Europa recula y recomienda el pol¨¦mico lecanemab contra el alzh¨¦imer
La Agencia Europea del Medicamento cambia de opini¨®n sobre el f¨¢rmaco, que reduce un 27% el deterioro cognitivo provocado por la enfermedad
El comit¨¦ de expertos de la Agencia Europea del Medicamento (EMA, por sus siglas en ingl¨¦s) ha recomendado este jueves la aprobaci¨®n del lecanemab, el primer f¨¢rmaco que ha demostrado tener alg¨²n efecto contra el alzh¨¦imer en d¨¦cadas, pero que es controvertido por sus efectos secundarios y su alto precio.
La agencia hab¨ªa vuelto a reunir a sus expertos despu¨¦s de que los fabricantes del f¨¢rmaco recurriesen su decisi¨®n inicial de rechazarlo, publicada en verano.
En su nueva resoluci¨®n, el Comit¨¦ de Expertos en Medicamentos de Uso Humano ha recomendado el uso de este f¨¢rmaco, pero limitado a los pacientes que no tengan ninguna copia del gen APOE4 o solo una. De esta forma quedan excluidos los pacientes con dos copias de este gen (en torno a un 15% del total), pues este perfil gen¨¦tico est¨¢ muy relacionado con la inflamaci¨®n y las hemorragias que puede producir el f¨¢rmaco.
La EMA suele seguir las recomendaciones de su comit¨¦, por lo que probablemente se apruebe su uso en toda la Uni¨®n Europea. Despu¨¦s de ese tr¨¢mite, cada pa¨ªs de la uni¨®n deber¨¢ negociar un precio con la farmac¨¦utica y decidir¨¢n si lo cubre la sanidad p¨²blica. En Estados Unidos, donde el f¨¢rmaco ya est¨¢ aprobado, el precio por paciente al a?o es de 26.500 d¨®lares al a?o, unos 24.000 euros.
El lecanemab, con nombre comercial Leqembi, ha demostrado retrasar el avance de la enfermedad un 27%, seg¨²n los resultados de un ensayo cl¨ªnico con 1.700 pacientes en varios pa¨ªses ¡ªincluida Espa?a¡ª durante a?o y medio. La gran pregunta es si ese modesto efectos se traduce en mejoras reales para los pacientes y sus cuidadores. Durante el ensayo, el f¨¢rmaco caus¨® inflamaci¨®n cerebral en el 12% de los pacientes que lo tomaron, y dos de ellos murieron por hemorragias cerebrales relacionadas con el medicamento.
Las dos compa?¨ªas que han desarrollado Leqembi, la japonesa Eisai y la estadounidense Biogen, han presentado datos adicionales de seguimiento de pacientes durante tres a?os que muestran que la mejora cognitiva se mantiene si se contin¨²a el tratamiento, y que estar¨ªa justo en el umbral de la relevancia cl¨ªnica. Adem¨¢s, dicen, no ha habido ninguna otra muerte. Pero estos datos a¨²n no han sido revisados por expertos independientes ni publicado en una revista cient¨ªfica.
Con esta decisi¨®n, Europa se suma al resto de pa¨ªses que han decidido aprobar el f¨¢rmaco, entre ellos Estados Unidos, China, Jap¨®n, Israel, Corea del Sur o Emiratos ?rabes. Reino Unido tambi¨¦n ha aprobado su uso, pero su sistema de salud p¨²blico no lo financiar¨¢, pues considera que sus efectos son demasiado modestos para su coste, de unos 24.000 euros al a?o por paciente.
Leqembi estar¨¢ disponible a trav¨¦s de un programa de acceso controlado para garantizar que el medicamento se usa ¨²nicamente en la poblaci¨®n de pacientes recomendada. Los pacientes deber¨¢n realizarse resonancias magn¨¦ticas para ver si hay inflamaci¨®n antes y durante el tratamiento. La EMA tambi¨¦n exige a las empresas fabricantes que proporcione una gu¨ªa y una lista de verificaci¨®n para los profesionales de la salud, una tarjeta de alerta para los pacientes y programas de capacitaci¨®n para m¨¦dicos y sanitarios sobre el tipo de inflamaci¨®n cerebral que puede producir el f¨¢rmaco. Adem¨¢s, las farmac¨¦uticas estar¨¢n obligadas a hacer estudios de seguimiento para minimizar riesgos. La empresa establecer¨¢ un estudio de registro a nivel de la UE con pacientes tratados con Leqembi para estimar la incidencia de efectos secundarios y determinar su gravedad. Este estudio de registro tambi¨¦n se podr¨¢ utilizar para recopilar informaci¨®n sobre la progresi¨®n de los pacientes a las siguientes etapas de la enfermedad de alzh¨¦imer y las posibles consecuencias a largo plazo.
