¡®El rey del carb¨®n¡¯, condenado a cuatro a?os de c¨¢rcel por los da?os ambientales de una mina a cielo abierto en un espacio protegido
Victorino Alonso, que ha evitado entrar en prisi¨®n tras otras sentencias desfavorables por causas similares, todav¨ªa puede recurrir el fallo, que no es firme y lo condena a pagar 24 millones
La justicia ha vuelto a se?alar al empresario minero Victorino Alonso, conocido como El rey del carb¨®n. La Audiencia Provincial de Le¨®n ha condenado este jueves al leon¨¦s a cuatro a?os de prisi¨®n por los da?os medioambientales generados en un espacio protegido. Los perjuicios procedieron de la apertura de una explotaci¨®n a cielo abierto conocida como Nueva Julia entre las localidades de Laciana y Babia (Le¨®n). Los magistrados han ordenado tambi¨¦n un pago de 24,3 millones de euros por la responsabilidad civil relacionada con estas repercusiones en los entornos naturales. La resoluci¨®n judicial no es firme, as¨ª que Alonso todav¨ªa puede presentar un recurso de casaci¨®n en el Tribunal Supremo, de modo que de momento podr¨ªa evitar entrar en la c¨¢rcel.
Alonso se ha enfrentado a los tribunales en varias ocasiones. En 2018 eludi¨® una pena de dos a?os de c¨¢rcel y una multa de 25,5 millones de euros a la que fue condenado por destruir un yacimiento prehist¨®rico relevante, la Cueva de Chaves (Huesca), para construir unos abrevaderos de cabras en su finca de caza. Finalmente qued¨® libre porque se declar¨® insolvente y porque los antecedentes penales que pesaban sobre ¨¦l eran posteriores a cuando cometi¨® los hechos, en 2007.
El fallo actual, que se pronuncia sobre unas vistas celebradas en abril, considera que la compa?¨ªa no ten¨ªa ning¨²n escr¨²pulo m¨¢s all¨¢ de la obtenci¨®n de los minerales para lucrarse con ellos: ¡°El cumplimiento de obligaciones legales ni val¨ªa la pena ni importaba nada¡±. El rey del carb¨®n admiti¨® en las sesiones que no hab¨ªa prestado atenci¨®n a si la mina ten¨ªa un permiso ambiental en regla, si la plantilla hab¨ªa sufrido expedientes de regulaci¨®n de empleo (ERE) o si se sac¨® provecho de 20 hect¨¢reas m¨¢s de las estipuladas.
El recorrido del empresario con la mina Nueva Julia comenz¨® en 2008, cuando Alonso se constituy¨® como administrador ¨²nico de la entidad Minero Sider¨²rgica de Ponferrada SA (MSP), operativa desde 1918, hasta que en noviembre de 2008 qued¨® constituida como Coto Minero Cant¨¢brico SA (CMC). La actividad minera ejecutada ¡°produjo severas modificaciones en el medio afectado¡±, establecen los jueces, que destacan da?os en ¡°modificaciones topogr¨¢ficas, en los suelos, en las aguas superficiales y subterr¨¢neas, en la calidad del aire, residuos qu¨ªmicos, ruidos, vibraciones y afecciones a ecosistemas, h¨¢bitats y especies silvestres¡±.
Un grave riesgo para el medio ambiente
La forma de actuar en esta explotaci¨®n, al menos entre 2007 y 2010, sin atender la legislaci¨®n definida y las ¨®rdenes de la declaraci¨®n de impacto ambiental, se tradujo en ¡°un grave riesgo para el medio ambiente y los recursos naturales¡±, afectando tambi¨¦n a una ¡°zona protegida¡± y ¡°h¨¢bitats de inter¨¦s comunitario¡±. Los jueces han insistido en su pronunciamiento en que los trastornos para los espacios naturales no hubieran ocurrido si la miner¨ªa a cielo abierto, una actividad muy habitual en esa zona de Le¨®n, hubiese cumplido las reglas de protecci¨®n medioambiental. La Audiencia ha apreciado la atenuante de dilaci¨®n indebida en la causa. La Fiscal¨ªa, por su parte, demandaba una pena mayor: siete a?os y medio de privaci¨®n de libertad para el acusado.
Los an¨¢lisis han demostrado tambi¨¦n que los trabajos en Nueva Julia afectaron a unos territorios donde vive el oso pardo, puesto que su h¨¢bitat queda ¡°reducido y fragmentado¡± adem¨¢s de causarle molestias y presi¨®n. Lo mismo ocurre con otra especie protegida como el urogallo cant¨¢brico, en peligro de extinci¨®n, que ve c¨®mo se destruyen entornos naturales en los que habita o desarrolla su actividad biol¨®gica. La mina tambi¨¦n repercuti¨® negativamente en las demarcaciones h¨ªdricas Mi?o-Sil y Duero en forma de escombros y alteraciones del caudal.
Victorino Alonso, de 68 a?os, es uno de los nombres m¨¢s conocidos en la miner¨ªa leonesa y asturiana. El ahora condenado almacenaba en marzo del a?o pasado, justo al comienzo de la pandemia y con gran escasez de protecci¨®n para los sanitarios, unas 600.000 mascarillas en una de sus naves de Ponferrada (Le¨®n). La Polic¨ªa Nacional se hizo con este material y se los reparti¨® a la Junta de Castilla y Le¨®n y al Ministerio de Sanidad. La Fiscal¨ªa, por otro lado, tiene recurrida una sentencia de septiembre de 2019 de la Audiencia Provincial leonesa que lo condenaba a dos a?os y medio de prisi¨®n por una explotaci¨®n ilegal, durante 13 a?os, en la mina El Feixol¨ªn (Villablino, Le¨®n). El Ministerio p¨²blico le reclamaba una sanci¨®n mayor.
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