La poluci¨®n causa la mitad de los casos de asma infantil en Barcelona
Sant Mart¨ª, la zona alta de la ciudad y el Eixample, donde hay m¨¢s afectados
La contaminaci¨®n del aire en Barcelona todav¨ªa supera el m¨¢ximo legal fijado por la Uni¨®n Europea y el umbral recomendado por la Organizaci¨®n Mundial de la Salud (OMS). Seg¨²n un nuevo estudio, publicado hoy en la revista cient¨ªfica Environmental Research, esta poluci¨®n ¡ªsobre todo la de di¨®xido de nitr¨®geno¡ª provoca 1.230 casos de asma infantil cada a?o, el 48% del total. La zona alta de Barcelona, un amplio sector de Sant Mart¨ª y el Eixample concentran m¨¢s casos.
Si se lograse reducir la contaminaci¨®n hasta los niveles m¨ªnimos considerados inocuos, bajar¨ªa la incidencia de esta enfermedad casi a la mitad, seg¨²n calculan los cuatro autores del estudio, todos afiliados al Instituto de Salud Global de Barcelona, centro impulsado por La Caixa. En el an¨¢lisis, tambi¨¦n estiman que una quinta parte de los nuevos casos de asma infantil (18-19%, unos 470 casos anuales) se evitar¨ªan con tan solo cumplir las directrices de la OMS.
La misma investigaci¨®n ha revelado que la poluci¨®n del aire afecta a los menores de forma desigual, en funci¨®n del lugar donde viven y si ¨¦ste est¨¢ cerca de zonas de gran concentraci¨®n de tr¨¢fico. En algunos barrios de la zona alta, los ni?os y ni?as de familias adineradas desarrollan m¨¢s casos de asma. De acuerdo con los datos del estudio, es en el Eixample, Sant Mart¨ª y Sarri¨¤ donde se concentran los casos de asma asociados a los niveles m¨¢s altos de part¨ªculas en suspensi¨®n. Y es la misma distribuci¨®n que se repite con los diagn¨®sticos de asma atribuidos al carbono negro. Por ese mismo orden registraron las zonas con m¨¢s incidencia de asma derivada de la poluci¨®n de di¨®xido de nitr¨®geno, uno de los agentes del proceso de combusti¨®n de los veh¨ªculos a motor.
Los autores del estudio subrayan que una parte importante de ni?os afectados por asma viven en la zona alta de la ciudad, donde hay importantes arterias de entrada y salida de veh¨ªculos y donde los movimientos en coche privado son mayores que en otras zonas de la ciudad. En ese sentido, los cient¨ªficos construyeron un plano de la ciudad en el que clasificaron a la poblaci¨®n de Barcelona con diversos indicadores educativos y laborales, siguiendo los ¨ªndices socioecon¨®micos. ¡°Al superponer el mapa de contaminaci¨®n en Barcelona, nos dimos cuenta de que algunas zonas con mayor poluci¨®n son las de mayor nivel adquisitivo¡±, explica David Rojas, primer autor del estudio e investigador de la Universidad Estatal de Colorado y de ISGlobal.
El hallazgo es sorprendente porque, en otros estudios, se ha demostrado el efecto contrario, seg¨²n Rojas. ¡°Es muy claro en regiones de Reino Unido y de norteam¨¦rica donde las personas con menor nivel socio econ¨®mico tienden a vivir en zonas de mayor contaminaci¨®n¡±, dice. En Barcelona, sin embargo, ¡°la gente quiere vivir en zonas cercanas al centro, donde hay servicios y es f¨¢cil caminar¡±. Confirma ese an¨¢lisis el hecho de que la entrada sur de la Diagonal y la zona alta de Sarri¨¤ son unas de las que registran m¨¢s poluci¨®n en torno a las arterias importantes como las Rondas y Mitre. Tambi¨¦n ocurre lo mismo en la Vila Ol¨ªmpica y en buena parte del frente litoral.
