Esta exposici¨®n vale una pasta

La culpable fue la bechamel. "Mientras esperas a que est¨¦ lista, pasas mucho tiempo mirando al infinito", explica el fot¨®grafo Mois¨¦s Ru¨ªz. En un momento dado sin embargo, su mirada debi¨® de dirigirse hacia su entorno, es decir la cocina. All¨ª, mezclando instintivamente fantas¨ªa, talento y los canelones que esperaban a la salsa, Ru¨ªz coci¨® una idea entre art¨ªstica y peculiar: pintar una imagen encima de la pasta. Meses despu¨¦s, la receta fue sumando ingredientes y aficionados, la intuici¨®n se hizo proyecto, y aquel canel¨®n fue seguido por otros 83 en los que 37 artistas pintaron, fotografiaron o esculpieron su visi¨®n de Italia. El plato final se expone en la muestra Canelonia, que se puede visitar desde el pasado viernes en el festival La Mar de M¨²sicas de Cartagena.

"Me gusta cambiar el soporte para mis im¨¢genes, experimentar", asegura Ru¨ªz. Tanto, que del papel fotogr¨¢fico ha llegado hasta el canel¨®n. "Es una superficie tan bonita, tan limpia y tan peque?a", cuenta el fot¨®grafo. Y perfecta para exponerse en un festival que este a?o est¨¢ dedicado a Italia.

Nacida en la cocina, en algunos casos Canelonia ni siquiera lleg¨® a salir de ella. "Vinieron a comer a mi casa varios pintores de Cartagena. Mois¨¦s me dio un canel¨®n y me dijo que pintara algo encima. Cog¨ª los rotuladores de mi nieta y dibuj¨¦ lo primero que se me ocurri¨®", cuenta Dora Catarineu, una de las participantes en el proyecto. Fue una imagen sencilla inspirada por Sole, pizza y amore, "una canci¨®n de mi ¨¦poca", detalla la artista. Jugando con la fon¨¦tica, Catarineu sustituy¨® sin embargo la comida t¨ªpica italiana con... un pene.

La artista cumpli¨® con la tal vez ¨²nica regla del proyecto. Ru¨ªz quer¨ªa obras al dente, que se realizaran en cinco minutos. Pero algunos dejaron rehogar su creaci¨®n durante m¨¢s tiempo. "Hay cosas muy sesudas, como una escultura titulada Che cazzo vuoi con una mano que se mueve y hace el gesto t¨ªpico de los italianos", cuenta el fot¨®grafo.

De Vacaciones en Roma a Topo Gigio, del Calcio a Berlusconi, los cuadritos de Canelonia son espejo fiel de la realidad italiana. "Hab¨ªa libertad absoluta a la hora de escoger el tema", tercia Ru¨ªz. Por tanto, el abanico de las creaciones va desde el t¨®pico hasta lo m¨¢s imprevisible. En los peque?os canelones hay espacio tanto para la Italia de Dante y de las g¨®ndolas venecianas como para la mafia.

Adem¨¢s del tema central, la superficie poco convencional oblig¨® los chefs a pensar en t¨¦cnicas distintas. Los pintores trabajaban directamente sobre la pasta, pero a los fot¨®grafos se les exigi¨® m¨¢s imaginaci¨®n. Pegar una imagen al rev¨¦s encima del canel¨®n con el l¨¢tex y, tras dejarla secar, levantar el papel con agua para que se transfiriera fue una de las opciones. Planchar la foto tambi¨¦n funcionaba, aunque al canel¨®n calentado le sal¨ªan grumos. Normal, ya que no est¨¢ acostumbrado al escenario del arte. Lo suyo es m¨¢s bien esperar a la bechamel.