¡°El punk sigue vivo, pero en los s¨®tanos¡±
La cantante Ana Curra jam¨¢s ha abandonado el punk, esa forma de vida que la erigi¨® en s¨ªmbolo de La Movida
Su perro, Treze, corre agitado por las estancias de la casa. Ana Curra dice que olfatea y seduce a quien llega nuevo, por si ella ¡°la palma¡± y se queda solo. A sus 61 a?os, sin embargo, no da la sensaci¨®n de que vaya a producirse tal augurio: la exl¨ªder de Par¨¢lisis Permanente est¨¢ en plena forma. A finales de diciembre publica un nuevo disco, Huaca, bajo su nombre. Mantiene en cada pista ese punk que lleva d¨¦cadas ejerciendo como forma de vida. Esa actitud de autogesti¨®n y ruptura le viene desde Los Pegamoides, junto a Alaska, en plena Movida Madrile?a, de la que es un icono.
?Echa de menos esa ¨¦poca?
Nada. Mi mente resetea continuamente cada ¨¦poca pasada. Entiendo que la historia se revise y que la gente mire atr¨¢s y compare etapas, pero a m¨ª, que ya lo he vivido, no me interesa. A veces pienso en esos listos que se aprovecharon de lo que hac¨ªamos, cuando no firm¨¢bamos contratos ni nada, pero me aburre contar siempre lo mismo.
Ahora da clases de piano en El Escorial y reside en Goya, ?c¨®mo vive la ciudad?
Voy a la sierra para el conservatorio y a ver a mis padres, pero suelo andar por el barrio o por el local de ensayo, aqu¨ª al lado. A Malasa?a ya casi no voy. Ha cambiado una barbaridad. Es muy cara, incluso m¨¢s que esto. Todos los barrios que tienen esencia acaban por ser absorbidos. Antes me pasaba el d¨ªa y la noche all¨ª. Yo me he criado en el Penta, donde me iba sola a escuchar m¨²sica. Le ha pasado lo que a Chueca, que cuando lleg¨® el ambiente era muy lumpen. Era muy de drogas y estaba lo m¨¢s granado. El mundo gay lo cambi¨®. Y Malasa?a igual. Ahora han aprovechado las grandes inmobiliarias para comprar todo y se ha perdido la atm¨®sfera.
?Queda alguna zona underground?
En barrios seguro que hay. Los vecinos de la periferia tendr¨¢n su radio de acci¨®n. Lo que pasa es que la masa va a Malasa?a. Y ya no frecuento tanto la noche, pero creo que antes hab¨ªa otro latido.
Entonces cantabais temas como Autosuficiencia, que dec¨ªa eso de ¡°no pienso en nadie m¨¢s que en m¨ª¡±. ?Era una profec¨ªa de lo que vendr¨ªa?
No iba por ah¨ª, por ese narcisismo individualista de ahora, sino por el ser original, por salirse del camino marcado. Por el ser autosuficiente e independiente y hacer las cosas por ti mismo. Eran ansias por vivir sin proyectarnos en el futuro, no este rollo del selfi. No busc¨¢bamos sacar nuestros morros, culo y ombligo, sino tener una identidad propia. De hecho, yo uso las redes sociales para mi trabajo, pero me cuesta. Porque me canso de hablar de m¨ª misma.
?Crees que restan la capacidad de rebeli¨®n?
Es el capitalismo, que absorbe todas las iniciativas. Y cada vez m¨¢s r¨¢pido. Al punk tard¨® 35 a?os en fagocitarlo, con las camisetas de Zara. Pero con el trap, que naci¨® en los barrios, lo han hecho en dos d¨ªas.
?Y con La Movida?
Tambi¨¦n, pero es que hubo dos periodos. El primero fue de experimentaci¨®n, muy ut¨®pico. Era arte por arte, acci¨®n por acci¨®n. No hab¨ªa un objetivo de comercializarlo. Despu¨¦s, cuando se instala el PSOE, empiezan a hacerla una marca nacional. Y eso molesta a mucha gente, porque era injusto: hab¨ªa movida en Vigo, en Barcelona, en Bilbao¡ Empieza a haber contratos muy gordos y se desvirt¨²a. De todas formas, si miras cualquier movimiento art¨ªstico pasa lo mismo: tiene un pico, que no dura m¨¢s de 10 a?os, y se desvanece.
?Sigue la escena punk?
Bueno, hay ligas y cada uno elige en cu¨¢l quiere estar. Esta es m¨¢s subterr¨¢nea. Es una actitud. El punk sigue vivo, pero en los s¨®tanos. Eso no significa que no me alegre una barbaridad de que La Polla Records llene dos d¨ªas el Wizink. Ole por ellos, que no han ganado un puto duro nunca y han creado cultura desde hace 40 a?os.
Y c¨®mo ve la ¨²ltima revoluci¨®n feminista, siendo un s¨ªmbolo del empoderamiento.
Yo siempre quise hacer cosas que me gustaban. No era consciente de ser feminista. Quer¨ªa desarrollar mis necesidades vitales y punto. Es verdad que los esquemas que te meten en la cabeza son los de estar detr¨¢s por ser mujer, aunque a lo mejor tienes m¨¢s cosas que decir que el que est¨¢ delante. Y, ahora, el feminismo ha venido para quedarse. No va a dar ni un paso atr¨¢s, pero falta tiempo para ponerlo en su sitio. Hay que esperar a ver qu¨¦ pasa con esas mujeres que est¨¢n radicalizadas, quiz¨¢s por despecho, y tiran piedras sobre nuestro propio tejado. O ver c¨®mo esos hombres que tenemos a nuestro lado, que caminan con nosotras y nos valoran, aprenden y corrigen sus cosas antes de flagelarlos. Es un movimiento muy fuerte y tiene que relajarse. No se pueden hacer festivales solo de mujeres: a la mujer hay que reivindicarla, tiene que dejar de ser asesinada y tiene que llegar a los mismos puestos, pero todo tiene que ser compartido. Si no, nos estamos equivocando.
El poder de las brujas
Ana Curra acaba de lanzar el single?Aprendiz de bruja, en el que apela al poder de las hechiceras y de las arrugas. De hecho, en los retratos del vinilo, tomados por Alberto Garc¨ªa-Alix, sale sin filtros. Como en esas instant¨¢neas en blanco y negro de hace a?os en el Rastro, punto dominical de encuentro para noct¨¢mbulos y pendencieros.
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