Cr¨ªmenes narrativos

En los a?os inmediatamente posteriores al ¨¦xito de El silencio de los corderos (1991) y, sobre todo, de Seven (1995), surgieron todo tipo de thrillers de aspecto presuntamente estiloso donde la principal baza resid¨ªa en la sistem¨¢tica, cada vez m¨¢s ins¨®lita, que utilizaban los asesinos en serie protagonistas de la intriga para perpetrar sus cr¨ªmenes. Guionistas y productores pretend¨ªan as¨ª ser tan originales que no pocas veces se lleg¨® al absurdo. Al contrario de lo que s¨ª ocurr¨ªa en aquellos inimitables modelos, lo importante no era la esencia de los personajes, sus motivaciones, su trascendencia moral y su eficacia art¨ªstica, sino un cada vez m¨¢s risible modus operandi. ?Recuerdan engendros como El coleccionista de amantes, El coleccionista de huesos, La hora de la ara?a, In dreams o Jaque al asesino? Por suerte, con los a?os, aquella moda se fue al garete.

Lo malo es que fue sustituida (en algunos casos casi coincidiendo en el tiempo) por otra a¨²n peor: siguiendo la estela de los extraordinarios finales sorpresa de M. Night Shyamalan en El sexto sentido y El protegido, lleg¨® la sobredosis de thrillers y pel¨ªculas de terror que se sacaban de la manga un desenlace chocante que, muchas veces, m¨¢s que sorprender, lo que hac¨ªan era ir en contra de las leyes de la l¨®gica, de la base del relato y de lo contado hasta entonces. ?Recuerdan El escondite o Seduciendo a un extra?o?

Viene todo esto a cuento (aunque parezca divagaci¨®n, solo era adelanto de argumentaci¨®n mediante antecedentes de fondo) por culpa, nunca mejor dicho, del estreno de En la mente del asesino, caprichosa pel¨ªcula de Rob Cohen que recupera no una sino las dos modas anteriores, y que se impone por m¨¦ritos propios como la intriga criminal m¨¢s infumable que se haya exhibido recientemente en los cines espa?oles. Todo ello gracias a un guion basado en la novela de uno de aquellos autores que hicieron su agosto a partir de la doble senda de los fuegos artificiales y del embuste del tah¨²r: James Patterson, autor de El coleccionista de amantes y La hora de la ara?a.