La ¡®Yerma¡¯ sobria y austera de Narros

El gran director Miguel Narros regresa a Garc¨ªa Lorca, autor que ha revisitado varias ocasiones. Esta vez de nuevo es Yerma su elecci¨®n, obra que, siendo director del Teatro Espa?ol, homenaje¨® con motivo del cincuenta aniversario de su estreno (29 de diciembre de 1934), con diversos actos, y que puso en escena hace una d¨¦cada con el Centro Andaluz de Teatro y las actrices Amparo Mar¨ªn y Mar¨ªa Galiana. Fue precisamente el productor Celestino Aranda (y marido de Narros), quien le dijo que hab¨ªa hecho una Yerma bell¨ªsima y volviera a montarla.

Y as¨ª lo ha hecho. Ha creado una Yerma sobria y desnuda con los actores Silvia Mars¨®, Marcial ?lvarez e Iv¨¢n Herm¨¦s, entre otros, que anoche estren¨® en el Teatro Victoria Eugenia de San Sebasti¨¢n, donde permanecer¨¢ hasta el domingo d¨ªa 19.

¡°Mi regreso a Yerma no es s¨®lo por ser una de las obras m¨¢s bellas del teatro espa?ol, tambi¨¦n est¨¢ la necesidad de mostrar c¨®mo a¨²n hoy est¨¢n las cosas muy deterioradas entre el hombre y la mujer¡±, se?ala Narros de esta pieza que ha llevado a escena con una gran austeridad.

¡°He elegido esa desnudez porque la verdad no est¨¢ disfrazada nunca y, siguiendo con mi tradici¨®n docente, de jugar con la verdad, como les he ense?ado a mis alumnos, tengo que jugar tambi¨¦n yo con esa verdad¡±, dice este hombre que durante a?os ha sido profesor del Laboratorio de William Leyton y catedr¨¢tico de la Escuela de Arte Dram¨¢tico. Tras 60 a?os entregados a los escenarios Narros dice ver el teatro muy mal, y observa una vuelta a tiempos tremendos. Le consuela saber que hay muchos creadores importantes ya octogenarios, como ¨¦l, que est¨¢n siendo punteros: ¡°Hay algo bonito, fresco, en esta ancianidad¡±. Si se le pregunta c¨®mo lleva lo que ¨¦l llama ancianidad, dice: ¡°Por un lado jode much¨ªsimo, hay que enfrentarse a realidades irreversibles, como que duelan las rodillas, pero por otro est¨¢s activo y creativo¡±.

Piensa que Yerma le est¨¢ contando a la mujer actual problemas del matrimonio hombre ¨Cmujer: ¡°Habla de las relaciones de poder, donde la m¨¢s d¨¦bil es la mujer, independientemente de que haya mujeres muy fuertes¡±.

Lo que s¨ª ha incorporado Narros a su puesta en escena han sido diferentes met¨¢foras, como la de poner las cintas de la romer¨ªa, con las que se baila una trenza, con los colores de la bandera republicana y tambi¨¦n la espa?ola. ¡°Quiero hablar de una ¨¦poca en la que mi madre tuvo una ¡®no¡¯ educaci¨®n, no las ense?aron a ser mujeres; mi madre, la pobre, hizo lo que pudo, pero odiando a mi padre mortalmente, porque muchas mujeres lo que han hecho ha sido odiar al marido, ahora nadie somete a nadie, pero mi madre fue sometida por la familia, que la hicieron casarse con su cu?ado, cuando enviud¨® de su hermana, que ten¨ªa cuatro hijos¡±.

Narros est¨¢ especialmente satisfecho con el trabajo de Silvia Marso, una actriz con la que es m¨¢s f¨¢cil identificarse por parte de la mujer actual: ¡°No es una mujer espa?ola racial, no tiene eso, pero sin embargo da muy bien en el papel, porque ha sabido convertirse en una gran perdedora¡±

Mars¨® confiesa que la hab¨ªa le¨ªdo muchas veces: ¡°Se estudia mucho en las escuelas de teatro, me era muy familiar, pero da miedo porque siempre la han hecho grandes actrices; es un personaje con un mundo interior muy fuerte, que transita por estados de ¨¢nimo siempre al l¨ªmite¡±, dice la actriz, a quien le ayuda mucho, a la hora de trabajar, la palabra de Lorca: ¡°Es el texto el que tiene que llegar al p¨²blico, para m¨ª hacer Yerma, no es hacer un gran personaje, es hacer un gran texto, que es un matiz distinto; mi propuesta es la sinceridad, no el alarde, ni la creaci¨®n, s¨®lo dejarme llevar por lo que ofrece Lorca, que es much¨ªsimo¡±.

Para Mars¨® la obra cuenta el proceso de un personaje hacia la destrucci¨®n: ¡°La obsesi¨®n la conduce a la enajenaci¨®n; pero es un ser humano normal, del mundo rural, quiz¨¢ con m¨¢s sensibilidad, no es una hero¨ªna, se transforma en otra cosa por la frustraci¨®n¡±.

En su d¨ªa Lorca dijo que esta obra tan s¨®lo era ¡®la historia de una obsesi¨®n¡¯ y ¡®la imagen de la fecundidad castigada a la esterilidad¡¯. Tambi¨¦n hubo quien, como su gran amiga Encarnaci¨®n L¨®pez, la Argentinita, defend¨ªa la tesis de que Lorca escribi¨® en Yerma su propia tragedia, la de tener que ir contra su naturaleza y no poder tener un hijo. ¡°Es la historia de una mujer que conducen a un destino que no es el que le correspond¨ªa¡±, y a?ade Mars¨®, ¡°Lorca habla de la libertad del ser humano, de la rigidez social; es una visi¨®n muy progresista, es un canto a la libertad de elecci¨®n, en ese sentido est¨¢ hablando a la gente de hoy¡±.

Uno de los principales atractivos de esta producci¨®n radica en su banda sonora, creada por el desaparecido artista flamenco Enrique Morente. El reparto lo completan Mar¨ªa ?lvarez, Lara Grube, Roser Pujol, Roc¨ªo Calvo, Asunci¨®n D¨ªaz, Sole¨¢ Morente, Paloma Montero, Mona Mart¨ªnez, Teresa Quintero, Emilio G¨®mez y Antonio Escribano.

Yerma fue estrenada con Margarita Xirgu, quien posteriormente, en el exilio, la dirigi¨® con la gran Mar¨ªa Casares. A Espa?a regres¨® en 1960 con direcci¨®n de Luis Escobar y protagonizada por Aurora Bautista. En 1971 la actriz Nuria Espert y el director V¨ªctor Garc¨ªa, protagonizaron un montaje hist¨®rico, del que se sigue hablando. Desde entonces ha habido muchos montajes; el ¨²ltimo el de Narros, que tiene prevista una gira por numerosas ciudades espa?olas durante este a?o y el pr¨®ximo.