Baremo de calidad e inc¨®gnitas
El Ballet de Teatres de la Generalitat, a la b¨²squeda de core¨®grafo de prestigio
La reposici¨®n de Carmen (de Ram¨®n Oller) por el Ballet de Teatres de la Generalitat (BTG) es una buena ocasi¨®n para analizar la progresi¨®n y perspectivas de esta compa?¨ªa de ballet moderno. Tras la Compa?¨ªa Nacional de Danza (CND) y su subsidiaria CND2 que dirige el tambi¨¦n valenciano Nacho Duato y el Ballet de la Comunidad de Madrid que dirige V¨ªctor Ullate, la compa?¨ªa valenciana, fundada en 2004 y que debutara con el proyecto Aman se erige en tercera de las agrupaciones p¨²blicas (todas dedicadas a la expresi¨®n contempor¨¢nea y neoacad¨¦mica), tanto por su perspectiva profesional como por las caracter¨ªsticas de su repertorio, si bien, en esta "mini-temporada" exitosa del Principal del 6 al 15 de noviembre (donde han agotado las localidades de matin¨¦e y noche en todas las representaciones) se han basado en reposiciones (y en el buen criterio de usufructuar fondos de armario).
La entrada triunfal de Duato qued¨® en agua de borrajas y el proyecto peligra
De una parte, Aman, creaci¨®n de Patrick de Bana para el BTG de hace un lustro que ya en este verano de 2009 fue ampliada y retocada para ser exhibida en el Teatro Romano de Sagunto, y Carmen (creada en 2003 por el core¨®grafo de Esparraguera para su compa?¨ªa barcelonesa y la que ha sido su ¨²ltima gran producci¨®n de lustre).
Carmen ha ganado mucho bailada por el BTG por dos sencillos pero b¨¢sicos argumentos: los bailarines son muy buenos y su rigor disciplinario, su empaque de conjunto, conceden a la lectura coreogr¨¢fica m¨¢s que un valor a?adido, una nueva perspectiva est¨¦tica.
Viene al caso aquello de que "no hay coreograf¨ªa indiferente en cuerpo de buen bailar¨ªn", lo que a veces se cumple y a veces no; Carmen tiene todos los componentes del estilo ecl¨¦ctico de Oller, su tendencia al rompe y rasga, su afici¨®n por lo vern¨¢culo y lo pasional, pero metido todo en un contenedor contenido.
En el BTG de hoy conviven bailarines de Espa?a, Italia, Bulgaria, M¨¦xico, Argentina, Colombia y Francia hasta un total de 18 elementos y tres meritorios (becarios), cumpliendo as¨ª con una de las normas no escritas pero actuantes de la danza global y de sus imperativos de internacionalizaci¨®n basculante, lo que tambi¨¦n debe encontrar reflejo en la parte est¨¦tica, es decir, los estilos de lo que se ofrece al p¨²blico.
Hace menos de un a?o, se hablaba (y se publicaba) insistentemente de que Nacho Duato, tras su cese anunciado (y comunicado) como director art¨ªstico de la CND, vendr¨ªa a recalar a Valencia con un n¨²mero indeterminado de sus artistas fieles, su equipo personal y su repertorio, lo que pondr¨ªa al BTG en una posici¨®n jer¨¢rquica muy diferente, hacia arriba, de la actual. La entrada triunfal de Duato en las riberas del Turia qued¨® en agua de borrajas con el cese de C¨¦sar Antonio Molina como ministro de cultura y Juan Carlos Marset como director del Instituto Nacional de las Artes Esc¨¦nicas (Inaem) como ministro (que no escatimaron ni en p¨²blico ni en privado su deseo de echar a Duato).
El nombramiento de ?ngeles Gonz¨¢lez Sinde como ministra retrotrajo la escena al punto anterior: Duato se queda en Madrid y Valencia se queda sin Duato. Pero el arranque y ampliaci¨®n estructural (con sus consiguientes cambios cualitativos) del BTG ya era un hecho, de modo que la direcci¨®n de Teatres (con la base de Centro Coreogr¨¢fico fundado en 1998 y a¨²n de modelo ¨²nico en Espa?a) se enfrenta a reconducci¨®n del proyecto en su parte art¨ªstica. A falta del core¨®grafo estrella de relumbr¨®n, solamente la calidad de materiales actuales del mercado global de la coreograf¨ªa pod¨ªan garantizar una continuidad expositiva y un desarrollo sostenido del proyecto. En la tarea de "compa?¨ªa busca core¨®grafo" el experimento ha comenzado pausadamente sin riesgo y por lo conocido: De Bana y Oller. Habr¨ªa que mantenerse atentos a lo que pasa en los salones soleados de Burjasot.
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