La pasarela gris de los pol¨ªticos
'Pol¨ªtica y moda. La imagen del poder', es un libro que pone en el banquillo a los pol¨ªticos Gobierna con uniforme y est¨¢ muy lejos de la moda de la calle Varios expertos analizan el vestuario y la apariencia de los personajes p¨²blicos
Los pol¨ªticos espa?oles gobiernan con uniforme: un traje, y la mayor¨ªa de las veces mal llevado. El Parlamento no solo no es ninguna pasarela sino que sigue muy de lejos la moda de la calle. Si los pol¨ªticos no se quitan su uniforme, el de las pol¨ªticas todav¨ªa no est¨¢ definido del todo. Aqu¨ª no se presta tanta atenci¨®n a esta faceta de la imagen pol¨ªtica como en otros pa¨ªses, aunque se hacen progresos. ?Se preocupa la clase pol¨ªtica lo suficiente por su ropa? ?Qu¨¦ debe decir el atuendo de un pol¨ªtico?
¡°Tiene que ser coherente, serio, dar cercan¨ªa y seguridad al que la lleva. Esto es lo que debe buscar el estilismo gubernamental, todo equilibrado para que el pol¨ªtico resulte cre¨ªble¡± explica Patrycia Centeno, periodista y autora del libro Pol¨ªtica y Moda. La imagen del poder (Pen¨ªnsula) y directora de la web del mismo nombre (http://www.politicaymoda.com/), donde analiza lo que se ponen nuestros pr¨®ceres. Para ella, un pol¨ªtico no deber¨ªa ir jam¨¢s vestido a la moda, "porque la moda es un sistema con caducidad y un pol¨ªtico no puede permitirse caducar cada seis meses. Su objetivo es perdurar en el cargo y en el tiempo¡±.
Tambi¨¦n es importante por su funci¨®n de representaci¨®n, recuerda el asesor de comunicaci¨®n pol¨ªtica Antoni Guti¨¦rrez-Rub¨ª. Los pol¨ªticos en el Parlamento "son nuestros representantes y presentarse con dignidad es una cuesti¨®n de respeto democr¨¢tico. Nadie votar¨ªa a un pol¨ªtico sucio o con ropas desgarradas¡±. Cada a?o Guti¨¦rrez-Rub¨ª hace un repaso de lo que ha dado la temporada pol¨ªtica en cuesti¨®n de vestuario (http://www.gutierrez-rubi.es/2012/01/02/la-moda-politica-de-2011/).
Coinciden los expertos en que los pol¨ªticos espa?oles no est¨¢n muy all¨¢ en cuestiones de vestuario. "Su imagen es mejorable y deber¨ªan valorarse un poco m¨¢s y proyectar una imagen mejor. Potenciar sus puntos fuertes y minimizar los d¨¦biles¡±, recomienda Montse Guals, de la asesor¨ªa de imagen personal Qu¨¦ me pongo (http://www.quemepongo.es/). Mientras que en otros pa¨ªses se hace pol¨ªtica por y para los medios y se pone especial cuidado en este aspecto, aqu¨ª suele ser tarea del gabinete de comunicaci¨®n de los partidos y tampoco se esmeran demasiado en cuidar la indumentaria, quiz¨¢s con excepci¨®n de las campa?as electorales. Aunque s¨ª se han notado mejoras a este respecto cuando Jos¨¦ Luis Rodr¨ªguez Zapatero y Mariano Rajoy accedieron a la presidencia. ¡°A Zapatero, cuando lleg¨® a presidente, se le hicieron ciertos retoques: ajustar los hombros de la americana, adoptar el uso de camisa blanca o azul, cambiar las corbatas que llevaba, que a veces luc¨ªa con motivos infantiles, o sustituir los mocasines por los zapatos de cordones¡±, observa la estilista.
