Chile acude a las urnas en un nuevo intento por reemplazar su Constituci¨®n
La derecha apoya el proyecto redactado por un Consejo Constitucional de mayor¨ªa conservadora mientras la izquierda del presidente Boric lo rechaza
Chile celebra este domingo un nuevo plebiscito constitucional. Es el segundo intento en cuatro a?os por cambiar su Constituci¨®n vigente, porque en 2022, un texto redactado por una convenci¨®n dominada por la izquierda fue rechazada categ¨®ricamente por el 62% de los ciudadanos. En esta ocasi¨®n, la propuesta nace de un Consejo Constitucional con mayor¨ªa de derechas y, sobre todo, de la derecha conservadora del Partido Republicano, que se qued¨® con 23 puestos del ¨®rgano, seg¨²n lo determinaron los electores en mayo pasado. Y hoy, unos 15,4 millones de ciudadanos est¨¢n convocados a las urnas para decidir la suerte de esta carta apoyada por las derechas y rechazada por el oficialismo del presidente Gabriel Boric, el centroizquierda no oficialista y hasta sectores ultra que sobrepasan por la derecha a los republicanos. Aunque las ¨²ltimas encuestas conocidas daban una ventaja al voto en contra, se trata de una elecci¨®n con resultado incierto, entre otras cosas por el car¨¢cter obligatorio del sufragio que reci¨¦n se repuso hace un a?o.
De ganar la opci¨®n en contra, sigue vigente la Constituci¨®n actual y, en el corto y mediano plazo, no habr¨ªan nuevos intentos. De triunfar la alternativa a favor, el presidente Boric debe promulgar un decreto para la promulgaci¨®n de una nueva carta que su sector pol¨ªtico considera que ¡°radicaliza el proyecto neoliberal¡ä', como asegura a EL PA?S Domingo Lovera, constitucionalista del Frente Amplio oficialista, una coalici¨®n hermana de Podemos. Para sus defensores, en cambio, ¡°no es una Constituci¨®n de derecha¡±, seg¨²n asegura a este peri¨®dico uno de los arquitectos de la propuesta, el constitucionalista Jorge Barrera, que asesora al Partido Republicano, una formaci¨®n muy cercana a VOX.
La Constituci¨®n vigente fue redactada en 1980, en la dictadura de Augusto Pinochet. Pero desde el comienzo de la transici¨®n ha sido sometida a unas 70 reformas, las principales en 2005, durante el Gobierno del socialista Ricardo Lagos. De hecho, la carta actual lleva su firma, no la de Pinochet. ¡°La reforma del 2005 sac¨® a Pinochet de la Constituci¨®n de Chile¡±, dijo a EL PA?S el abogado y exministro del Tribunal Constitucional chileno, Gonzalo Garc¨ªa. Pero para una parte de la izquierda, sobre todo para la generaci¨®n del Frente Amplio, siempre hab¨ªa sido la Constituci¨®n de Pinochet, la que hab¨ªa que superar. Salvo ahora, cuando la prefieren antes que la propuesta. ¡°Nunca pens¨¦ que iba a defender la Constituci¨®n de Pinochet¡±, dijo en octubre una integrante oficialista en el Consejo Constitucional donde se trabaj¨® el texto que este domingo se plebiscitar¨¢.
Es parte de la paradoja de este refer¨¦ndum: la propuesta es defendida por las derechas, sobre todo la conservadora del Partido Republicano, que nunca busc¨® cambiar la Constituci¨®n vigente y se sum¨® muy tarde al proceso. En cambio, la izquierda, cuyo prop¨®sito desde hace m¨¢s de 40 a?os ha sido reemplazarla por una democr¨¢tica, la rechaza por considerarla peor que la actual.
Mientras, la sociedad espera el refer¨¦ndum con poco inter¨¦s y m¨¢s bien agobiada por la crisis de seguridad p¨²blica, su principal preocupaci¨®n, seg¨²n reflejan constantemente las encuestas.
Fin del momento constituyente
Este domingo, Chile cierra un ciclo de cuatro a?os que se abri¨® con el estallido social de 2019 que puso contra las cuerdas al Gobierno de derecha de Sebasti¨¢n Pi?era (2018-2022) y a la democracia chilena. En medio de manifestaciones masivas en las calles y de una violencia in¨¦dita en el pasado reciente de Chile, pr¨¢cticamente todo el espectro pol¨ªtico, salvo los radicales de lado y lado, acordaron una ruta constituyente. All¨ª, en los acuerdos de noviembre de 2019 en el Congreso Nacional por la paz y una nueva Constituci¨®n, estaba el diputado Boric, que estuvo por firmar el acuerdo pese a las reticencias de su propia coalici¨®n. Fue un intento de la pol¨ªtica chilena por conducir institucionalmente las revueltas y las demandas sociales.
El primer intento de cambiar la Constituci¨®n coincidi¨® con la elecci¨®n presidencial, una vez que Boric lleg¨® al poder en marzo de 2022, con solo 36 a?os, el m¨¢s joven de la historia de Chile. Su Gobierno cometi¨® el error inicial de tomar partido por el trabajo de la Convenci¨®n Constitucional dominada por la izquierda dura, que oper¨® entre 2021 y 2022. ¡°Cualquier resultado ser¨¢ mejor que una Constituci¨®n escrita por cuatro generales¡±, dijo el presidente apenas lleg¨® a La Moneda. Uno de sus ministros m¨¢s cercanos, Giorgio Jackson, condicion¨® las reformas del programa a que se aprobara esa propuesta. Pero fue un fiasco: el 62% la rechaz¨® en septiembre del a?o pasado. Fue un golpe muy duro para las izquierdas, que perdieron una oportunidad hist¨®rica de reemplazar la Constituci¨®n vigente. Y represent¨® la derrota del proyecto pol¨ªtico del presidente, que tuvo que incorporar a su Gabinete a los socialistas de la izquierda moderada, que el Frente Amplio critic¨® desde su origen por su papel en la transici¨®n.
Tras el frustrado primer proceso, la clase pol¨ªtica chilena, con el Gobierno de Boric y la derecha tradicional incluida, acord¨® en noviembre de 2022 casi inmediatamente un nuevo intento. A diferencia del primero, con muchos l¨ªmites para no repetir los errores. El analista Ascanio Cavallo describi¨® este ¨²ltimo ensayo como ¡°uno de los m¨¢s complicados que pudo haberse perge?ado, emulando la mec¨¢nica parlamentaria y su laberinto de primeros y segundos tr¨¢mites, comisiones, plenarios y hasta comisiones mixtas¡±. Lo que nadie ten¨ªa previsto, ni ellos mismos, era que el Partido Republicano lo conducir¨ªa, al lograr 23 de los 50 puestos en el Consejo Constitucional. Con la derecha tradicional con 11 esca?os, la oposici¨®n fue mayor¨ªa.
Hoy, al analizar c¨®mo quedar¨ªa el Gobierno de Boric de acuerdo al resultado de este domingo, el influyente analista Carlos Pe?a asegura a EL PA?S: ¡°El proyecto pol¨ªtico de Boric ya fracas¨®. En esto no vale la pena echarse tierra a los ojos¡±. Como escribi¨® el analista Octavio Avenda?o en este diario, es la derecha la que ya gan¨®: ¡°De ganar el a favor dispondr¨¢ de una Constituci¨®n redactada a su medida y, si se rechaza, se queda con la actual¡±.
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