Juicio a un exjefe de El Corte Ingl¨¦s de Santiago por acoso sexual a una empleada
El juzgado investiga a otros cargos en Galicia, seg¨²n la CIG, por este caso en el que no se tomaron a tiempo medidas para atajar la situaci¨®n de la dependienta, que acab¨® marchando

Desde que se vio obligada a dejar su puesto de trabajo, Isabel Fraga no pisa un Corte Ingl¨¦s. Vendedora en el de Santiago desde el a?o 2000, denunci¨® que desde 2012 hasta finales de 2016 sufri¨® acoso sexual y moral por parte del que era su jefe de planta, el s¨®tano 1. Pasado el tiempo, varias compa?eras declararon que ella no era la ¨²nica trabajadora que soportaba esa situaci¨®n, y sin embargo, seg¨²n la v¨ªctima y su marido, Manuel Cao, que tambi¨¦n se vio empujado a dejar la misma empresa en la que hab¨ªa entrado en 1985, la dependienta fue dejada "a su suerte y no se activ¨® a tiempo el protocolo" contra el acoso.? El juicio penal contra el exjefe denunciado tendr¨¢ lugar ma?ana en los juzgados de Santiago, tal y como informa la Confederaci¨®n Intersindical Galega (CIG). El sindicato avanza, adem¨¢s, que el juzgado de Instrucci¨®n 3 de la ciudad ha abierto diligencias para investigar la actuaci¨®n en este caso de otros cuatro mandos de la firma en Galicia (varios ya apartados de sus cargos) y que les tomar¨¢ declaraci¨®n los pr¨®ximos d¨ªas 24 y 26 de marzo. Isabel Fraga, recuerda la CIG, "nunca cedi¨®" al acoso sexual de su superior y por eso esta presi¨®n acab¨® transform¨¢ndose en "acoso laboral y moral".
El periplo judicial de este asunto viene de lejos, precedido por sentencias favorables a la empleada y su pareja, tambi¨¦n exjefe de planta, por la v¨ªa civil. "El Tribunal Superior de Xustiza ya ratific¨® la existencia de acoso antes de entrar el caso en la v¨ªa penal", recuerda Roberto Alonso, miembro de la ejecutiva federal en representaci¨®n de CIG-Servizos. "Esperamos que el fallo que se dicte ahora sea ejemplar para que tanto El Corte Ingl¨¦s como el resto de las empresas tomen nota y se tomen en serio las situaciones de acoso que se producen en el d¨ªa a d¨ªa del mundo laboral". "Resulta lamentable que El Corte Ingl¨¦s siga sin reconocer la gravedad de los hechos y que la soluci¨®n para las v¨ªctimas fuese rescindir su relaci¨®n laboral ante la inacci¨®n de la empresa¡±, reprocha el sindicalista: "Dej¨® a esta traballadora indefensa y abandonada a su suerte".
Por su parte, fuentes del centro comercial Compostela consultadas por Europa Press con motivo del juicio han respondido que no se pronuncian sobre una cuesti¨®n que afecta "al ¨¢mbito privado" de un extrabajador. En su d¨ªa, recuerdan, se activ¨® un protocolo interno para analizar el caso y se procedi¨® como primer paso a la suspensi¨®n del entonces empleado, cuyo contrato fue rescindido finalmente.
En abril de 2016, seg¨²n denuncia el sindicato CIG, la mujer acosada fue a hablar con el jefe de personal del centro, "pero la respuesta que recibi¨® fue la de que no le diera importancia a esas conductas y que se ver¨ªa lo que hacer". "No se activ¨® de inmediato el protocolo", lamenta Alonso. Como consecuencia, Isabel Fraga pas¨® a una situaci¨®n de baja laboral en noviembre por un cuadro m¨¦dico de "trastorno adaptativo, con s¨ªntomas predominantes de ansiedad, con hipersensibilidad psicol¨®gica al acercarse a su centro de trabajo o hablar del tema".
A principios del mes siguiente, sigue relatando los hechos la CIG, la mujer envi¨® un burofax a la Citsa (Comisi¨®n Instructora de Tratamiento de Situaciones de Acoso), el ¨®rgano encargado de investigar estos casos en Hipercor y El Corte Ingl¨¦s. Y no fue "hasta el 2 de enero de 2017" (ella asegur¨® que hab¨ªa contado lo sucedido al jefe de personal en abril) que la comisi¨®n empez¨® sus actuaciones. Entre los d¨ªas 17 y 18 de enero entrevist¨® a "10 trabajadoras y trabajadores" que "evidenciaron que por parte del acosador hubo insinuaciones y comentarios molestos, humillantes, de contenido sexual, obscenos, proposiciones de car¨¢cter sexual, directas o indirectas, tocamientos o roces innecesarios", desgrana la CIG.
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