¡°Creo que estamos obcecados con el traje y la corbata¡±, dice Centeno, ¡°el uniforme pol¨ªtico se cre¨® que en siglo XIX y ha habido pocas variaciones. Para ellos representa un escudo y no permiten que haya m¨¢s variaciones, exceptuando que cada verano se plantea el debate corbata s¨ª o corbata no. Pero existen m¨¢s alternativas¡±. Por lo dem¨¢s, no todos los trajes son iguales. ¡°Hay un traje ideal para cada silueta, m¨¢s o menos estructurados¡±, explica Guals. ¡°Importa el color, el grosor de la solapa y su combinaci¨®n con la corbata, etc¨¦tera. Y ah¨ª se ve mucha falta de armon¨ªa entre la clase pol¨ªtica¡±.
El atuendo de la mujer pol¨ªtica todav¨ªa no est¨¢ completamente definido. ¡°El uniforme pol¨ªtico femenino hay que construirlo de nuevo¡±, sentencia Centeno. "El del hombre fue creado para ellos cuando nadie imaginaba que la mujer iba a entrar en pol¨ªtica. ?Qu¨¦ hace la mujer? O se viste imitando la vestimenta de sus colegas masculinos o se feminiza, las dos opciones no eximen de juicio, siempre van a recibir cr¨ªticas¡±. La candidata socialista francesa en 2007, S¨¦gol¨¨ne Royal, hizo mucho por modernizar la imagen de las pol¨ªticas, en opini¨®n de Centeno, proponiendo que era posible optar al gobierno siendo guapa y femenina. En el otro lado podr¨ªa citarse a Angela Merkel, que, seg¨²n Guals, ¡°deber¨ªa mejorar mucho su imagen. Tiene un aspecto muy masculino pero tiene que entender que tambi¨¦n se puede ejercer el poder con un look femenino¡±.
Caso aparte es el de Amaiur, cuya imagen se aleja muchas veces de lo convencional en pol¨ªtica
Las diferencias entre las pol¨ªticas de derecha y de izquierda se han ido desolviendo en los ¨²ltimos a?os, en la era del capitalismo global. ?Pasa lo mismo con los atuendos estereotipados de la izquierda y la derecha? ¡°El mundo de la trenka se ha superado ya por un estilo m¨¢s cosmopolita y urbano. Si puede haber diferenciaci¨®n entre looks m¨¢s cl¨¢sicos y otros m¨¢s contempor¨¢neos, a la moda, pero ni tienen que limitarse lo conservadores a los primeros y los progresistas a los segundos. Eso depender¨¢ de cada persona¡±, dice Guti¨¦rrez- Rub¨ª. ¡°La izquierda y la derecha en general ya no se reconocen, ya no hay tantas diferencias, porque un d¨ªa llegaron a la conclusi¨®n de que si estaban todos en el centro pod¨ªan aprovechar m¨¢s votos, cuando se mimetiza el mensaje y se mimetiza tambi¨¦n la imagen¡±, explica Centeno. La imagen de la derecha se ha ido modernizando, sobre todo despu¨¦s de que el expresidente Jos¨¦ Mar¨ªa Aznar comenzase a lucir una melena informal. Seg¨²n Centeno, en las Nuevas Generaciones del PP cada vez se lleva m¨¢s un estilo chic bohemio, un poco hippie, que busca actualizarse. Pero, agrega, si se compara con las juventudes socialistas, s¨ª que hay algunas diferencias. En personas de m¨¢s de 50 a?os el uniforme es m¨¢s parecido, es una edad en que los cambios tampoco se aceptan tan r¨¢pidamente.
