Un pa¨ªs en sus versos

?Tres poetas italianos que hayan atendido esencialmente, humanamente, con justicia, al esp¨ªritu esencial de su pa¨ªs, a una Italia de Italias, que a la vez es un solo pa¨ªs de referencia en la Europa de la cultura, a la que estamos gravemente renunciando? Compleja tarea, pero a la vez muy f¨¢cil, pues de inmediato los nombres de Dante, Leopardi y Quasimodo acuden a mi mente.

Aunque en la obra de los tres vibra su pa¨ªs a trav¨¦s de un humanismo f¨¦rtil, absoluto, heridor y dividido, Italia siempre est¨¢ detr¨¢s de sus versos: el paradigma de Verdad y Belleza en la Vida Nueva y en la cosmovisi¨®n del mundo en la Commedia dantesca. La patria que duele, (iluminada como en El archipi¨¦lago de H?lderlin por el ejemplo de los grecolatinos), en el poema A Italia, que abre los Cantos leopardianos; pero tambi¨¦n meditaci¨®n sobre la caducidad patria y humana en las laderas del Vesubio, frente a las ruinas de Pompeya, en La retama o la flor del desierto. El siciliano, el isle?o, el mediterr¨¢neo pleno que debe abordar las nieblas milanesas, en la poes¨ªa de Quasimodo. En ¨¦l late la influencia de los antepasados que traduce (Catulo, Virgilio) y sabe que en la playa de su infancia desgran¨® versos Esquilo, pero padece en d¨ªas borrascosos la Mil¨¢n bombardeada del norte.

En las obras de los tres el ser humano vive en los l¨ªmites de la consciencia. Del exilio, la malformaci¨®n f¨ªsica y el desarraigo, provienen su dolor y sus frutos. El dolor: el don y la condena del poeta. Frutos excelentes: el humanismo, la pura modernidad rom¨¢ntica, el emocionado af¨¢n de libertad. En sus libros mor¨ªa una Italia y renac¨ªa otra. Renac¨ªa la Europa de la cultura. En esa ¡°asignatura pendiente¡± a¨²n estamos en estos d¨ªas de ¡°mercados¡±, ¡°recortes¡± y ¡°crecimientos¡± econ¨®micos. El ejemplo de una Italia de los poetas ¡ªcomo de los pintores o los arquitectos¡ª no pasa.