Turiel, f¨ªsico: ¡°Damos por hecho que vamos a sustituir los combustibles f¨®siles por un sistema 100% renovable y eso es muy cuestionable¡±

Para el f¨ªsico Antonio Turiel (Le¨®n, 54 a?os), nos encaminamos a un mundo en el que habr¨¢ un salto hacia atr¨¢s de la industria, la mayor¨ªa de la producci¨®n se vender¨¢ en el ¨¢mbito local, volar en avi¨®n se convertir¨¢ en un lujo solo accesible para unos pocos y habr¨¢ que volver a lo que denomina ¡°tecnolog¨ªas humildes¡±, como molinos de agua o incluso sistemas de tracci¨®n humana. Estas son algunas d...

Para el f¨ªsico Antonio Turiel (Le¨®n, 54 a?os), nos encaminamos a un mundo en el que habr¨¢ un salto hacia atr¨¢s de la industria, la mayor¨ªa de la producci¨®n se vender¨¢ en el ¨¢mbito local, volar en avi¨®n se convertir¨¢ en un lujo solo accesible para unos pocos y habr¨¢ que volver a lo que denomina ¡°tecnolog¨ªas humildes¡±, como molinos de agua o incluso sistemas de tracci¨®n humana. Estas son algunas de las consecuencias que este cient¨ªfico del Instituto de Ciencias del Mar (CSIC) de Barcelona predice que tendr¨¢ la falta de energ¨ªa y materiales en su nuevo libro El futuro de Europa. C¨®mo decrecer para una reindustrializaci¨®n urgente (editorial Destino).

Pregunta. ?Por qu¨¦ sigue preocup¨¢ndole tanto el agotamiento geol¨®gico de los combustibles f¨®siles si la ciencia est¨¢ pidiendo cortar con esas energ¨ªas lo antes posible por el cambio clim¨¢tico?

Respuesta. Porque no estamos haciendo una sustituci¨®n efectiva de ellos. De hecho, el a?o pasado es el que m¨¢s gas y m¨¢s carb¨®n se ha extra¨ªdo. Seguimos teniendo una econom¨ªa muy dependiente de los combustibles f¨®siles. Es completamente necesario sac¨¢rselos de encima, pero no lo estamos haciendo.

P. Asegura que el actual modelo de expansi¨®n de las energ¨ªas renovables es un fracaso. ?Por qu¨¦?

R. En el caso de la e¨®lica, aparte de las cuestiones de intermitencia que generan problemas para garantizar la estabilidad de la red de alta tensi¨®n, la mayor dificultad es el coste. Nos estamos encontrando con una crisis como la de Gamesa que ha dejado de producir aerogeneradores porque los modelos 4.X y 5.X se les est¨¢n rompiendo. En el caso de la fotovoltaica, aparte de la dependencia en materiales como la plata que empiezan a escasear, el problema radica en que es una producci¨®n de corriente continua en un sistema de corriente alterna. Por otro lado, tiene una producci¨®n que es enormemente estacional. Lo ideal ser¨ªa tener un sistema de almacenamiento, pero no es viable porque requiere much¨ªsimos materiales. Resulta muy dif¨ªcil pensar que vamos a lograr un sistema todo el¨¦ctrico y esto sin hablar de la escasez de cobre. El coche el¨¦ctrico ahora mismo hace agua por todos lados.

P. ?C¨®mo se explica entonces que en Espa?a las renovables supongan ya m¨¢s del 50% de la generaci¨®n el¨¦ctrica y se haya conseguido pr¨¢cticamente acabar con el carb¨®n?

R. S¨ª, esto es verdad, pero la electricidad es s¨®lo el 22% del consumo de energ¨ªa final, es decir, el 50% del 22% es s¨®lo el 11% del total. Adem¨¢s, hay que tener en cuenta que en Espa?a lo que se ha producido es un descenso del consumo de electricidad y del consumo de energ¨ªa en general porque igual que el resto del mundo occidental estamos inmersos en un proceso de fuerte desindustrializaci¨®n que a la larga mina las bases de poder hacer cualquier cosa.

P. Defiende que no hay una alternativa viable a los combustibles f¨®siles y esto obliga a decrecer de forma significativa en todos los ¨¢mbitos.

R. El descenso energ¨¦tico y de materiales es inevitable, esto es un hecho f¨ªsico. Es un hecho que ya estamos empezando a vivir, tenemos un descenso claro de la producci¨®n de petr¨®leo, todav¨ªa m¨¢s evidente con el de di¨¦sel, y vamos a tenerlo de gas y de carb¨®n. Pero tambi¨¦n de uranio, de cobre, de plata, de todos los materiales. El descenso es inevitable, lo que hay que discutir es c¨®mo lo manejamos. La propuesta del decrecimiento es intentemos hacerlo de una manera democr¨¢tica, una manera que garantice el m¨¢ximo bienestar de las personas.

