Amores tristes de verano en el Teatre Nacional de Catalunya

Habr¨¢ turbulencias emocionales a partir de esta noche a la Sala Gran del Teatre Nacional de Catalunya (TNC). El director Josep Maria Mestres estrena Un mes al camp, una comedia que define "triste y luminosa", como la describe Mestres, del escritor ruso Ivan Turgu¨¦nev. La escribi¨® en 1849, pero la censura no permiti¨® que se estrenara hasta 30 a?os despu¨¦s porque dejaba a cuerpo descubierto demasiados verg¨¹enzas de la aristocracia de su tiempo.

La protagonista absoluta de la obra es Natalia Petrovna (S¨ªlvia Bel), casada con un noble (Xavier oada) por un acuerdo entre familias. Su matrimonio transcurre tedioso hasta que se trasladan a pasar el verano al campo y conviven bajo el mismo techo criados e invitados. Llega un profesor muy joven (Robert Gonz¨¢lez) y Natalia se enamora. Los separan la clase social y la edad, obst¨¢culos imposibles de superar a la ¨¦poca.

Con todo, ella, que nunca hab¨ªa conocido la pasi¨®n, pierde el control de s¨ª misma y toda la gente que la rodea sufrir¨¢ de alguna manera las consecuencias de sus actos y del miedo que la domina. Entre ellos, Rakitin (Josep Maria Casany), su confidente. Est¨¢ enamorado de ella y su marido lo sabe y lo tolera. Tambi¨¦n la adolescente hu¨¦rfana (Diana Torn¨¦) que mantiene acogida en casa y a quien el profesor tiene que dar clase a pesar de los celos de la dama de la casa. O una criada (Tilda Espluga), que se siete atra¨ªda por los encantos del joven recien llegado.

"Natalia es consciente que hace cosas malas pero no puede evitarlo", explica Bel, para quien este papel es lo "m¨¢s fr¨¢gil", que ha interpretado nunca. "La obra desborda vida y va al epicentro de las emociones humanas para hacerlas implosionar", afirma Mestres.

Turgu¨¦nev, considerado precursor de Ch¨¦jov, tambi¨¦n hace un retrato de la alta clase rusa en un momento en que la opulencia se empezaba a darse la mano con la decadencia. Adem¨¢s, a?os despu¨¦s del estreno, el escritor confesar¨ªa que la obra tiene mucho de autobiogr¨¢fica y que, en realidad, el personaje de Rakitin, era ¨¦l mismo.

El escritor estuvo enamorado durante 40 a?os de la cantante de origen espa?ol Paulina Viardot. Estaba casada y ¨¦l se llevaba muy bien con su marido. Por eso los sigui¨® por Europa incansablemente.

Para este montaje, que se representar¨¢ hasta el pr¨®ximo 10 de abril, Llu¨ªs Llach ha compuesto tres piezas musicales. Una de ellas, S¨ªlvia, est¨¢ dedicada a la actriz protagonista. Sonar¨¢n pregrabadas grabadas en la sala, en la cual solo estar¨¢n disponibles para cada funci¨®n las primeras 14 hileras. Mestres quiere que el p¨²blico palpe de cerca las l¨¢grimas y la delicadeza de una obra que plantea una cuesti¨®n vital: lanzarse a disfrutar del momento o vivir languideciendo para siempre jam¨¢s.