte cuantitativa y otra cualitativa, con las reflexiones de 10 agentes profesionales del sector del cine, destaca que la situaci¨®n "responde, principalmente, a la crisis digital del sector, a la fragmentaci¨®n de p¨²blico entre otras ventanas de exhibici¨®n y al desequilibrio territorial de la oferta". El 67% de las pantallas activas se encuentran en Barcelona y alrededores, mientras que hay comarcas (como el Pallars Sobir¨¤, el Pla de l'Estany o la Alta Ribagor?a) que no tienen ning¨²n cine activo.

La producci¨®n catalana respecto del total estatal, que hab¨ªa llegado a ser de casi la mitad (48%) en 2010, ha descendido hasta el 30%. "En realidad, esta producci¨®n se ha mantenido estable", ha explicado Vilallonga, "lo que pasa es que la espa?ola se ha disparado: se han producido 266 pel¨ªculas, casi tantas como en Francia, donde la financiaci¨®n es 15 veces superior". Passola ha explicado que muchos profesionales catalanes "emigran" a Madrid a causa de los "presupuestos mis¨¦rrimos" catalanes, que no permiten un cine competitivo y hace que los profesionales se muevan "en una precariedad enorme".

Por lo que se refiere al cine en catal¨¢n, Vilallonga ha argumentado que "existe la percepci¨®n de que producir en catal¨¢n resta competitividad". El n¨²mero de pel¨ªculas rodadas en catal¨¢n, que en 2013 representaba un tercio del total, en 2018 ha sido un 22% porque ha subido significativamente el n¨²mero de pel¨ªculas con producci¨®n catalana que eligen el castellano o el ingl¨¦s como lengua original. "En muchas de estas pel¨ªculas, la participaci¨®n catalana en la producci¨®n, a menudo, es muy baja", ha apuntado la directora de la Acad¨¨mia, Laia Aubia. Passola ha defendido que "hay voluntad de rodar en catal¨¢n", pero que "el problema es el hundimiento de la financiaci¨®n catalana y la desaparici¨®n de las ayudas estatales para rodar en lenguas cooficiales".

A pesar de la disminuci¨®n del n¨²mero de salas, en los cinco ¨²ltimos a?os los cines catalanes han recuperado un 17% de espectadores: despu¨¦s de fuertes descensos entre 2003 y 2013, en 2018 el n¨²mero de espectadores se acerc¨® a los 20 millones, un tercio de los cuales se encuentran en la demarcaci¨®n de Barcelona. Otro dato positivo del estudio es que Catalu?a es el tercer territorio de la Uni¨®n Europea en asistencia a salas de cine, con una media de 2,58 entradas por habitante y a?o (en Espa?a es de 2,14). "Es una cifra muy alta, solo superada por Irlanda (3,35), Francia (3,11) y Estonia (2,67)", ha subrayado Vilallonga.