P. ?Qu¨¦ son las tecnolog¨ªas humildes?

R. Son tecnolog¨ªas en las que t¨ªpicamente no se transforma la energ¨ªa, se aprovecha directamente el impulso mec¨¢nico o se aprovecha directamente el calor.

P. ?Qu¨¦ es una bicilavadora?

R. Una bicilavadora es lo que el nombre dice, una bici conectada a un tambor de una lavadora. En vez de utilizar electricidad, se utiliza la fuerza mec¨¢nica. Esto, evidentemente, es un poco cansado, pero con la capacidad de tracci¨®n que tiene un ser humano t¨² puedes hacer lo mismo que una lavadora sin usar electricidad.

P. Para los hogares plantea recurrir a sistemas de tracci¨®n humana como este, cocinas solares o zonas comunes de lavadoras o de cocinas donde compartir nevera. ?No es as¨ª?

R. Las zonas de lavander¨ªa son muy habituales en muchos pa¨ªses, esto no es un invento nuevo, con la lavadora t¨² puedes dar servicio a muchas casas, es una manera m¨¢s eficaz de utilizar recursos. En el caso de las neveras y las cocinas es un poco la misma filosof¨ªa, intentar minimizar el uso de recursos y de energ¨ªa, teniendo en cuenta que puede ser utilizado por turnos. No es sencillo, implica un cambio cultural muy importante, pero son maneras de intentar que el consumo sea sostenible.

P. ?No resulta contradictorio dar m¨¢s peso a tecnolog¨ªas rudimentarias que a otras m¨¢s modernas, como por ejemplo, unas placas solares?

R. Las placas solares se tienen que utilizar, a nivel dom¨¦stico tiene su utilidad, el problema principal que tenemos es hasta qu¨¦ punto podemos escalar las cosas. Cuando hablamos de tecnolog¨ªas humildes, no estamos diciendo que tienen que sustituir a las otras, sino que las tienen que complementar. Si t¨² pretendes hacerlo todo con placas fotovoltaicas, te vas a encontrar con un mont¨®n de problemas de gesti¨®n de la energ¨ªa producida, de gesti¨®n de la intermitencia, de escasez de materiales como el cobre y la plata, etc¨¦tera.

P. Asegura que el transporte mar¨ªtimo volver¨¢ a ser a vela y que el a¨¦reo es un medio condenado a disminuir dr¨¢sticamente hasta convertirse en algo marginal.

R. Bueno, no es que el transporte mar¨ªtimo tenga que ser a vela, sino que la vela puede ser algo que se puede utilizar. De hecho, hoy en d¨ªa algunos cargueros incorporan vela para ganar medio nudo, un nudo, que supone un cierto ahorro de combustible. En algunos casos, sobre todo en navegaci¨®n de cabotaje, puede tener sentido que el barco sea simplemente a vela y punto. En trayectos de larga distancia puedes tener alg¨²n motor, pero la idea es utilizar la vela el m¨¢ximo posible.

P. Tambi¨¦n se?ala que, con toda seguridad, los grandes mercados de venta al detalle se tendr¨¢n que ubicar al lado de los nodos ferroviarios.

R. Esto es lo que hist¨®ricamente hab¨ªa pasado, si uno mira la evoluci¨®n de los mercados desde la ¨¦poca medieval hasta principios del siglo XX, suelen estar cerca de las v¨ªas de distribuci¨®n porque t¨² tienes que mover un mont¨®n de materiales y lo que te interesa es que sea lo m¨¢s eficiente posible. En un mundo en el que el ferrocarril es la mejor opci¨®n de transporte terrestre, como as¨ª creo, l¨®gicamente habr¨¢ una intensificaci¨®n del mercado alrededor de estos nodos. Cada ciudad tendr¨¢ su propio sistema de transporte por ferrocarril y cerca del sitio donde lleguen las mercanc¨ªas ser¨¢ donde est¨¢ el mercado.

P. Afirma que el turismo de masas va a desaparecer y que, en pocas d¨¦cadas, la actividad tur¨ªstica en Europa ser¨¢ marginal.

R. Esto es dif¨ªcil que no sea as¨ª por una raz¨®n muy sencilla: viajar va a ser m¨¢s caro, es evidente. Aparte de que, si no se hace nada, el camino que vamos a seguir, como estamos viendo con la desindustrializaci¨®n tan bestia que est¨¢ sufriendo Alemania y en menor medida Francia, es que la gente va a tener menos renta disponible y como el turismo es un gasto discrecional pues evidentemente va a haber menos inversi¨®n en turismo.

