¡®El se?or de Sip¨¢n¡¯ duerme en TVE
El documental sobre la tumba del gobernante mochica se ha emitido en todo el mundo La corporaci¨®n congela el estreno por la crisis
Siglo III, Sip¨¢n, norte de Per¨². Un poderoso gobernante mochica ha muerto. Sus s¨²bditos se preparan para organizar los fastos funerarios. El se?or de Sip¨¢n, un semidios al que nadie se atreve a mirar a los ojos, ha sido embalsamado con ornamentos y emblemas sagrados de oro, plata y piedras preciosas que seguir¨¢ utilizando en el m¨¢s all¨¢. 1700 a?os despu¨¦s, el arque¨®logo Walter Alva descubre su necr¨®polis, la m¨¢s importante de Am¨¦rica Latina, un hallazgo comparable a la tumba de Tutankamon o al ej¨¦rcito de terracota de Xian.
El documental El se?or de Sip¨¢n ha recreado la vida de aquella civilizaci¨®n, una de las m¨¢s avanzadas del continente. La obra se ha emitido en un centenar de pa¨ªses. El canal National Geographic la ha distribuido en Am¨¦rica Latina. Ha cruzado el mundo, de Alemania a Jap¨®n, de Italia a Australia. Ha sido comprada por Rusia, Irak o Emiratos ?rabes. En algunos pa¨ªses se han emitido ya hasta cinco pases. Pero en TVE, la cadena que contribuy¨® a su producci¨®n, El se?or de Sip¨¢n ha corrido la misma suerte que su protagonista: contin¨²a dormido.
El documental ¡°se han emitido en las mejores televisiones del mundo menos aqu¨ª¡±, comenta incr¨¦dulo su director, Jos¨¦ Manuel Novoa. ¡°Se entreg¨® hace tres a?os. TVE lo pag¨® pero sigue en la bodega¡±. La cadena p¨²blica aspiraba hace un a?o a emitirlo en una edici¨®n de La noche tem¨¢tica dedicada a la arqueolog¨ªa. Ahora los tiempos han cambiado. El director de programaci¨®n de La 2, Manel Arranz, argumenta que ¡°por condicionantes econ¨®micos¡±, no est¨¢ previsto que se estrenen documentales este a?o. Tampoco series propias o pel¨ªculas financiadas por la cadena.
Coproducido por Explora Film, El Deseo y RBA Audiovisuales, el rodaje se prolong¨® durante tres a?os. Los productores reconstruyeron la aldea en la que rein¨® el se?or de Sip¨¢n a partir de los vestigios que comenzaron a salir a la luz en 1987, cuando dos polic¨ªas secretos siguieron la pista de un joven que en un pueblo del desierto peruano pag¨® su noche de borrachera con una milenaria pieza de oro. La polic¨ªa comprob¨® entonces que la poblaci¨®n estaba saqueando sin piedad la pir¨¢mide de Huaca Rajada. Las excavaciones realizadas en la zona fueron fruct¨ªferas. Los arque¨®logos encontraron una docena de tumbas de sacerdotes, jerarcas, guerreros, chamanes, con tesoros extraordinarios.
Televisi¨®n Espa?ola coprodujo este proyecto. Formaba parte del cat¨¢logo de largometrajes en los que invierte cada a?o, ya que la cadena p¨²blica est¨¢ obligada a destinar un 6% de sus ingresos en pel¨ªculas, documentales o producciones de animaci¨®n. Arranz recuerda que la decisi¨®n de no estrenar determinados contenidos obecede a un motivo contable, toda vez que el coste de estas producciones se imputa cuando se emiten, no cuando se compran.
En la misma situaci¨®n de El se?or de Sip¨¢n se encuentran otros documentales de Explora, como La Joya y Los Guerreros de la Niebla, que retrata la cultura Chachapoyas (entre 800 y el 1500, a m¨¢s 3.000 metros de altura en el norte de Per¨²), un pueblo que se asent¨® en una zona de selva aparentemente imposible de habitar. Esta obra fue entregada a TVE hace dos a?os. El legado celta, un documental sobre las antiguas culturas gallegas, desde el megal¨ªtico hasta la romanizaci¨®n, est¨¢ igualmente a la espera de ver la luz.
Pero no son los ¨²nicos trabajos afectados por los recortes econ¨®micos. Muchos de los documentales que han recibido financiaci¨®n de TVE (unos 35 al a?o) est¨¢n metidos en la nevera. Este a?o, por ejemplo, podr¨ªan emitirse obras como La maleta mexicana, que cuenta la historia de miles de negativos de los fot¨®grafos Robert Capa y Gerda Taro; Ibiza occidente, del austriaco G¨¹nter Schwaiger, o ?Cu¨¢nto pesa su edificio, se?or Foster?, que ya se han estrenado en cine. Pero, como le ocurre al preboste de Sip¨¢n, por ahora tendr¨¢n que esperar.
Tu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo
?Quieres a?adir otro usuario a tu suscripci¨®n?
Si contin¨²as leyendo en este dispositivo, no se podr¨¢ leer en el otro.
FlechaTu suscripci¨®n se est¨¢ usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PA?S desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripci¨®n a la modalidad Premium, as¨ª podr¨¢s a?adir otro usuario. Cada uno acceder¨¢ con su propia cuenta de email, lo que os permitir¨¢ personalizar vuestra experiencia en EL PA?S.
En el caso de no saber qui¨¦n est¨¢ usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contrase?a aqu¨ª.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrar¨¢ en tu dispositivo y en el de la otra persona que est¨¢ usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aqu¨ª los t¨¦rminos y condiciones de la suscripci¨®n digital.