Los hermanos Weinstein, los productores estrella de Hollywood, rompen con Disney
Despu¨¦s de 12 a?os y 220 candidaturas a los Oscar, los fundadores de Miramax dejan la compa?¨ªa para iniciar un nuevo proyecto
Tras dos a?os de crisis abierta y varios meses de negociaciones, Bob y Harvey Weinstein han acordado su salida de Disney y abandonan la direcci¨®n de Miramax, la empresa que crearon en 1979 y que revolucion¨® la industria del cine con el impulso de las pel¨ªculas independientes. En 12 a?os esta filial ha logrado 220 candidaturas a los Oscar y aportaba el 2% de los beneficios del grupo.
El piano | 40,2 |
Pulp fiction | 107,9 |
El cartero | 21,8 |
Scream | 103 |
El indomable Will Hunting | 138,4 |
Shakespeare in love | 100,3 |
Ella es ¨²nica | 63,4 |
Scary Movie | 157 |
Spy kids | 112,7 |
Chicago | 170,7 |
Spy kids 3D | 111,8 |
El aviador | 93,6 |
Con el acuerdo anunciado anoche, Disney se queda con Miramax y su cat¨¢logo de pel¨ªculas, que incluye buena parte de los grandes ¨¦xitos de la ¨²ltima d¨¦cada, desde Pulp fiction hasta Chicago. Los Weinsten, adem¨¢s de ganar la libertdad que ansiaban, se llevan unos 100 millones de indemnizaci¨®n y se quedan con el sello Dimension Films, hasta ahora filial de Miramax, y se disponen a lanzar un nuevo proyecto empresarial con el apoyo financiero externo que hab¨ªan comenzado a amasar en sus ¨²ltimos a?os en Disney.
La relaci¨®n entre ambas compa?¨ªas se remonta a 1993, cuando los Weinstein vendieron su empresa Miramax (llamada as¨ª en honor a sus padres, Miriam y Max) a Disney por 88 millones de d¨®lares. Se abr¨ªa as¨ª una relaci¨®n tan fruct¨ªfera como tormentosa, que en los ¨²ltimos tiempos hac¨ªa aguas.
Los hermanos recuperaron para Hollywood el inter¨¦s por hacer pel¨ªculas de calidad y, lo que es m¨¢s importante, ganar mucho dinero con ellas. Se estrenaron con dos apuestas bien arriesgadas: una producci¨®n neozelandesa sobre una mujer muda que se casa con un maor¨ª (El piano, tres Oscar y 40 millones de taquilla) y un largometraje de un director casi desconocido que promet¨ªa ba?os de sangre, iron¨ªa y rock and roll, (Pulp fiction un oscar y 108 millones de recaudaci¨®n).
En sus producciones posteriores combinaron los grandes proyectos como El paciente ingl¨¦s (un melodrama ¨¦pico ambientado en la Guerra Mundial cuya filmaci¨®n estaba estancada porque nadie quer¨ªa invertir en el proyecto), Shakespeare in love o Chicago con otros de calidad m¨¢s discutible (por ejemplo, la saga de Scream) pero que permit¨ªan obtener liquidez para financiar nievas pel¨ªculas . Adem¨¢s, apostaron por distribuir pel¨ªculas extranjeras en Estados Unidos con los mismos honores que las producciones patrias. As¨ª llegaron primero El cartero (y Pablo Neruda) y luego el ¨¦xito sin precedentes de La vida es bella.
Receta conocida
La receta para el ¨¦xito de los Weinstein no era nueva. En realidad su trabajo sigue las pautas de los grandes productores de la ¨¦poca dorada de Hollywood como David O. Selznick o Samuel Goldwyn: implicaci¨®n total en cada proyecto, m¨¢s all¨¢ de lo meramente financiero, para intervenir tambi¨¦n en el resultado final. No en vano uno de ellos se gan¨® el apodo de Harvey Manostijeras por su afici¨®n a imponer recortes y retoques a las pel¨ªculas que produc¨ªa.
