Lee Fields, el ¡®soul¡¯ como una expresi¨®n del esp¨ªritu

All¨¢ por finales de los setenta, tuvo un apodo que ya queda lejos: el peque?o James Brown. Lejos porque han pasado ya casi 40 a?os desde que Lee Fields se dio a conocer con sus sencillos de absorbente funk, cuando creadores y oyentes de la m¨²sica negra demandaban nuevos ritmos m¨¢s bailables y hedonistas que los conocidos por la comunidad del soul. Y lejos tambi¨¦n porque, en la ¨²ltima d¨¦cada, Lee Fields responde a su propio nombre, sin interferencias ni ganchos comerciales, gracias a una madurez art¨ªstica envidiable. ¡°Ya no tiene sentido que me llamen as¨ª¡±, asegura el m¨²sico en conversaci¨®n telef¨®nica desde Nueva York. ¡°Siempre podr¨¢s encontrar alg¨²n elemento de James Brown en mi m¨²sica pero antes era todo m¨¢s evidente. Ahora, soy Lee Fields¡±, sentencia.

Casi imposible decir lo contrario. Decir Lee Fields es nombrar a uno de los m¨²sicos con m¨¢s personalidad del soul contempor¨¢neo, un veterano que vive su mejor momento desde que cr¨ªticos musicales y aficionados volvieron a poner sus ojos en ¨¦l con la publicaci¨®n del sobresaliente My world en 2009. Este a?o, despacha otro trabajo de m¨¢xima calidad titulado Faithful man (Truth & Soul-Resistencia), que presentar¨¢ ma?ana en el Matadero de Madrid por el D¨ªa de la M¨²sica. ¡°Me siento m¨¢s sabio y paciente que antes¡±, explica con respecto a esta segunda juventud art¨ªstica que saborea en pleno siglo XXI tras sufrir una larga sequ¨ªa discogr¨¢fica durante casi dos d¨¦cadas. ¡°Y me siento muy feliz de estar donde estoy y c¨®mo estoy. Definitivamente, es la mejor etapa de mi vida¡±, a?ade.

El momento m¨¢s dulce le llega facturando soul de toda la vida, cantando con el alma, cuidando los delicados arreglos, pero aportando un barniz moderno a su estilo de vieja escuela, gracias al buen hacer de su socio Leon Michaels, que trabaj¨® con Jay-Z, Aloe Blacc o Ghostface, en la producci¨®n. El reciente Faithful man, que tiene una versi¨®n de Moonlight mile de los Rolling Stones, es el mejor ejemplo de su actual esplendor. ¡°Es m¨¢s espiritual que My world. Miro m¨¢s para adentro del ser humano¡±, explica el cantante. ¡°Trato el tema de las relaciones humanas. Relaciones con respecto a los cambios como, por ejemplo, la tecnolog¨ªa moderna que cambia nuestro mundo pero no tiene porqu¨¦ cambiar nuestro modo de sentir. El amor de un hombre y una mujer contiene la misma esencia siempre¡±, dice.

Se podr¨ªa afirmar que la b¨²squeda de esa esencia es la b¨²squeda misma del soul, un estilo que halla el cl¨ªmax desquit¨¢ndose de ropajes artificiosos y recre¨¢ndose en el latir de un sentimiento de alegr¨ªa, pena o redenci¨®n. ¡°El soul es la expresi¨®n del esp¨ªritu. Es capaz de convencerte de lo que est¨¢s sintiendo, conectarte contigo mismo. Cuando lo afrontas en la m¨²sica, notas que es algo incre¨ªble¡±, explica Fields, quien no tiene problemas en afirmar que hay algo de soul en una Rihanna a la que le gustar¨ªa ver en directo o en el trompetista Miles Davis. En Faithful man, el esp¨ªritu del oyente queda atrapado por un soul elegante que recuerda a Sam Cooke. ¡°Me parece genial. Cuando me comparaban con James Brown, dec¨ªa: ?guau! Ahora reconozco la influencia de Cooke. Y tambi¨¦n tengo que a?adir a Wilson Pickett, Otis Redding y Solomon Burke¡±, dice el m¨²sico de Carolina del Norte.

Como en su d¨ªa le pas¨® al fallecido Solomon Burke, o como en lado femenino ha pasado con Mavis Staples o Bettye Lavette, el reconocimiento de Fields en la madurez de su vida, mediante numerosas cr¨ªticas laudatorias y conciertos contratados, se antoja como un acto de justicia para el soul, un g¨¦nero minoritario. ¡°Creo que he hecho un largo camino, que no he parado de crecer hasta llegar a este disco¡±, dice el cantante, que rechaza formar parte de nuevas corrientes como las que algunos han querido llamar neo-soul, tras el boom de Amy Winehouse y la eclosi¨®n de j¨®venes talentos. ¡°La gente dice que el soul ha vuelto. Es curioso: para m¨ª nunca se fue¡±, r¨ªe Fields. ¡°El soul estaba all¨ª hace mucho tiempo pero lo bueno es saber que hay gente joven que le gusta ahora. Si te metes en nuestra p¨¢gina de Facebook, ves a j¨®venes que dejan comentarios como: ¡®Estuve entre el p¨²blico de vuestro concierto y me mol¨®¡¯. As¨ª que dig¨¢moslo si hay que decirlo: el soul ha vuelto¡±, grita entre carcajadas.