La comunicadora Laura Tenenbaum defiende que hace falta coraje para afrontar la crisis clim¨¢tica
La periodista cient¨ªfica explica en Barcelona que la apartaron de la web de cambio clim¨¢tico de la NASA cuando Trump lleg¨® al poder
Ante el gran reto que supone la crisis clim¨¢tica, hay dos actitudes que chocan y son igual de inefectivas, defiende Laura Tenenbaum, comunicadora cient¨ªfica que ha trabajado 10 a?os en la NASA, y ha visto con sus propios ojos como el deshielo de los polos es una amenaza para el nivel del mar y, en consecuencia, para el planeta. Una de las respuestas es el terror, un p¨¢nico que paraliza ante el alcance del calentamiento global, y la otra es reaccionar con desinter¨¦s, desde el convencimiento de que no hay nada que hacer y es mejor distraerse con la televisi¨®n. El camino que ha venido a explicar esta comunicadora cient¨ªfica en el?Smart City Expo World Congress de Barcelona es el del ¡°coraje¡±, que quiere decir ¡°mirar con claridad y honestidad¡± el alcance del reto, y confiar en que no hay otra opci¨®n que no sea intentar frenar el cambio clim¨¢tico, aunque sea un ¡°reto dif¨ªcil¡±.
Tenenbaum no tiene claro si la humanidad ser¨¢ capaz de revertir la crisis clim¨¢tica, pero s¨ª que est¨¢ convencida de que no hay otra opci¨®n que intentarlo. Reconoce que todav¨ªa es un reto m¨¢s dif¨ªcil cuando emergen pol¨ªticos como Donald Trump, que niegan el calentamiento global. De hecho, ella ha explicado en esta entrevista con EL PA?S que la apartaron de la p¨¢gina web de cambio clim¨¢tico de la NASA?cuando el presidente de Estados Unidos lleg¨® al poder. Relata que la empezaron a censurar: le prohibieron escribir, publicar y gestionar las redes sociales de esta p¨¢gina, hasta que la despidieron, seg¨²n detalla. Ahora trabaja como comunicadora freelance para diferentes medios y hace conferencias.
Lejos del t¨®pico de que los ciudadanos son de ciencias o de letras, Tenenbaum tiene claro que todo el mundo lleva un cient¨ªfico dentro. Ella recorre el mundo impartiendo charlas para despertar el lado cient¨ªfico de todos los ciudadanos, convencida de que muchos esp¨ªritus cient¨ªficos pueden cambiar el curso de los acontecimientos. Reconoce que enfrentarse al cambio clim¨¢tico es un ¡°reto dif¨ªcil¡±, pero asegura que a ella le motiva. ¡°Quiero hacer cosas que cuestan esfuerzo, me hacen sentir viva. ?Por qu¨¦ estoy en este planeta? ?Para tener una vida f¨¢cil y estirarme en el sof¨¢?¡±, se pregunta. Esta no parece su opci¨®n.
Est¨¢ entusiasmada con la nueva generaci¨®n, representada en la figura de Greta Thunberg,?a quien califica de ¡°incre¨ªble¡±. Ella tiene el coraje que reivindica. Tenenbaum cree que ¡°lo que funciona con Greta es que la gente se identifica con su autenticidad. Ella no parece un fake, se la ve real. La gente quiere realidad¡±. Est¨¢ esperanzada con la nueva generaci¨®n, los que tienen entre 18 y 20 a?os. ¡°Se han alzado, lo entienden, son el futuro¡±, mantiene entusiasmada, pero tambi¨¦n lamenta que se encuentren un camino dif¨ªcil.
Tenenbaum comunica desde las emociones, es lo que le funciona, asegura, y es su manera de vivir. Ahora mismo es ¡°optimista¡± porque es su naturaleza. A pesar de que los pol¨ªticos, y no solo Donald Trump, remarca, no ponen las cosas f¨¢ciles, esta cient¨ªfica cree que hay miles de soluciones para reducir las emisiones de combustibles f¨®siles, responsables del calentamiento, y pone como ejemplo todos los que se han visto en el Smart City Congress en Barcelona, donde se han presentado diferentes soluciones para electrificar el transporte y hacer las ciudades m¨¢s amables para los ciudadanos. Las ciudades son las principales emisoras de CO2 y, por lo tanto, en ellas recae el poder de cambiar. Muchas soluciones no necesitan ni legislaci¨®n, se?ala, sino gobernantes con coraje que hagan m¨¢s zonas verdes, aceras m¨¢s amplias para dar seguridad a los peatones o ampliar los carriles bici. Avala m¨¢s las medidas positivas que las coercitivas.
Ante la resistencia al cambio de los ciudadanos, como est¨¢ pasando en Barcelona con el coche, Tenenbaum admite que cuesta mucho cambiar h¨¢bitos. Ella vive en California, un estado pionero en medidas medioambientales, como la prohibici¨®n de las bolsas de pl¨¢stico. Recuerda que tambi¨¦n cost¨® mucho, que hab¨ªa mucha gente que al principio se opuso. Por eso, concluye, ¡°los pol¨ªticos tambi¨¦n tienen que tener coraje, coraje de verdad¡± y a?ade que los ciudadanos tienen que ser responsables a la hora de escoger a sus representantes pol¨ªticos.
Adem¨¢s, Tenenbaum tambi¨¦n cree que hace falta un cambio de estilo de vida para revertir las emisiones contaminantes. Hay que apostar por la econom¨ªa circular, pero tambi¨¦n decrecer. Ella defiende que quiz¨¢s el discurso de tener menos no es seductor. ¡°Nadie quiere tener menos, suena mal, parece que tengamos que dejar algo¡±, dice. Pero tenemos que explicar que cuando prescindes de cosas materiales ganas otras. ¡°Si llego a casa y tengo una casa m¨¢s limpia tengo m¨¢s paz mental¡±, aclara. Cree que cada vez hay m¨¢s gente siguiendo la tendencia de ¡°tener m¨¢s tiempo para un mismo, para la familia, para los que quieres¡±.
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