Cuando Robinson Crusoe jug¨® al f¨²tbol
El partido inaugural de la Copa Chile en el archipi¨¦lago de Juan Fern¨¢ndez es m¨¢s que un hito in¨¦dito. Es adem¨¢s, por los desaf¨ªos que implica, un esfuerzo por acercar un territorio insular devastado por las tragedias a las urgencias del Estado
La selecci¨®n de f¨²tbol del archipi¨¦lago Juan Fern¨¢ndez no tiene jugadores oriundos y la raz¨®n es simple: no hay nacimientos en este territorio insular chileno, ubicado a casi 700 kil¨®metros del continente, porque representa un riesgo mayor para las madres y sus hijos. No hay hospital, por lo que las embarazadas son trasladadas a Valpara¨ªso cuando cumplen treinta semanas de gestaci¨®n. ¡°No es que no pueda asistirse un parto, pero los riesgos son mayores, por lo que es Estado asume el procedimiento¡±, dice el m¨¦dico Rodrigo Corval¨¢n, quien atendi¨® varios de los partos de los veinte lactantes isle?os que registra la bit¨¢cora del hospital Van Buren.
Los seleccionados son en su mayor¨ªa pescadores de langosta y at¨²n, la principal actividad productiva de las islas. Los hay tambi¨¦n profesores, obreros de la construcci¨®n, marinos y dos concejales, que representan a la Municipalidad y al aparato administrativo del Gobierno.
Hay isle?os o Fernandinos, como se definen, y los for¨¢neos, entre los que se cuenta Io Teao, hijo de padre Rapa Nui y madre isle?a. Todos se preparan, bajo la direcci¨®n t¨¦cnica de Jorge Garc¨¦s ¨Cex campe¨®n del f¨²tbol chileno y entrenador de la selecci¨®n en las clasificatorias para el Mundial 2002¨C para jugar el partido inaugural de la Copa Chile frente a Wanderers, el club m¨¢s antiguo de la liga.
El partido en la isla forma parte de una costumbre ya arraigada que comenz¨® el 2009 cuando Colo Colo enfrent¨® a la selecci¨®n de Rapa Nui en Hanga Roa, y que sigui¨® la tradici¨®n al desierto en San Pedro de Atacama y a Puerto Natales, en la Patagonia, para enfatizar los duelos entre profesionales y amateurs en la disputa del torneo que a¨²na todas las divisiones de la Federaci¨®n.
El duelo supuso resolver muchos problemas log¨ªsticos para trasladar al cuadro visitante, a los ¨¢rbitros y los equipos t¨¦cnicos y profesionales que transmitir¨¢n el partido el s¨¢bado 25 a mediod¨ªa. 16 jugadores de Wanderers se embarcaron en el Aquiles, el buque transporte de la Armada de Chile, en una traves¨ªa que se prolong¨® por 36 horas. Entrenaron en el helipuerto del barco, pero sin utilizar balones, por el riesgo obvio de que cayeran al Oc¨¦ano Pac¨ªfico. Llevaron sus propios alimentos, como huevos, jam¨®n y ensaladas, para no depender del rancho del resto de los pasajeros. Y se sometieron a la tradici¨®n marinera chilena, que impone almorzar, todos los jueves y en todos los barcos de la Armada, empanadas de horno, cazuela y mote con huesillos.
Los inconvenientes se compensaron con los cuidados m¨¦dicos. Los j¨®venes futbolistas compartieron en el Aquiles con 44 profesionales m¨¦dicos integrantes de la Fundaci¨®n Acrux, que realizar¨¢n un operativo sanitario con todas las especialidades para los casi mil habitantes de la isla. Una tripulaci¨®n especial para el comandante Cyril Jackson, quien entre risas confiesa que recibi¨® el llamado del entrenador Jorge Garc¨¦s pidi¨¦ndole que llevara a sus rivales ¡°lo m¨¢s mareados posible¡±. Tambi¨¦n se embarcaron un ministro de la Corte de Valpara¨ªso y jueces de la Ni?ez y el Trabajo, para resolver en tres d¨ªas los juicios civiles pendientes en el territorio insular.
En la isla esperan los rivales, con muy poca experiencia competitiva, pero advertidos del valor del encuentro. Un territorio que ha sufrido, desde el descubrimiento del espa?ol Juan Fern¨¢ndez en 1574, m¨¢s tragedias que alegr¨ªas. Conocidas originalmente como M¨¢s Afuera y M¨¢s A Tierra, ganaron notoriedad despu¨¦s que Alejandro Selkirk, un marino ingl¨¦s, fuera abandonado en los solitarios parajes entre 1704 y 1709 por el capit¨¢n del nav¨ªo, como castigo a su mal comportamiento. La historia fue adaptada por Daniel Defoe en la c¨¦lebre novela Robinson Crusoe. Se transform¨® en Parque Nacional en 1935, refrendando los derechos reclamados por el Estado chileno. En 1966 la islas pasaron a denominarse Robinson Crusoe y Alejandro Selkirk, m¨¢s el islote Santa Clara.
Fue c¨¢rcel de los patriotas durante la reconquista espa?ola en 1814, que sobrevivieron en cuevas hasta que se consolid¨® la Independencia.
En la Primera Guerra Mundial el acorazado alem¨¢n Dresden fue dinamitado en la bah¨ªa Cumberland para no ser atrapado por las embarcaciones inglesas que lo persegu¨ªan. Volvi¨® a ser prisi¨®n durante el Gobierno del presidente Carlos Ib¨¢?ez del Campo y fue arrasada por un maremoto el 2010, cuando el desesperado intento de advertencia de Martina Maturana, una ni?a de 12 a?os, quien toc¨® la campana de emergencia no pudiendo evitar que diez isle?os murieran y otros seis desaparecieran para siempre.
La escuela destruida a¨²n no se reconstruye y los vestigios del azote del mar son todav¨ªa evidentes en el poblado de San Juan Bautista, donde est¨¢ emplazada la cancha artificial construida por el municipio en terrenos que el oc¨¦ano no pudo llevarse. Las comunicaciones con el continente son m¨¢s dif¨ªciles desde el accidente a¨¦reo del 2011, cuando un avi¨®n de la Fuerza A¨¦rea se precipit¨® al mar cuando intentaba el aterrizaje en el precario aer¨®dromo con el tr¨¢gico saldo de 21 muertes. Entre las v¨ªctimas estaba Felipe Camiroaga, el m¨¢s famoso de los animadores de la televisi¨®n chilena en ese momento, convirtiendo la tragedia en un duelo nacional.
Por eso el partido despierta entusiasmo y esperanza en el archipi¨¦lago, que ha tratado desesperadamente transmitir sus necesidades m¨¢s urgentes a las autoridades de Gobierno. La presencia de tres senadores de la Rep¨²blica en la delegaci¨®n significa que, finalmente, el peque?o punto en el mapa ser¨¢, al menos por noventa minutos, un tema de atenci¨®n para el resto del pa¨ªs. Un fen¨®meno que el f¨²tbol espera poder lograr.
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