Diego Figari, plasmador del desasosiego
El artista evolucion¨® desde una figuraci¨®n pretendidamente infantil e inocente al abigarramiento iconogr¨¢fico
¡®IN MEMORIAM¡¯
Diego Figari Llop muri¨® el martes 27 de marzo en la habitaci¨®n de un hotel de Valencia, agotado por la enfermedad mental que le imped¨ªa seguir viviendo. Fue incinerado el s¨¢bado 7 de abril en el cementerio General de esta ciudad en presencia de unas pocas personas en representaci¨®n de otras muchas que lo quer¨ªan, donde fuimos arropados y consolados por los compa?eros del piso tutelado donde vivi¨® estos ¨²ltimos meses y trabajadores del Comit¨¦ Ciudadano Anti-SIDA de la Comunidad Valenciana.
Figari hab¨ªa nacido en Lima en 1964. Viaj¨® a Espa?a para estudiar Bellas Artes en la Universidad Complutense de Madrid despu¨¦s de haber cursado estudios de Arquitectura en la Universidad Cat¨®lica de Lima. A principios de los a?os noventa comenz¨® a asistir a los Talleres de Arte Actual del C¨ªrculo de Bellas Artes de Madrid impartidos por Julian Schnabel, Juliao Sarmento o Jiri G. Dokoupil, y a trabajar como int¨¦rprete y asistente de artistas como Juan Mu?oz, Ross Bleckner o Barry Flanagan. Su obra empez¨® a verse en exposiciones colectivas en galer¨ªas como la desaparecida El Caballo de Troya, Juana de Aizpuru o F¨²cares, y en muestras organizadas por instituciones como Circuitos de la Comunidad de Madrid o Propuestas en el C¨ªrculo de Bellas Artes. Expuso individualmente en las galer¨ªas EGAM, Marta Cervera, CGAI o Estampa y particip¨® en exposiciones colectivas como Otra orilla, en Casa de Am¨¦rica (1997); Berl¨ªn-Madrid, en Bethanien Haus, Berl¨ªn (1999), o Extranjeros, los otros artistas espa?oles, en el Museo Esteban Vicente de Segovia (2002), por citar algunas. Su obra est¨¢ en las colecciones de la Fundaci¨®n Coca-Cola, el Banco de Espa?a, la Fundacion Caja Kutxa y la Colecci¨®n UNED.
Figari fue evolucionando desde una figuraci¨®n pretendidamente infantil e inocente a un abigarramiento iconogr¨¢fico, una obsesi¨®n por el autorretrato y la multiplicidad de l¨ªneas y textos cercanos al trabajo de Antonin Artaud o de artistas outsiders, pero tambi¨¦n a los dibujos y pinturas de artistas consagrados como Paul McCarthy o Jonathan Meese.
Fui su amigo durante 23 a?os y le vi dejar muchas cosas, pero no sus l¨¢pices y cuadernos; dibujaba incluso en momentos de gran desasosiego, como si ese acto le ayudara a descifrar sus dudas y el origen de sus miedos. Diego hizo su ¨²ltima exposici¨®n en las paredes de la habitaci¨®n del hotel donde muri¨®. Quienes le quisimos recordaremos siempre su alegr¨ªa e intensidad.
Luis Salaberr¨ªa es artista gr¨¢fico.
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