El alzh¨¦imer es la principal causa de demencia, y afecta a unos 50 millones de personas en el mundo. El envejecimiento de la poblaci¨®n amenaza con que estas cifras se multipliquen antes de mediados de siglo.
A pesar de las expectativas generadas, el lecanemab solo beneficiar¨ªa a un 2,5% de las 800.000 personas (unos 20.000)que viven con alzh¨¦imer en nuestro pa¨ªs, seg¨²n estimaciones para este diario de Raquel S¨¢nchez del Valle, coordinadora de la Sociedad Espa?ola de Neurolog¨ªa. Puede parecer muy poco, pero hay que tener en cuenta ¡°el efecto acumulativo en el tiempo¡±, con lo que ese porcentaje ir¨¢ creciendo en los pr¨®ximos a?os.
Este medicamento es un anticuerpo monoclonal que elimina del cerebro las placas de prote¨ªna amiloide, una de las te¨®ricas culpables de la dolencia. Para ser efectivo, hay que administrarlo a pacientes en estados muy iniciales, cuando a¨²n tienen independencia para vivir por s¨ª mismos, pero empiezan a sufrir faltas leves de memoria, como olvidar citas o repetir frases varias veces.
Adem¨¢s de su precio, el f¨¢rmaco presenta retos enormes para los sistemas de salud, pues requiere pruebas diagn¨®sticas hospitalarias para medir la cantidad de amiloide, inyecciones intravenosas cada 15 d¨ªas, tambi¨¦n administradas en un centro hospitalario, y varios esc¨¢neres cerebrales para asegurar que no hay inflamaci¨®n cerebral que pueda causar problemas de salud graves. El coste total por paciente y a?o podr¨ªa estar en torno a 40.000 euros, explica Linus J?nsson, m¨¦dico y experto en econom¨ªa de la salud del Instituto Karolinska de Suecia. Adem¨¢s, al tratarse de una enfermedad cr¨®nica, el tratamiento tendr¨ªa que administrarse de por vida.
Bart De Strooper, cofundador del Instituto de Investigaci¨®n de Demencia de Reino Unido, resalta: ¡°Estoy satisfecho de que la raz¨®n haya vuelto a su cauce¡±. Hace unos meses, De Strooper, junto a otros prominentes colegas europeos, hicieron una rara toma de decisi¨®n p¨²blica a favor del f¨¢rmaco en EL PA?S. ¡°Espero que esta decisi¨®n aumente la investigaci¨®n de este tipo de anticuerpos. Esto va a dar esperanza a los pacientes y a estimular nuevos m¨¦todos de diagn¨®stico temprano¡±, ha a?adido el cient¨ªfico, que ha sido consultor de Eisai, uno de los fabricantes.
Juan Fortea, neur¨®logo del Hospital Sant Pau de Barcelona cuyos pacientes han participado en el ensayo cl¨ªnico, celebra el cambio de rumbo de Europa.¡°Esta decisi¨®n representa un avance crucial para los pacientes con alzh¨¦imer y un cambio de paradigma en el tratamiento de la enfermedad¡±, explica a este diario. ¡°Aunque [el uso de lecanemab] ser¨¢ restringido y solo una minor¨ªa de pacientes en las etapas tempranas se podr¨¢n beneficiar, este paso catalizar¨¢ el desarrollo de capacidades diagn¨®sticas y terap¨¦uticas necesarias, similar a lo logrado con las unidades de ictus que mejoraron la asistencia de todos los pacientes, aquellos que recib¨ªan el f¨¢rmaco y los que no. Es una noticia fant¨¢stica que corrige una decisi¨®n preocupante y reengancha a Europa con la vanguardia de la asistencia e investigaci¨®n contra la enfermedad¡±, a?ade.
David P¨¦rez, jefe de neurolog¨ªa del Hospital 12 de Octubre de Madrid, opina: ¡°La EMA ha sido m¨¢s cautelosa que otros organismos reguladores y ha pensado m¨¢s en la seguridad cl¨ªnica de los pacientes, lo que es beneficioso para todos¡±. ¡°Se hace una recomendaci¨®n restringida y condicionada que obliga a realizar un registro multic¨¦ntrico y aplicar el f¨¢rmaco solo en aquellos centros donde haya m¨¢s experiencia de uso. Todo esto hace que sea una aprobaci¨®n adecuada a un f¨¢rmaco del que hay que conocer bien los efectos secundarios a largo plazo. No haberlo aprobado hubiera dejado a Europa a a?os detr¨¢s del resto de pa¨ªses¡±.
El donanemab, un segundo anticuerpo similar que reduce un 35% el avance del alzh¨¦imer, tambi¨¦n ha sido aprobado en Estados Unidos, pero sigue en evaluaci¨®n en Europa.
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