¡°En la Universidad de Dakar le¨ª a Calder¨®n y Cervantes¡±

Ousseinou Gueye, senegal¨¦s de 44 a?os, dominaba el castellano antes de que las autoridades espa?olas le dieran por vez primera un visado. Nunca intent¨® viajar por mar a pesar de que en su ciudad, Rufisque, los cayucos empleados en la ruta migratoria son famosos. Ahora es celador.

??C¨®mo es que usted dominaba el espa?ol antes de pisar Espa?a?

Yo estudi¨¦ Filolog¨ªa Hisp¨¢nica en la Universidad de Dakar, fui alumno del profesor Amadou Ndoye (gran defensor de nuestra lengua en Senegal) y formaba parte del C¨ªrculo Hisp¨¢nico, donde sac¨¢bamos un peri¨®dico en espa?ol. Ten¨ªamos que leer obras de Calder¨®n de la Barca, el Quijote de Cervantes, el Guzm¨¢n de Alfarache de Mateo Alem¨¢n o el M¨ªo Cid. Tambi¨¦n en esa ¨¦poca empec¨¦ a trabajar de gu¨ªa tur¨ªstico con espa?oles y daba clases en colegios. De ah¨ª me viene el amor a nuestra lengua hasta para coger la jerga y el lenguaje coloquial al que no ten¨ªamos acceso en la Universidad. Con los turistas hablaba de pelas y todo eso (risas). ¡°T¨² me estas enga?ando. T¨² eres de Vallecas, de mi pueblo¡±, me dec¨ªa uno de aquellos turistas. Y mira, ahora vivo en Vallecas de verdad.

?Cu¨¢ndo llega por primera vez?

Para el Foro Enciende ?frica en Tenerife en 2008 y en ese viaje aprovech¨¦ para visitar tambi¨¦n Madrid. En el consulado (espa?ol de Dakar) me llamaron porque dudaban de si ten¨ªa trabajo y dinero. Les dije que s¨ª, que era gu¨ªa tur¨ªstico y que en ese mismo momento pod¨ªa presentarme all¨ª con el autob¨²s lleno de turistas en el que ¨ªbamos por Dakar. Les dije que no ten¨ªa ahorros porque tengo mucha familia y no pod¨ªa ahorrar.

Y ahora son una familia medio espa?ola medio senegalesa

Conoc¨ª a mi esposa en la universidad. Ella tambi¨¦n fue alumna del profesor Ndoye, acab¨® en Espa?a con una beca de la AECID y tuvo la suerte de conseguir trabajo aqu¨ª. Cuando nos casamos en 2011 yo me vine a Madrid. En 2012 mi hija Deguene naci¨® en el hospital Gregorio Mara?¨®n. Y en 2014, ah¨ª tambi¨¦n, mi hijo Assane.

?No prob¨® el cayuco?

No iba a arriesgar mi pellejo por venir a Europa y mejorar mi situaci¨®n. Dej¨¦ los estudios y me dediqu¨¦ al turismo para sostener mi familia. Si yo me muero en un cayuco ?qui¨¦n les ayuda? Adem¨¢s, los turistas espa?oles me contaban que muchos de los que se ven¨ªan a Espa?a est¨¢n mal. Ten¨ªa claro que venir en cayuco no significa tener papeles y trabajo nada m¨¢s llegar. Y contaba con la ventaja de hablar espa?ol. Pero es cierto que las autoridades espa?olas no me daban el visado para venir de forma legal y eso abre a la gente el camino a probar otras formas de llegar.

?A pesar de la negativa de visado nunca pens¨® en llegar de manera irregular?

La primera vez que vine, los que hab¨ªan llegado a Espa?a en cayuco me dec¨ªan que era tonto por regresar a Senegal despu¨¦s de haber venido en avi¨®n sin arriesgarme (risas). Fui a ver a un amigo que trabajaba en la construcci¨®n en Parla. Hab¨ªa chicos que llevaban a?os aqu¨ª y solo uno trabajaba. Sus familias llamaban desde Senegal. Les presionaban y esos chicos no ten¨ªan nada que darles. Y yo no quer¨ªa eso.

?C¨®mo lleg¨® a celador?

Cuando llegu¨¦, no quer¨ªa trabajar en construcci¨®n. Mi mujer dec¨ªa que yo estaba so?ando. Me ofrec¨ªan cosas como vender a puerta fr¨ªa. ?C¨®mo va a trabajar un negro en eso? (carcajadas) Sabemos que por las ma?anas solo est¨¢n las abuelas en las casas y todo lo que se cuenta sobre los negros. ?C¨®mo voy yo a venderle a una abuela que cambie de empresa de gas? Encima que la convenza un africano, con el fr¨ªo que hace en Madrid (m¨¢s risas). Aunque tarde, acab¨¦ entendiendo que en Espa?a la puerta de entrada a un curro es la formaci¨®n. En una entrevista me dijeron que ten¨ªa un curr¨ªculum cojonudo, pero que solo pod¨ªan ofrecerme un trabajo de celador. Ni siquiera sab¨ªa qu¨¦ es un celador pero ten¨ªa dos hijos y no pod¨ªa elegir. As¨ª que empec¨¦ en 2015 cubriendo bajas y ah¨ª sigo. Muy contento.

?Percibe racismo?

A veces entro en el Metro y veo c¨®mo alguno a mi alrededor se pone las manos en los bolsillos (Gueye hace el gesto divertido). Si yo fuera un ladr¨®n ya sabr¨ªa d¨®nde lleva la cartera. Otras veces se sorprenden de que haya estudiado o incluso de que sepa escribir.

?Piensa usted quedarse en Madrid?

S¨¦ que tarde o temprano volver¨¦ a mi pa¨ªs, a mi ciudad, Rufisque. A mis hijos me gustar¨ªa llevarlos antes a un pa¨ªs franc¨®fono, como Senegal, por si un d¨ªa quieren irse para all¨¢. Que con el franc¨¦s puedan optar a un cargo en mi pa¨ªs sin que les digan que no son de all¨ª. Ha pasado con el hijo del presidente anterior, que no habla wolof (la lengua mayoritaria local) y no puede ni comunicarse con el pueblo. Mis hijos ahora hablan espa?ol y wolof. El ingl¨¦s lo dan en el cole y en las clases extraescolares.