Madrid se estrella en Am¨¦rica

¡°Madrid prepara una ola de privatizaciones¡±. El titular aparece en febrero de 2012 en el Financial Times y apunta directamente a las dos empresas p¨²blicas m¨¢s potentes de la Comunidad: Metro y el Canal de Isabel II. La operaci¨®n se valora en miles de millones de euros. Tantos ceros no solo retratan la angustia de una Administraci¨®n ahogada por la crisis econ¨®mica y dispuesta a vender las joyas de la corona por encontrar ingresos. Metro acaba de completar un hito de la ingenier¨ªa: 200 nuevos kil¨®metros de suburbano en 16 a?os. El Canal est¨¢ valorado en m¨¢s de 3.000 millones. Y las dos compa?¨ªas est¨¢n inmersas ya en la aventura americana, convertidas en referentes globales y competidores mundiales. Siete a?os despu¨¦s, todo ha cambiado.

Est¨¢ la Operaci¨®n Lezo, que afecta a la adquisici¨®n por parte del Canal de la sociedad brasile?a Emiss?o por 27 millones de euros: la investigaci¨®n ha puesto de relieve un supuesto sobrecoste de entre 6,4 y 9,6 millones de euros y un presunto reparto de mordidas de 5,4 millones. Est¨¢, tambi¨¦n, la venta de vagones con amianto al metro de Buenos Aires. O la sanci¨®n de Ecuador a Metro por discrepancias en la facturaci¨®n de los costes indirectos.

A lo largo del ¨²ltimo decenio, el Canal ha hecho negocios en Brasil, Colombia, Rep¨²blica Dominicana, Argentina, Panam¨¢, M¨¦xico, Per¨², Ecuador, Uruguay y Venezuela. Metro, por su parte, ha firmado contratos en Argentina y Ecuador. Son las piezas de una pol¨¦mica aventura americana, con muchas m¨¢s sombras que luces.

Colombia embarga acciones valoradas en 70 millones. La presencia del Canal de Isabel II en Colombia se centr¨® en la costa del Caribe. Sin embargo, las relaciones entre su filial en el pa¨ªs andino, Inassa (Sociedad Interamericana de Aguas y Servicios), y la Triple A, la sociedad de acueducto, alcantarillado y aseo de la ciudad de Barranquilla, derivaron en un intenso periplo judicial que tiene como trasfondo una trama corrupta, conocida como caso Lezo. La Fiscal¨ªa General colombiana embarg¨® hace un a?o acciones de Inassa, que suponen el 82% del capital de la Triple A, por un valor de casi 70 millones de euros. El ente acusador investiga si hubo sobreprecio en la compra de la filial colombiana por parte del Canal y analiza supuestos pagos millonarios que se realizaron, seg¨²n la instrucci¨®n del caso, entre 2000 y 2017.

El presidente de Colombia, Iv¨¢n Duque, respald¨® en su momento la acci¨®n legal y manifest¨® su confianza en la pronta recuperaci¨®n del control de los activos. Estas acusaciones a?aden le?a al fuego en un pa¨ªs golpeado por varios casos de corrupci¨®n, con el esc¨¢ndalo de los sobornos de la constructora brasile?a Odebrecht a la cabeza, y que, pese a eso, est¨¢ a la b¨²squeda constante de inversi¨®n extranjera. Mientras la Fiscal¨ªa contin¨²a con la investigaci¨®n, los directivos de la Triple A han puesto en marcha una operaci¨®n de lavado de imagen despu¨¦s de que los bancos cerraran el cr¨¦dito a la compa?¨ªa.

¡°La actuaci¨®n que ha hecho la justicia colombiana es archicontestable¡±, opin¨® a finales de noviembre el vicepresidente ejecutivo del Canal, Rafael Prieto Mart¨ªn, en una comparecencia parlamentaria. ¡°Es la primera vez que veo a un Estado tomar medidas cautelares contra otro Estado, porque recuerden que Canal de Isabel II es un bien p¨²blico¡±, sigui¨®. ¡°Creo que lo que un Estado no debe hacer con otro es tomar medidas cautelares de embargo y secuestro como si Canal de Isabel II fuera una organizaci¨®n de narcotraficantes¡±, continu¨®. ¡°V¨¦anse los tuits de ayer en El Heraldo, en Colombia; el agua sale marr¨®n desde que no operamos nosotros¡±, se quej¨®. ¡°Si ha habido alg¨²n error y hay que reparar, se repara, pero no creemos que haya que pasar la apisonadora y la demoledora por un trabajo que se ha hecho durante 17 a?os¡±, pidi¨®. Y subray¨®: ¡°Cuando entr¨® Canal de Isabel II en Triple A, hab¨ªa disenter¨ªa y c¨®lera, y cuando hemos terminado el ¨²ltimo a?o ¡ªantes de esas medidas de secuestro y embargo¡ª, ten¨ªamos el mejor indicador de calidad del agua de toda Colombia, despu¨¦s de Bogot¨¢¡±.

