Descubierto un nuevo arrecife de coral gigante y en buen estado en Tahit¨ª

Pocas veces en estos tiempos se puede dar una noticia positiva sobre los arrecifes de coral en el mundo, cada vez m¨¢s da?ados, as¨ª que la Unesco no ha dudado en aprovechar la oportunidad para celebrar por todo lo alto un evento m¨¢s que inusual: no solo existe un arrecife de coral totalmente desconocido hasta ahora y es encima uno de los m¨¢s grandes del mundo; adem¨¢s, est¨¢ en muy buenas condiciones e incluso se libr¨® de una enfermedad que afect¨® hace unos a?os a otros ecosistemas vecinos. El descubrimiento lo ha hecho una misi¨®n cient¨ªfica apoyada por la Unesco frente a las costas de Tahit¨ª, en la Polinesia francesa, y sus impulsores esperan que sirva para hacer mayores avances en la preservaci¨®n mar¨ªtima, en el conocimiento de la biodiversidad e, incluso, en medicina.

¡°Cuando hablamos de arrecifes corales, sabemos que albergan alrededor del 25% de la biodiversidad marina, as¨ª que son aut¨¦nticos n¨²cleos de biodiversidad marina. Tambi¨¦n podr¨ªan proporcionar nuevas curas a enfermedades como el c¨¢ncer o la artritis¡±, explica a EL PA?S sobre las implicaciones del hallazgo el responsable de pol¨ªtica marina de la Unesco, Julian Barbi¨¨re. Sin olvidar, a?ade el especialista en conversaci¨®n telef¨®nica, que estos arrecifes ¡°protegen las comunidades costeras de tormentas, altos oleajes y hasta tsunamis¡±.

El arrecife de coral ahora descubierto est¨¢ a una profundidad de entre 30 y 65 metros, lo que ya en s¨ª es inusual, se?ala Barbi¨¨re, puesto que hasta ahora los que se conoc¨ªan estaban como mucho a 25 metros. Y ello ¡°sugiere que quiz¨¢s haya m¨¢s arrecifes de coral grandes en el oc¨¦ano a esas profundidades ¡ªen la denominada twighlight zone o zona crepuscular del oc¨¦ano, entre los 30 y 120 metros de profundidad¡ª y que sencillamente no lo sab¨ªamos, o no hemos sido capaces de rastrearlos hasta ahora¡±, explica. Lo que a su vez ¡°abre muchas preguntas¡± sobre si hay m¨¢s arrecifes de este tipo a esas profundidades, y ¡°d¨®nde y c¨®mo podr¨ªamos encontrar y localizarlos¡±.

Tambi¨¦n es inusual su tama?o, unos 3 kil¨®metros de longitud y entre 30 y 60 a 65 metros de ancho. Ello lo convierte en ¡°uno de los arrecifes de coral sanos m¨¢s extensos de los que se tiene constancia¡±, subray¨® la Unesco en un comunicado. Los corales gigantes con forma de rosa tienen hasta dos metros de di¨¢metro, acota la instituci¨®n de Naciones Unidas.

Pero si algo ha sorprendido al equipo cient¨ªfico que hall¨® el arrecife es su buen estado de preservaci¨®n, que contrasta fuertemente con otros corales de la misma regi¨®n.

¡°La Polinesia Francesa sufri¨® un importante evento de blanqueamiento de corales en 2019. Sin embargo, este arrecife no parece haber sido afectado significativamente. El descubrimiento de este arrecife en una condici¨®n tan pr¨ªstina es una buena noticia y puede inspirar la conservaci¨®n futura. Creemos que los arrecifes m¨¢s profundos pueden estar mejor protegidos del calentamiento global¡±, ha declarado Laetitia Hedouin, del Centro Nacional de Investigaci¨®n Cient¨ªfica (CNRS) de Francia y del organismo de investigaci¨®n medioambiental CRIOBE, presente en la misi¨®n de la Unesco que realiz¨® en noviembre de 2021 la expedici¨®n de buceo que hall¨® el nuevo arrecife.

Hallar un arrecife de coral en buen estado es especialmente alentador en momentos en que muchos de estos ecosistemas est¨¢n gravemente amenazados, como ha venido sucediendo en los ¨²ltimos a?os con el coral de la Gran Barrera de Australia. Desde 1950, se?ala Barbi¨¨re, se han perdido alrededor del 50% de los arrecifes de coral del mundo.

Dar respuesta a la pregunta que se hacen los cient¨ªficos involucrados en el proyecto sobre c¨®mo han logrado ser tan resistentes estos arrecifes en una zona en la que tantos otros corales resultaron da?ados puede dar pistas para el siguiente gran paso del descubrimiento: c¨®mo proteger este nuevo foco de biodiversidad de futuras depredaciones naturales y, sobre todo, humanas.

M¨¢s all¨¢ de los an¨¢lisis cient¨ªficos que ahora proceder¨¢n a hacer a los corales para medir su capacidad de resiliencia, Barbi¨¨re recuerda que la preservaci¨®n de estos ecosistemas en particular y de los oc¨¦anos en general depende, en buena parte, de la ¡°voluntad pol¨ªtica de los pa¨ªses¡± para participar, entre otros, en los diversos mecanismos de protecci¨®n de que dispone la Unesco, que es el organismo de Naciones Unidas encargado de la investigaci¨®n de los oc¨¦anos.

Y el tiempo, como en todas las cuestiones de cambio clim¨¢tico, apremia: ¡°Cuando se mira a los objetivos de conservaci¨®n para los oc¨¦anos, la ciencia nos dice que tenemos que proteger el 30% del oc¨¦ano para su conservaci¨®n y la realidad es que solo estamos protegiendo entre el 7% y el 8%. Hay a¨²n un gran lapso ah¨ª. Adem¨¢s, no estamos protegiendo nada en oc¨¦anos abiertos m¨¢s all¨¢ de la jurisdicci¨®n nacional, que es otro desaf¨ªo, porque tambi¨¦n son enormes ecosistemas que hay que proteger¡±, alerta el cient¨ªfico.

Para poder hacerlo, hay que conocer los oc¨¦anos, afirma Barbi¨¨re. Y actualmente, se sabe muy poco de la masa oce¨¢nica que rodea la Tierra, como demuestra el hallazgo del arrecife gigantesco en Tahit¨ª.

¡°Hasta la fecha, conocemos mejor la superficie de la Luna que las profundidades del oc¨¦ano. Solo se ha cartografiado el 20% de todo el fondo marino¡±, record¨® la directora general de la Unesco, Audrey Azoulay, al saludar el hallazgo del arrecife.

Para corregir esta falta de conocimiento, la Unesco participa activamente en el proyecto Seabed2030, que quiere completar un mapa de alta resoluci¨®n del lecho oce¨¢nico para 2030. Adem¨¢s de instituciones nacionales e internacionales, Barbi¨¨re subraya la importancia de que se involucre en el proyecto el sector privado. ¡°Estos datos y mapas son una parte esencial para comprender nuestro planeta, tener mejores mapas de caladeros para ver d¨®nde se puede encontrar la pesca, pero tambi¨¦n la biodiversidad. Es algo b¨¢sico, no puedes gestionar lo que no puedes medir, el mapa es la base y va a requerir esfuerzos internacionales¡±, afirma.

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