A ello hay que a?adir que hicieron de los Oscar su mejor herramienta publicitaria. Si todos los estudios sab¨ªan ya de la utilidad de los premios para promocionar sus pel¨ªculas, Miramax hizo de ellos su objetivo primordial: invirti¨® cantidades ingentes en campa?as de promoci¨®n y excedi¨® sin rubor los l¨ªmites impuestos por la propia Academia del Cine, por lo que obtuvo varias amonestaciones. Pero funcion¨®: en una d¨¦cada obtuvieron m¨¢s de medio centenar de estatuillas y 220 candidaturas, muy por delante de los grandes estudios.
Celos de Eisner
Pero la relaci¨®n con Disney nunca fue f¨¢cil, en gran medida a consecuencia del ¨¦xito. Michael Eisner, consejero delegado de la matriz, ve¨ªa con gran recelo el af¨¢n de protagonismo y el ansia de ¨¦xito de los Weinstein. Por ello, a pesar de que renov¨® en ocasiones sucesivas el contrato de los hermanos para dirigir Miramax, les impuso cortapisas financieras para tratar que no se salieran del cine de menor presupuesto y la distribuci¨®n de pel¨ªculas independientes. Todo en vano porque obtuvieron cr¨¦ditos externos para financiar sus proyectos.
Dos gotas colmaron el vaso. Primero, Cold mountain, un largometraje multimillonario que Miramax quiso convertir en el ¨¦xito de la temporada pero que fracas¨® rotundamente. Luego, la pol¨¦mica de Fahrenheit 9/11: Miramax puso el dinero y cuando lleg¨® el momento de distribuirla Eisner se lo prohibi¨® porque no quer¨ªa enfrentarse con el presidente Bush. Los Weinstein optaron por comprar a t¨ªtulo personal los derechos de la pel¨ªcula y acordaron con una empresa independiente la distribuci¨®n.
La salida de los hermanos era, pues, inevitable. En el ¨²ltimo a?o se han sucedido las propuestas, siempre fracasadas, incluyendo la posibilidad de que Bob -el menos d¨ªscolo- permaneciera al frente de Miramax mientras que Harvey abandonar¨ªa la compa?¨ªa para afrontar nuevos proyectos. Finalmente, lo har¨¢n juntos: una nueva empresa que integrar¨¢ producci¨®n, distribuci¨®n e Internet, seg¨²n han indicado, sin dar m¨¢s detalles.
Y ahora que Eisner se dispone a dejar la direcci¨®n del grupo (en septiembre le reemplazar¨¢ su segundo, Robert Iger), Miramax ser¨¢ lo que quer¨ªa: una compa?¨ªa de menor tama?o, con un presupuesto de 300 millones anuales frente a los 700 de la actualidad. Su nuevo director ser¨¢ designado en julio.
Proyectos en cartera
Seg¨²n The New York Times, Disney a¨²n participar¨¢ en la producci¨®n un buen pu?ado de proyectos de los hermanos Weinsten: Sacary movie 4, que se empieza a rodar en breve; Derailed (Descarrilado), con Clive Owen y Jennifer Aniston; la nueva pel¨ªcula del director Anthony Minghella, titulada Breaking and entering que protagonizar¨¢n Jude Law y Juliet Binoche; la distribuci¨®n de Mrs. Henderson Presents, un musical de Stephen Frears con Judi Dench producido por la BBC; Matador, con Pierce Brosnan; y el thriller Come closer. Los Weinsten se llevan en solitario a su nueva empresa una versi¨®n de cuatro horas de Kill Bill y la pel¨ªcula de miedo Wolf creek, que ya se ha presentado en el Festival de Sundance; adem¨¢s, producir¨¢n Feast, de John Gulager; la secuela que Kevin Smith prepara de su opera prima, Clerks; y un proyecto al alim¨®n entre Robert Rodr¨ªguez y Quentin Tarantino.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.