H¨¦roes del Silencio vuelven 10 a?os despu¨¦s

Hoy los amantes del rock han recibido una magn¨ªfica noticia. Porque al fin y al cabo, que la banda espa?ola de rock m¨¢s internacional anuncie su regreso, lo es. Y lo es porque hace 11 a?os, all¨¢ por el 96, tras aquella multitudinaria rueda de prensa en el Hard Rock Caf¨¦ de Madrid en la que confirmaron su separaci¨®n ?entonces temporal-, empezamos a perder la esperanza paulatinamente de ver otra vez a H¨¦roes del Silencio encima de un escenario.

Bunbury se encarg¨® de convencernos en sus primeras entrevistas tras la ruptura: "No habr¨¢ m¨¢s H¨¦roes". M¨¢s rotundo, imposible. Sus cabreos en algunos shows de Radical Sonora -debut en solitario-, cuando escuchaba a la gente corear "H¨¦roes, H¨¦roes", eran otro s¨ªntoma inequ¨ªvoco de su necesidad vital de romper con el pasado. En parte, no le faltaba raz¨®n ya que para ser algo distinto, ten¨ªa que quitarse de encima la sombra del grupo. Lo consigui¨® con no pocas dificultades. Firm¨® una carrera en ascenso, con muy buenas cr¨ªticas, y dej¨® un disco para la posteridad: Peque?o (1999).

Tampoco aport¨® mucho Juan Valdivia (guitarra solista), el otro gran l¨ªder del grupo, en sus dos entrevistas conocidas ?una publicada en Heraldo de Arag¨®n y otra que concedi¨® a un especial sobre el grupo de la revista Efe Eme-. Raj¨® de lo lindo, sobre todo de Enrique, y dej¨® constancia de su negativa absoluta a volverse a subir en escenario con sus compa?eros.

A Joaqu¨ªn Cardiel (bajista) le vimos distante, al margen incluso de lo que se coc¨ªa en el panorama musical zaragozano. Y siempre fue Pedro Andreu (bater¨ªa), el que m¨¢s pr¨®ximo estuvo a los fans y el que trataba de enviar mensajes conciliadores en la mejor direcci¨®n. Pedro Andreu ha sido siempre una bisagra especial, una persona con un talante lleno de bondad, constructivo y muy eficaz, dirigido siempre a mantener la base y la motivaci¨®n por la que un d¨ªa naci¨® el grupo.

Casi once a?os despu¨¦s del adi¨®s, H¨¦roes del Silencio regresan para realizar una gira de unos cuantos conciertos en Guatemala, M¨¦xico, Estados Unidos, Argentina y su Zaragoza natal. El ¨¦xito est¨¢ asegurado. Al fin y al cabo, H¨¦roes fue el gran fen¨®meno del rock nacional. Traspasaron fronteras inimaginables cantando en espa?ol, vendieron m¨¢s de cinco millones de discos y giraron durante a?os por toda Europa y Am¨¦rica. Abrieron las puertas de la Zarzuela al rock ?el Pr¨ªncipe de Asturias les recibi¨® en audiencia-, compartieron escenario en festivales con algunos de los m¨¢s grandes: Aerosmith, Led Zeppelin, Leonard Cohen? y descubrieron a muchos grupos espa?oles que con tes¨®n, sacrificio y un poquito de suerte, se pod¨ªan hacer grandes cosas allende nuestras fronteras.

Lo dejaron en el mejor momento, cuando la banda ya era un fen¨®meno internacional. Su ¨²ltimo disco en estudio, Avalancha (1995), lo hab¨ªa producido una leyenda de la m¨²sica, Bob Ezrin (productor de Pink Floyd, Lou Reed, Peter Gabriel, Kiss?), y en la gira de ese disco visitaron m¨¢s de 30 pa¨ªses. Una aut¨¦ntica locura.

La formaci¨®n original de H¨¦roes no contar¨¢ con el "quinto h¨¦roe", el mexicano Alan Boguslavsky, que entr¨® como guitarra r¨ªtmica en 1993 y que, hace algunas semanas, aseguraba desconocer cualquier plan del grupo para volver a los escenarios.

Este retorno puntual a gran escala servir¨¢ para saciar las ansias de miles de seguidores. Como las de Carmen Calvo, Ministra de Cultura, quien asegur¨® hace algunos meses que "si pudiera hacer algo por Decreto, ser¨ªa reunir a H¨¦roes del Silencio". Tambi¨¦n servir¨¢ para despejar muchas dudas, como el verdadero poder de convocatoria dentro y fuera de nuestras fronteras, y si despu¨¦s de once a?os, el sonido de H¨¦roes sigue teniendo la misma fuerza de entonces.

En Espa?a, Zaragoza ser¨¢ la ¨²nica ciudad que los ver¨¢ encima de un escenario. En concreto, la cita es el viernes 12 de octubre, en plenas fiestas del Pilar, en el Estadio de La Romareda. Un concierto para el que ya hay una enorme expectaci¨®n, considerando que seguidores de toda Espa?a y de muchos pa¨ªses de Europa se desplazar¨¢n masivamente hasta la capital aragonesa, para vivir este espect¨¢culo ¨²nico e irrepetible. ?Cu¨¢ntas horas tardar¨¢n en agotarse las entradas? No es dif¨ªcil vaticinar que volar¨¢n como sucedi¨® con las ¨²ltimas de U2 o Springsteen. Porque los H¨¦roes se hacen mayores ?han rebasado los 40 a?os-, vuelven puntualmente despu¨¦s de mucho tiempo y qui¨¦n sabe si despu¨¦s de esto, habr¨¢ otra ocasi¨®n de verlos en directo.

Los grandes cl¨¢sicos, desde Entre dos tierras hasta Iberia sumergida o La chispa adecuada, pasando por joyas como La sirena varada o Maldito duende, sonar¨¢n de nuevo y permitir¨¢n revivir la magia con la que este grupo deslumbr¨® a comienzos de los 90. La tan deseada "gira del pr¨®ximo milenio" ya est¨¢ aqu¨ª