Parece Sarah Palin pero es Julianne Moore

?Alguien recuerda aquello de "puedo ver Rusia desde mi casa"? Sarah Palin de Alaska sigue viva, aunque haya hecho mutis por el foro de la pol¨ªtica estadounidense y se haya refugiado en su mansi¨®n de Arizona. Pero ahora en temporada electoral, la exgobernadora de Alaska vuelve a escena. No exactamente ella. M¨¢s bien se trata de la interpretaci¨®n que de ella hace Julianne Moore. En el telefilme Game change, de la HBO, la protagonista de Las horas se une a la tradici¨®n de actores que encarnan a pol¨ªticos, en la que impera Meryl Streep con su rendici¨®n de Margaret Thatcher. Moore ten¨ªa un buen material del que partir. Palin es menos sofisticada, m¨¢s campechana y f¨¢cil de imitar que Thatcher. Desde el tono de voz al deje puramente americano, Palin es carne de club de la comedia, como demostr¨® con ¨¦xito la humorista Tina Fey en Saturday Night Live.

La tv movie, dirigida por Jay Roach, -se estrenar¨¢ en EE UU el 10 de marzo-, se inspira en un libro del mismo t¨ªtulo escrito por dos periodistas pol¨ªticos, John Heilemann y Mark Halperin, que relata c¨®mo la elecci¨®n de Palin como candidata a la vicepresidencia en 2008 cambi¨® el juego pol¨ªtico y arruin¨® la campa?a del senador John McCain. Moore retrata a una Palin al borde del ataque de nervios, superada por las circunstancias, que tras los focos se hunde. "?No fue mi culpa! No se me prepar¨® lo suficiente", exclama Moore. "Me dicen lo que decir, lo que llevar, c¨®mo hablar... ?Yo no soy vuestra marioneta!". Su parecido f¨ªsico es extraordinario, logrado sobre todo por su marca registrada: el mo?o y las gafas. El vestuario es tambi¨¦n de una fidelidad apabullante. En la piel de McCain, el actor Ed Harris es menos convincente. El veterano senador tiene un porte tan particular, no puede levantar los brazos por las torturas sufridas en Vietnam, que es complicado interpretarle.