Un debate existencial con sedes en Madrid y M¨¦xico

El Estado mexicano ha sido omnipresente en muchos sentidos, pero sobre todo en el ¨¢mbito cultural. El gobierno de la revoluci¨®n y la postrevoluci¨®n escogi¨® legitimarse a trav¨¦s de la cultura nacional nacionalista, siempre alrededor de un partido hegem¨®nico, el PRI. A partir de los a?os 20, el fil¨®sofo Jos¨¦ Vasconcelos perfil¨® un modelo de gesti¨®n cultural que, de exitoso y controvertido, acab¨® derivando en un estereotipo que produce en serie artistas exitosos y f¨¢cilmente reconocibles. Basta asomarse por una tienda moderna de caf¨¦ para ver la cara de la pintora Frida Kahlo decorando las cafeteras que publicita George Clooney.

La nueva diplomacia cultural mexicana, representada esta semana en Madrid por Enrique M¨¢rquez, un poeta que particip¨® en los acuerdos de paz en 1994 con la guerrilla zapatista y lleva unas gafas rojas y un jersey de cuello alto que le dan un aire de profundidad intelectual, quiere acabar de una vez con esta herencia. "No nos motiva seguir promoviendo obsesivamente el muralismo mexicano y sus ra¨ªces, los indios representados por Diego Rivera, el ma¨ªz. Hasta la fridoman¨ªa. Ahora creemos que es m¨¢s importante destacar a los nuevos creadores. Tan importante es Tamayo ¡ªno los equiparo¡ª como los j¨®venes que hacen dise?o industrial", explica M¨¢rquez durante una entrevista en la Embajada de M¨¦xico en Madrid.

El director de la diplomacia cultural del pa¨ªs norteamericano ha venido a afinar con el Instituto Cervantes un programa para 2020 que se presentar¨¢ antes de acabar este a?o y se llamar¨¢ Espa?a en el coraz¨®n, como el libro de Pablo Neruda. Espa?a y M¨¦xico celebrar¨¢n sus diferencias y sus coincidencias a trav¨¦s de la m¨²sica, la literatura, la escultura. Este a?o, cuando se cumplen 500 del primer encuentro entre Moctezuma y Hern¨¢n Cort¨¦s en una calzada de Tenochtitlan, momento en el que el conquistador le regal¨® un collar de cuentas de vidrio, y el emperador correspondi¨® con uno de caracoles y camarones de oro, se ha hablado de la conquista largo y tendido. Pero el programa que se va a presentar va mucho m¨¢s all¨¢, seg¨²n M¨¢rquez, uno de sus ide¨®logos. Uno de sus puntos fuertes ser¨¢ un debate entre j¨®venes escritores, poetas, fil¨®sofos, que tendr¨¢ lugar en Madrid en primavera y acabar¨¢ de cerrarse en oto?o en la Ciudad de M¨¦xico. Un di¨¢logo de ida y vuelta con el Atl¨¢ntico de por medio.

"Qu¨¦ fuimos hace cinco siglos est¨¢ interesante. La historiograf¨ªa es vital. ?Pero en qu¨¦ estamos ahorita? ?Qui¨¦nes somos? Es muy importante saber el intercambio comercial y por qu¨¦ est¨¢ la banca espa?ola en M¨¦xico. Pero es importante tambi¨¦n el estado de nuestras culturas, qu¨¦ novedades. Qu¨¦ trae la poes¨ªa espa?ola. Es una reflexi¨®n conjunta de los dos pa¨ªses", ahonda M¨¢rquez frente a una Coca-cola Light, despu¨¦s de haber tenido una reuni¨®n con Luis Garc¨ªa Montero, director del Instituto Cervantes.

Hasta ahora la gesti¨®n cultural se hab¨ªa centrado en promover exposiciones de autores mexicanos por el mundo ¡ªalgo que hac¨ªan realmente bien¡ª y la gastronom¨ªa. Desde que hace nueve meses el presidente Andr¨¦s Manuel L¨®pez Obrador ¡ªun pol¨ªtico que pele¨® la presidencia durante m¨¢s de 20 a?os¡ª le propusiera coordinar, a trav¨¦s del canciller Marcelo Ebrard, una nueva diplomacia cultural, M¨¢rquez cay¨® en la cuenta de que los mexicanos tambi¨¦n son lo que piensan. "Emil Cioran, en un ensayo que public¨® en 1944 cuando lleg¨® a Francia, contaba que le entr¨® a?oranza por su pa¨ªs. Abomin¨® de la cultura francesa y dijo que los franceses se dedicaron a la gastronom¨ªa cuando dejaron de pensar. Que sustituyeron el cerebro por el est¨®mago. Cuando yo elaboraba la propuesta, pens¨¦ que est¨¢ bien ser reconocidos por nuestra comida, pero tambi¨¦n por lo que pensamos", se expande.

Esa ambici¨®n le lleva a proponerle a Garc¨ªa Montero todo un plan de colaboraci¨®n en Estados Unidos dirigido a las comunidades inmigrantes que hablan espa?ol. El Cervantes tiene sedes en Chicago, Nueva York y construye una en Los ?ngeles. M¨¢rquez cree que se debe celebrar la cultura "del espa?ol". Propone valorar la creaci¨®n cultural en torno a la lengua com¨²n.

La conversaci¨®n, sin embargo, deriva hacia la conquista. Es imposible obviar el elefante en la habitaci¨®n. En el 2020 es el aniversario de la ca¨ªda de Tenochtitlan. ?Habr¨¢ una nueva carta de L¨®pez Obrador pidi¨¦ndole al Rey de Espa?a, Felipe VI, que se disculpe cinco siglos despu¨¦s? "La pol¨¦mica que se gener¨® hace unos meses cuando se hizo p¨²blica la carta no ser¨¢ de tal intensidad, pero estar¨¢ presente. No va a desaparecer de un d¨ªa a otro", dice con misterio, lo que da a entender que el presidente mexicano volver¨¢ sobre el tema. Espa?a, entonces, rechaz¨® pedir perd¨®n por los abusos cometidos durante la conquista.

"?Qu¨¦ hubo aparte de arcabuces, aventureros, conquistadores? ?Qu¨¦ hubo de floreciente culturalmente? Una fregoner¨ªa. La discusi¨®n a veces es muy grosera, muy burda, muy maniqueista entre conquistadores y conquistados. Lo que tambi¨¦n hubo fue la conquista de una utop¨ªa, y de eso quiero que hablemos", ahonda. Para ello, sentar¨¢ a espa?oles y mexicanos a debatir. Un di¨¢logo entre primos hermanos.