Ant¨®n Reixa tendr¨¢ que pactar para ser presidente de la SGAE

Los autores suelen tener inclinaciones progresistas pero, al final, las actitudes son a menudo conservadoras. Lo explicaba ayer uno de ellos. La teor¨ªa dice que la ideolog¨ªa no se negocia, pero que el miedo a perder lo que tanto ha costado juega su propio partido cuando se vota. Por eso el jueves por la tarde muchos pensaban que la sombra de la era Bautista iba a transformarse de nuevo en una representaci¨®n clara en la nueva Junta directiva de la entidad. Que muchos sentir¨ªan v¨¦rtigo ante la posibilidad de cambiar de r¨¦gimen y se inclinar¨ªan por las opciones nost¨¢lgicas. Pero no ha sido as¨ª. Al contrario. M¨¢s all¨¢ del resultado, excelente para el candidato Ant¨®n Reixa y su equipo, y de la baja participaci¨®n (un 18%), los comicios son el certificado de defunci¨®n del teddysmo en la SGAE.

Esa es la ¨²nica clave que ahora une a los miembros de la nueva Junta Directiva y que nadie, ni siquiera Sabino M¨¦ndez, portavoz del equipo saliente y que entr¨® de la mano del anterior presidente, pon¨ªa en duda: ¡°El resultado es bueno. Lleva a la sensatez y a la necesidad de pactos. Las candidaturas que reivindicaban los viejos modos solo tienen un representante: Manuel de la Calva, de Centrados¡±. ¡°Lo importante es que no ha entrado quien no ten¨ªa que entrar¡±, dijo el candidato Sastr¨®n. Por lo dem¨¢s, y hasta que el 8 de mayo se celebre la primera reuni¨®n de la junta de donde saldr¨¢ el nuevo presidente, quien quiera serlo tendr¨¢ que demostrar sus habilidades para pactar. Cualquier excusa es buena para acercar posiciones. La primera, los Premios Max del pr¨®ximo lunes, que pocos se perder¨¢n.

El partido esta de la siguiente manera. Contra pron¨®stico, la candidatura liderada por el m¨²sico y artista polifac¨¦tico Ant¨®n Reixa (AUNIR) tiene 14 de los 39 asientos en juego (mayor¨ªa simple). Su candidatura es 100% rupturista y ha cargado abiertamente contra los desmanes del pasado, llegando incluso a proclamar que litigar¨¢ para que Bautista devuelva la millonaria pensi¨®n con la que se marcha.

Jos¨¦ Miguel Fern¨¢ndez Sastr¨®n (DOM), que en las anteriores elecciones se enfrent¨® al antiguo r¨¦gimen y part¨ªa como favorito, obtuvo nueve asientos. El grupo liderado por Jaume Sisa (Autores M¨¢s que Nunca) ¡ªque, por cierto, no ha salido elegido¡ª tiene seis. Los editores cuentan con sus ocho representantes y Miguel R¨ªos, ¨²nico candidato independiente, ha conseguido uno. La candidatura de Iv¨¢n Garc¨ªa-Pelayo solo ha colocado en la junta a uno de sus miembros: Manuel de la Calva. Es decir, Reixa es el que tiene m¨¢s votos y m¨¢s asientos, pero no suficientes para ser nombrado presidente. Y aqu¨ª empieza el baile del cortejo.

Tanto Reixa como Sastr¨®n se sienten legitimados ahora mismo para liderar el cambio de rumbo. Reixa por motivos obvios: tiene m¨¢s votos y m¨¢s esca?os que nadie. El segundo, porque ha obtenido m¨¢s representaci¨®n que ninguno en el colegio de peque?o derecho, es decir, entre los m¨²sicos. A esa secci¨®n le corresponden 16 miembros de la junta y el ganador puede elegir a cinco de los 10 representantes en el consejo ejecutivo, el ¨®rgano que se encarga del d¨ªa a d¨ªa de la entidad. Sastr¨®n, h¨¢bil negociador, se ve con fuerza para conseguir el apoyo de los ocho editores (que representan a grandes empresas como Sony, Warner, EMI o Universal), a quienes conoce mejor que su rival y que suelen ir de la mano en la toma de decisiones. Pese a las coincidencias en el programa ¡ªy por si no estaba claro¡ª, su equipo no piensa apoyar la presidencia de Reixa, a quien ver¨ªan como un ¡°mal presidente¡±.

Pero en Aunir hacen un lectura en clave de afinidades. Eliminado de la ecuaci¨®n Sisa ¡ªcon quien Reixa estuvo a punto de compartir candidatura y terminaron considerablemente enemistados¡ª el nuevo clima permite acercarse a sus seis representantes. Dos de ellos, adem¨¢s, los cineastas Jos¨¦ Luis Cuerda (vive en Galicia, como Reixa) e Imanol Uribe, comparten una cercan¨ªa profesional en el apartado audiovisual.

Miguel R¨ªos, piensan tambi¨¦n en Aunir, podr¨ªa sentirse m¨¢s c¨®modo con ellos que con Sastr¨®n, aunque sea en nombre del rock and roll (Reixa dice que se meti¨® en la m¨²sica por admiraci¨®n a ¨¦l). Y Manuel de la Calva, excomponente del D¨²o Din¨¢mico, tres cuartos de lo mismo. ¡°El escenario es de los m¨¢s deseados. Hubiera sido terrible una junta fragmentada con acuerdos imposibles. Ahora hay que acordar y consensuar. Es una directiva de cambio. No seremos presidentes a cualquier precio. Hay que acordar un programa¡±, dice el exmiembro de Os Resentidos. Un viejo punk que podr¨ªa acabar en el trono de la SGAE.