A la caza del virus en el aire
La investigadora Juana Mar¨ªa Delgado estudia las trazas del coronavirus en filtros como se?al de alerta temprana de su presencia
En lo peor de la pandemia, un equipo cient¨ªfico italiano quiso poner a prueba una idea: que el coronavirus viaja por el aire en aerosoles, en part¨ªculas microsc¨®picas, y que por tanto se podr¨ªan hallar trazas en filtros colocados por la ciudad. Lo quisieron comprobar en el epicentro de la epidemia italiana, en la localidad de B¨¦rgamo, en la regi¨®n de Lombard¨ªa, donde el coronavirus se ha llevado m¨¢s de 30.000 vidas por delante. En sus an¨¢lisis, los investigadores de varias universidades italianas encontraron trazas gen¨¦ticas del nuevo coronavirus en 20 de las 34 muestras que recogieron por la ciudad. El virus volaba en estas peque?as part¨ªculas del territorio m¨¢s industrializado de Italia, lo que hizo sospechar a algunos cient¨ªficos sobre la posibilidad de que la incidencia covid estuviera relacionada con la contaminaci¨®n.
Pero a Juana Mar¨ªa Delgado Saborit (Burriana, 1977), investigadora de la Universitat Jaume I, este hallazgo le sugiri¨® una idea que puede ser de gran utilidad en una pandemia que no nos abandona. ¡°Si esos investigadores del norte de Italia vieron que hab¨ªa carga gen¨¦tica del virus en los filtros, pensamos que igual tambi¨¦n aqu¨ª en Espa?a podr¨ªamos detectarlo y ayudarnos a crear un sistema de alarma¡±, explica Delgado, que va a poner en marcha esta idea gracias a las ayudas a equipos de investigaci¨®n cient¨ªfica sobre covid-19 concedidas por la Fundaci¨®n BBVA. Del mismo modo que el Gobierno espa?ol estableci¨® un sistema de rastreo de las aguas residuales para detectar restos del coronavirus, y as¨ª alertar del crecimiento de su presencia en un punto, el plan de Delgado podr¨ªa proporcionar otro sistema para avisar de su presencia antes de que estallen los brotes. Hasta que aparecen los s¨ªntomas en un contagiado, existe un periodo en el que puede ser altamente infeccioso, espirando part¨ªculas virales que pueden ser detectables en los filtros de aire.
¡°Un sem¨¢foro de aviso¡±
¡°Si se detecta bien la carga gen¨¦tica del coronavirus, se podr¨ªa establecer un sem¨¢foro de aviso¡±, asegura. Ahora tienen que probar en muestras reales la sensibilidad de este futurible sistema de detecci¨®n, porque las posibilidades ser¨ªan muy distintas. ¡°Podr¨ªa ser tan solo un aviso cualitativo, que nos dijera si hay o no hay virus en el ambiente. O un aviso cuantitativo, si es capaz de registrar que suben las cantidades, alertando de que se puede dar un brote¡±, explica la investigadora, ligada tambi¨¦n al King¡¯s College de Londres, la Universidad de Birmingham y el Instituto de Salud Global de Barcelona.
¡°Hasta que tengamos vacunas, hasta que tengamos curas, hasta que todo eso se cumpla, no sabemos c¨®mo de largo es el camino que tenemos hasta la meta. Mientras tanto, con esto, intentamos facilitar que la sociedad salga adelante, que la educaci¨®n funcione, que la sanidad funcione lo mejor posible¡±, explica Delgado, especializada en el estudio de los factores ambientales que afectan al desarrollo y comportamiento de los ni?os.
Si todo va bien, empezar¨¢n este mismo viernes a comprar equipos y activar a los investigadores que participar¨¢n en el proyecto que, seg¨²n cuenta Delgado, provienen de las distintas disciplinas que faciliten la creaci¨®n de ese sistema de alerta: expertos en calidad del aire, microbiolog¨ªa, epidemiolog¨ªa. El equipo de Delgado, a quien la Fundaci¨®n BBVA concedi¨® 100.000 euros, contar¨¢ con investigadores de la Universitat Jaume I, de la Universitat de Val¨¨ncia y de la Universidad Miguel Hern¨¢ndez.
¡°Que no vaya siempre por delante¡±
De momento, el Servicio de Calidad del Aire de la Generalitat Valenciana ya les ha suministrado filtros de distintas estaciones de medida de par¨¢metros de contaminaci¨®n atmosf¨¦rica, para realizar an¨¢lisis retrospectivos. ¡°Esperamos detectarlos sin problemas en los de abril y mayo¡±, dice Delgado, que depender¨¢ de si est¨¢n bien custodiados los filtros. Por si el virus se hubiera degradado demasiado, tambi¨¦n cuentan con un plan b de filtros recogidos en Latinoam¨¦rica por colaboradores. ¡°La detecci¨®n depender¨¢ de la carga gen¨¦tica del SARS-CoV-2, de las condiciones meteorol¨®gicas o de la contaminaci¨®n¡±, advierte.
¡°Ya en junio supon¨ªamos que vamos a tener nuevos brotes, que hab¨ªa cierta probabilidad de una segunda ola, as¨ª que pensamos que se podr¨ªan usar los filtros prospectivamente¡±. Para probar su sistema, contar¨¢n con tres estaciones en el centro de las grandes ciudades. ¡°Si funciona, se podr¨ªa replicar en otras zonas para la detecci¨®n precoz de brotes¡±. Tambi¨¦n en Valencia comenz¨® a estudiarse la posibilidad de detectar el coronavirus en las aguas fecales: el sistema funcion¨® tan bien que el Gobierno decidi¨® lanzar una campa?a de rastreo en las cloacas estrat¨¦gicas de las regiones. ¡°Es similar, se trata de buscarlo por distintos ¨¢mbitos para que no vaya siempre por delante de nosotros; detectar cu¨¢ndo existe esa capacidad de infecci¨®n y lanzar la se?al de alarma¡±, resume.
En los ¨²ltimos d¨ªas, se ha avivado una controversia cient¨ªfica que tiene mucho que ver con el trabajo de Delgado: el papel que desempe?an los aerosoles en la pandemia. Cada vez m¨¢s estudios y cient¨ªficos atribuyen buena parte de la culpa de las infecciones a estas part¨ªculas que mantienen los virus en suspensi¨®n y que si la ventilaci¨®n es mala pueden contagiar. El lunes, un art¨ªculo en la revista Science reclamaba que se tenga muy en cuenta esa v¨ªa de contagio porque las pruebas son ¡°abrumadoras¡± y, al mismo tiempo, los Centros para el Control y la Prevenci¨®n de Enfermedades de EE UU admit¨ªan que se est¨¢ produciendo transmisi¨®n del coronavirus de este modo. De momento, la Organizaci¨®n Mundial de la Salud solo recoge la infecci¨®n por aerosoles como una mera posibilidad. Delgado asegura que es una de las v¨ªas de contagio, "no se puede negar¡±. ¡°La evidencia cient¨ªfica se est¨¢ acumulando, hay numerosas circunstancias que no pueden explicarse, como muchos eventos supercontagiadores, si no es por los aerosoles. Por culpa de la poca ventilaci¨®n de interiores, en el que se acumula gente mucho tiempo, proyectando la voz¡±, a?ade la investigadora.
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