Buenos Aires (Argentina) reclama 15 millones de euros. En 2011, Subterr¨¢neos de Buenos Aires (Sbase), la empresa estatal que gestiona el metro de la capital argentina, compr¨® 36 vagones al Metro de Madrid. Hac¨ªa m¨¢s de una d¨¦cada que los Gobiernos de Espa?a y de Argentina hab¨ªan prohibido el uso, producci¨®n y comercializaci¨®n de fibras de amianto o de elementos que las contuvieran, pero los trenes vendidos a Buenos Aires conten¨ªan este material cancer¨ªgeno.

¡°Era considerada una compra sumamente conveniente por ser vagones m¨¢s econ¨®micos, con tecnolog¨ªa moderna, que no exig¨ªan esperar el tiempo de fabricaci¨®n. Hab¨ªa necesidad de mejorar urgentemente la frecuencia de la l¨ªnea¡±, explican desde Sbase.

El esc¨¢ndalo estall¨® en febrero de 2018. Sbase conoci¨® por la prensa la presencia de amianto en los vagones y los retir¨® preventivamente de circulaci¨®n. En la documentaci¨®n t¨¦cnica de los CAF 5000 constaba la presencia de ese elemento, pero la compa?¨ªa admiti¨® que posiblemente se le pas¨® por alto.

¡°Sbase realiz¨® la compra de buena fe. Se supone que Metro de Madrid siendo una empresa p¨²blica deber¨ªa respetar las leyes internacionales. As¨ª, Metro de Madrid tendr¨ªa que haber retirado esas piezas con asbesto para poder vender los trenes e informar fehacientemente al comprador¡±, se?alan en Sbase, que ha denunciado al Metro de Madrid y exige casi 15 millones de euros m¨¢s intereses por da?os y perjuicios.

Hasta el momento hay 13 trabajadores con dolencias asociadas a la exposici¨®n a este material t¨®xico, todos ellos operarios de un taller de la l¨ªnea en la que circularon los trenes comprados a Madrid.

Multa de 1,4 millones en Quito?

La aventura de Metro de Madrid en Ecuador comenz¨® en 2010. El inicio fue un convenio de cooperaci¨®n firmado por el alcalde de Quito de la ¨¦poca, Augusto Barrera, y la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, en 2009, para solicitar asistencia t¨¦cnica para la construcci¨®n del metro de la capital del pa¨ªs andino. Casi una d¨¦cada despu¨¦s Ecuador ha multado a Metro por pasar m¨¢s de un mill¨®n de euros en gastos que considera injustificados, lo que niega la compa?¨ªa madrile?a.

Se firmaron tres contratos en total, por un monto ligeramente superior a los 10,3 millones de d¨®lares (algo m¨¢s de nueve millones de euros), para desarrollar la fase de estudios, planificaci¨®n y dise?o del metro de Quito (que comprend¨ªa estudios del suelo, trazado definitivo y sistema de construcci¨®n del tren suburbano).

¡°El alcalde Barrera visit¨® 14 ciudades y decidi¨® que Madrid era la m¨¢s id¨®nea para solicitarle ayuda¡±, dice Edgar J¨¢come, exgerente del metro de Quito. ¡°Entre los criterios que se siguieron para tomar esa decisi¨®n estuvieron el sistema integrado de transporte en Madrid, su metro, que para entonces ten¨ªa 90 a?os, su notable experiencia en el desarrollo de proyectos para la movilidad, y su institucionalidad que funciona de maravilla¡±.

Sobre el litigio actual que la empresa madrile?a tiene con Ecuador, por tener gastos injustificados por 1,6 millones de d¨®lares (1,4 de euros), dijo que es un tema ¡°meramente burocr¨¢tico¡± y se debe a ¡°una mala interpretaci¨®n¡± de los costos directos e indirectos que est¨¢n definidos en la Ley de Contrataci¨®n P¨²blica ecuatoriana.