El estudio destaca que buena parte del centro de la ciudad, como Ciutat Vella y Gr¨¤cia, por ejemplo, son las que tienen menos casos de asma asociado a la poluci¨®n porque es donde los residentes se desplazan m¨¢s a pie. Por eso, los cient¨ªficos ahora sospechan que el mismo patr¨®n podr¨ªa darse en otras ciudades grandes y antiguas, donde los n¨²cleos urbanos no son meros distritos comerciales sino lugares deseables para vivir.
El asma, que ya es la enfermedad respiratoria cr¨®nica m¨¢s prevalente del mundo (afecta a una de cada 10 personas), est¨¢ aumentando sobre todo entre menores. En 2018, la Agencia de Salud P¨²blica de Barcelona estim¨® que la contaminaci¨®n del aire provoca m¨¢s de 350 muertes prematuras al a?o dentro de la ciudad. ¡°Este trabajo llega en buen momento, porque la OMS est¨¢ revisando los valores gu¨ªa y debe tener en cuenta cualquier contribuci¨®n relevante¡±, opina Xavier Querol, especialista en contaminaci¨®n atmosf¨¦rica del centro Idaea-CSIC, ajeno a esta investigaci¨®n. La Uni¨®n Europea basa su legislaci¨®n de calidad de aire en las recomendaciones de la OMS, que no se han actualizado desde 2006. Una portavoz de la OMS ha confirmado a EL PA?S que las nuevas directrices se publicar¨¢n en el primer trimestre de 2021.
Soluciones sin coches
Para este estudio, los investigadores analizaron la concentraci¨®n y los efectos de tres contaminantes principales, el gas di¨®xido de nitr¨®geno, las part¨ªculas finas (PM2,5) y el carbono negro. Todos se generan principalmente por el tr¨¢fico rodado, aunque una proporci¨®n menor proviene de la actividad del puerto y de la industria. Se respiran f¨¢cilmente y, cuando llegan a los bronquios, pueden producir inflamaci¨®n e incluso pasar posteriormente al torrente sangu¨ªneo.
Las diminutas part¨ªculas s¨®lidas en suspensi¨®n (PM2,5) no solo provienen de los tubos de escape, sino tambi¨¦n del desgaste de frenos y neum¨¢ticos, por lo que un coche el¨¦ctrico o h¨ªbrido tambi¨¦n las produce. "Si en Barcelona todos los coches fuesen el¨¦ctricos, tendr¨ªamos una soluci¨®n al problema del di¨®xido de nitr¨®geno y el carbono negro, pero todav¨ªa habr¨ªa contaminaci¨®n por part¨ªculas, pl¨¢sticos y metales pesados", advierte Rojas.
El informe reci¨¦n publicado es una ampliaci¨®n de otro estudio que su equipo public¨® en agosto de 2019, en el que se evaluaba la contaminaci¨®n del aire por toda Europa. La principal recomendaci¨®n de los cient¨ªficos ahora, como antes, es reducir el tr¨¢fico y alejarlo de hospitales, colegios y parques infantiles. "Parece que las ciudades est¨¢n construidas para los coches, no para las personas", contaba entonces el epidemi¨®logo Mark Nieuwenhuijsen, co-autor del estudio, a EL PA?S. "En Barcelona solo el 20% de las personas se mueve en coche, y sin embargo solo se ven coches".
Xavier Querol se?ala que el riesgo para la salud por exposici¨®n a carbono negro y a di¨®xido de nitr¨®geno se reduce aproximadamente a la mitad con tan solo alejarse 25 metros del tr¨¢fico rodado. Por eso, los expertos abogan por la creaci¨®n de m¨¢s espacios verdes, peatonales y ciclables, con un refuerzo del transporte p¨²blico y aparcamientos disuasorios en las afueras. Argumentan que esto no solo reducir¨¢ los impactos negativos de la poluci¨®n en la salud, sino que traer¨¢ beneficios asociados: la disminuci¨®n del ruido, de accidentes, de las islas de calor y del sedentarismo.
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