P. Tambi¨¦n vaticina la vuelta al campo, una fuerte reducci¨®n del tama?o de la industria y el fin de internet como lo conocemos hoy, que asegura deber¨¢ simplificarse para atender requerimientos m¨¢s funcionales.

R. Bueno sobre la vuelta al campo, yo lo que digo es que seguramente va a aumentar el porcentaje de gente que se dedica al sector primario, pero eso no quiere decir que va a ser la mayor¨ªa. En eso no me mojo, porque seguramente habr¨¢ un aumento, pero va a depender much¨ªsimo del grado de mecanizaci¨®n que haya en el campo. La industria se va a tener que reducir porque ahora mismo se producen grandes vol¨²menes de todo y esto no se va a poder mantener. Tendremos que priorizar qu¨¦ cosas vamos a poder hacer y va a haber necesariamente una contracci¨®n. Si no hay materiales o energ¨ªa en las cantidades que hab¨ªa antes, l¨®gicamente tiene que haber una adaptaci¨®n, porque los precios tienen que ser adecuados. En cuanto a internet, hay un problema grav¨ªsimo de insostenibilidad en la producci¨®n de microchips. De hecho, ya hace a?os que estamos observando que empieza a haber una ca¨ªda en la producci¨®n de port¨¢tiles, m¨®viles, tablets, chips de memoria, etc¨¦tera.

P. Sorprende la contundencia con la que realiza estas afirmaciones a futuro.

R. Damos todo el rato por hecho que vamos a sustituir los combustible f¨®siles por un sistema 100% renovable que va a producir la misma cantidad de energ¨ªa o una cantidad de energ¨ªa con una capacidad de transformaci¨®n equivalente y eso es muy cuestionable.

P. Me refiero a que los cient¨ªficos por lo general suelen ser muy cautos a la hora de lanzar predicciones de futuro en asuntos tan complejos.

R. Es el tono que est¨¢n tomando la mayor parte de los trabajos que se est¨¢n haciendo ahora mismo en sostenibilidad. Si t¨² coges el ¨²ltimo informe del estado del clima del planeta de 2024 de [William] Ripple, los 14 cient¨ªficos ambientales m¨¢s importantes del mundo dicen que vamos camino a una cat¨¢strofe planetaria que va a poner en peligro la continuidad de la civilizaci¨®n humana. Y en general cuando se est¨¢ hablando del problema de materiales se est¨¢ diciendo que hay unos retos muy grandes en el futuro. O sea que ahora mismo el ambiente que hay en el mundo cient¨ªfico es de que estamos llegando a problemas muy serios.

P. No hablo de los problemas, que tengo claro que son serios, pero me sorprende la rotundidad con la que se refiere a determinadas soluciones y c¨®mo da por seguros cambios muy concretos.

R. Yo no tengo la soluci¨®n a estos problemas, yo lo que digo son ciertas cosas que pueden ayudar. Adem¨¢s, tampoco tenemos una estimaci¨®n precisa de la velocidad a la que van a ir los cambios, ni con qu¨¦ intensidad se van a producir, lo que s¨ª sabemos es que tenemos unos retos por delante. Ignorarlos y no encararlos nos lleva a una situaci¨®n de cada vez mayor riesgo. Se puede discutir sobre cu¨¢les son las propuestas m¨¢s viables y que si ser¨ªa mejor hacer una cosa u otra, pero en cuanto a los retos ahora mismo son poco cuestionables. En cualquier caso, de esto es justamente de lo que hay que debatir, hablemos de lo que no se puede y s¨ª se puede hacer.

P. Pero a veces se le critica por realizar vaticinios muy contundentes que luego no se cumplen.

R. Seguro que me he equivocado en muchas cosas, lo curioso es que la gente que me critica es tan vaga que no lo busca, porque me critican por afirmaciones que no he hecho, esto es bastante rid¨ªculo, pero pasa a menudo. Por ejemplo, dicen: es que t¨² dijiste que nos ¨ªbamos a quedar sin di¨¦sel. Ah, cu¨¢ndo he dicho yo eso. La producci¨®n ha disminuido. Que no afecte a Europa no quiere decir que no afecta a Latinoam¨¦rica, mira la huelga de camioneros de Colombia o mira c¨®mo en Argentina, un pa¨ªs productor de petr¨®leo, se ha perdido un 20% de la cosecha por falta de di¨¦sel o mira la situaci¨®n de Nigeria, que por cierto es el principal proveedor de petr¨®leo de Espa?a. Evidentemente, yo soy humano, tengo mis sesgos, mis percepciones y mis errores. S¨¦ cosas que he dicho que est¨¢n mal, porque yo me equivoco, como cualquier otra persona, sobre todo a veces que te dejas llevar por una impresi¨®n, que dices: esto tiene muy mala pinta.