Caso aparte es el de Amaiur, cuya imagen se aleja muchas veces de lo convencional en pol¨ªtica, prescindiendo de la corbata y utilizando otras prendas como su¨¦teres, camisetas y dem¨¢s. ¡°Se saltan lo establecido, pero est¨¢ bien, es ideolog¨ªa de izquierdas, tiene su justificaci¨®n. Me puede gustar m¨¢s o menos que vayan al Congreso con tejanos, pero no me parece una incoherencia. No todos tienen que vestir igual, sino que han de ser reconocibles por el electorado¡±. Las camisetas con mensaje estampado en el pecho tambi¨¦n son frecuentes en ciertos sectores de la izquierda, como en el caso de M¨°nica Oltra, diputada de Comprom¨ªs en las Cortes Valencianas, aunque no est¨¢ claro que esto sea lo m¨¢s recomendable: ¡°Las camisetas con mensaje distraen del discurso. Si leo lo que pone la camiseta puedo dejar de prestar atenci¨®n al discurso¡±, afirma Centeno. Una flagrante incoherencia ideol¨®gica fue la ocasi¨®n en la que la popular Mar¨ªa Dolores de Cospedal luci¨® un pa?uelo palestino morado en un acto del partido en 2010. M¨¢s coherentes con el estado actual de las cosas y su ideolog¨ªa (que no del todo bien) son los ministros del actual gobierno: ¡°Van en plan funeral, pero tambi¨¦n el momento acompa?a. Dicen los soci¨®logos que en periodos de depresi¨®n econ¨®mica o guerra lo que buscamos es al padre protector, buscamos vestimentas muy conservadores. En este asunto, el PP lo tiene f¨¢cil¡±.
?Qu¨¦ pol¨ªticos se visten bien? ¡°Es una pregunta dif¨ªcil, definir qu¨¦ es vestir bien¡±, explica Guti¨¦rrez-Rub¨ª:? ¡°Cuando Hugo Ch¨¢vez se viste con camisas rojas o con un ch¨¢ndal estampado con la bandera venezolana puede que no est¨¦ vistiendo bien seg¨²n nuestro gusto est¨¦tico, pero s¨ª perfectamente acorde con su movimiento pol¨ªtico¡±. Sin embargo s¨ª hay pol¨ªticos que, seg¨²n los expertos, mantienen una buena imagen. Uno de ellos es Josep Antoni Duran i Lleida, portavoz parlamentario de CiU. ¡°No solo porque siempre va impoluto. Viste muy coherente con su ideolog¨ªa de derechas, su imagen tambi¨¦n es muy conservadora, pero despu¨¦s se acerca a la gente con elementos de tendencia, las gafas de colores, las corbatas, los tejidos que usa que no son los comunes en pol¨ªtica. Lo domina perfectamente, y gana puntos. Aparte de seguro y serio tiene esa cercan¨ªa¡±, dice Centeno. En el plano femenino cabr¨ªa destacar a la exministra Elena Salgado. ¡°Utilizaba color, bolso, joyas, se maquillaba y nunca se ha o¨ªdo un comentario sobre su imagen¡±, explica la periodista, ¡°y si se o¨ªa algo era para decir ¡®qu¨¦ correcta va esta mujer siempre¡¯. Nunca guapa o extraordinaria, la palabra era correcta. Ese es el secreto, que la imagen acompa?e, nunca eclipse¡±.
Sobre el presidente estadounidense Barack Obama hay unanimidad: su encanto natural va m¨¢s all¨¢ de su indumentaria y puede resultar elegante incluso en traje de ba?o saliendo del mar, o remang¨¢ndose la camisa para agacharse a saludar a una ni?a, situaciones en las que se le ha visto en los ¨²ltimos tiempos. Son ejemplos en el que el carisma del personaje va por delante. El verdadero poder es, por ejemplo, el del desaparecido Steve Jobs, que ni siquiera necesitaba vestir formal y proyectaba una imagen poderosa con un jersey negro de cuello vuelto y unos tejanos. ¡°Se nota mucho cuando se viste con algo y no se siente a gusto¡±, concluye Guti¨¦rrez-Rub¨ª, ¡°la ropa no hay solo que pon¨¦rsela, sino vivirla, mimetizarse con ella como si fuese una segunda piel, no como una armadura o un cors¨¦.
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