Una ventana al mundo de Huckleberry

Huckleberry Finn ha dado un salto desde el Misisip¨ª en el que lo imagin¨® Mark Twain hasta el moderno barrio de Chelsea, en Nueva York. All¨ª, arropado por la galer¨ªa Paul Kasmin, el artista catal¨¢n Santi Moix ha reinterpretado aquella novela imprescindible transform¨¢ndola en coloridas acuarelas y collages de grandes dimensiones donde toman vida personajes y escenas del primer gran libro de la literatura estadounidense.

Afincado desde hace m¨¢s de dos d¨¦cadas en Estados Unidos, un pa¨ªs al que lleg¨® solo, sin becas ni ayudas, y en el que se ha construido una s¨®lida carrera, Moix, que habitualmente trabaja en un ¨¢mbito m¨¢s abstracto, tambi¨¦n se ha atrevido a invadir con carboncillo las paredes de toda la galer¨ªa, disfrutando de un placer, el dibujo, que abraz¨® relativamente tarde en su carrera. ¡°En mi pintura siempre ha predominado la abstracci¨®n pero lo cierto es que cada vez me interesa m¨¢s el dibujo porque es la esencia de la expresi¨®n¡± explicaba el pasado 5 de enero durante la inauguraci¨®n de una muestra que ha recogido excelentes cr¨ªticas en la prensa estadounidense y que podr¨¢ verse hasta el 5 de febrero.

Moix tambi¨¦n se ha atrevido a invadir con carboncillo las paredes de la galer¨ªa

El viaje de Moix, de 52 a?os, hacia el colorido coraz¨®n de Huckleberry Finn comenz¨® con el libro hom¨®nimo, adquirido en la m¨ªtica librer¨ªa neoyorquina de segunda mano Strand. ¡°Se lo quer¨ªa regalar a mi hija y dentro encontr¨¦ un billete de cien d¨®lares. Inmediatamente lo interpret¨¦ como una se?al¡±. Curiosamente, poco despu¨¦s, reinstalado temporalmente en Barcelona, el C¨ªrculo de Lectores le propuso hacer una serie de ilustraciones para ese libro, un reto que le lleg¨® poco despu¨¦s de que su galer¨ªa neoyorquina le hubiera invitado a ilustrar El Quijote. ¡°Ilustrar la obra de Cervantes fue un trabajo muy duro f¨ªsicamente porque fueron im¨¢genes realizadas a punta seca, a lo largo de ocho meses y a causa de ello perd¨ª la sensibilidad en uno de mis dedos. Lo extra?o es que ahora siento con mucha m¨¢s fuerza cada trazo y cada l¨ªnea cuando trabajo¡±.

Afirma que explorar la obra de Cervantes fue descubrir, entre otras cosas, que el libro encierra una declaraci¨®n de amor hacia Barcelona y el mar, desde la primera frase. Y aunque conoce perfectamente el paisaje que se describe en la novela cervantina, le ha resultado m¨¢s f¨¢cil con la obra de Twain, aunque haya tenido que trabajar sobre el libro dos veces, una para crear las ilustraciones y otra a petici¨®n de la galer¨ªa, reinterpret¨¢ndolas a dimensiones mucho m¨¢s grandes.

¡°Nunca he estado en el sur de Estados Unidos. Es m¨¢s, es el viaje que tengo pendiente ahora que he terminado el trabajo.Pero Huckleberry es un personaje m¨¢s gamberro que El Quijote, con una frescura y un sentido de la justicia que muchos adultos hemos perdido y de alguna manera lo he sentido m¨¢s cercano a m¨ª porque me ha hecho a?orar y recordar otros momentos de mi vida. Esa ventana por la que se escapa de noche en el fondo es la misma por la que yo me escapaba. Estoy seguro que en la vida de todos nosotros hay un verano en el que una ventana nos abri¨® las puertas y nos cambi¨® nuestra visi¨®n del mundo¡±. Ahora es posible asomarse a ella a trav¨¦s de esta exposici¨®n.