La peculiar visi¨®n de Marc Vilallonga
El artista utiliza la fotograf¨ªa manipulada por ordenador, trabajando sobre la sorprendente base de botes de desodorante, para que el espectador participe del juego que propone
La m¨¢s reciente, rara y curiosa de las especies l¨²dicas la forman los llamados juguetes de dise?o, mini toys o juguetes de coleccionismo (palabra que encierra siempre algo de obsesivo o patol¨®gico). Podemos encontrar tiendas especializadas en ellos, portales de Internet o verlos en las estanter¨ªas de las casas de nuestros amigos. No parecen estar destinados a los ni?os, todo lo contrario, y con ellos no se puede jugar. Este inexplicable fen¨®meno sirve de pretexto y punto de partida para la actual propuesta de Marc Vilallonga para nuestro espacio.
Estupendament, est¨²pidament es buen ejemplo de la peculiar visi¨®n, a medio camino de la contemplaci¨®n perpleja y la sutil iron¨ªa, con la que este artista aborda el retrato del motivo elegido. Heterodoxo en la tem¨¢tica de su obra, as¨ª como en la t¨¦cnica (pintura, fotograf¨ªa o video), pero siempre impecable en la factura y acabado de las mismas, Marc Vilallonga utiliza esta vez la fotograf¨ªa manipulada por ordenador, trabajando sobre la sorprendente base de botes de desodorante, para que nosotros participemos tambi¨¦n del juego, enga?osamente inocuo y nunca in¨²til. Magritte dec¨ªa: "El arte no sirve para nada. Eso lo hace imprescindible", tanto como el juego o la visita a esta exposici¨®n.
La exposici¨®n se exhibe en la sala Xina A.R.T., en Barcelona.
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