¡°Somos los huesos de la aceituna¡±

Pregunta.Se acab¨® el hombre invisible. ?Empieza a sentirse querido?

Respuesta. Siempre me he sentido querido. No se puede hacer m¨²sica contra la gente. Es imposible. Pol¨ªtica contra la gente s¨ª se puede hacer, pero los m¨²sicos no podemos.

P. Siempre ha reivindicado el sur, pero el sur no siempre ha reivindicado a Kiko Veneno.

R. Es lo de menos. Yo sald¨¦ esa cuesti¨®n en el disco Dice la gente con mi homenaje a Andaluc¨ªa sin esperar que Andaluc¨ªa me lo haga a m¨ª. Andaluc¨ªa es m¨¢s grande que yo. Seamos consecuentes.

P. ?C¨®mo le gustar¨ªa que le recordara la historia de la m¨²sica?

R. Hombre, con pelo.

P. ?Blanco?

R. Yo empec¨¦ en la m¨²sica y mi imagen era una voz arenosa y un mech¨®n blanco. ?Qu¨¦ es lo m¨¢s importante de un cantante de rock? Ni la voz, ni las composiciones, ni la chupa. El pelo.

P. En el 77 hace un disco con una tableta de hach¨ªs en portada. Con su padre, militar, ?qu¨¦ tal?

R. Mi padre no se enteraba de eso. Era una cosa marginal. Ni ¨¦l iba a las tiendas de m¨²sica ni el disco tuvo repercusi¨®n. Entonces estaba muy despegado de ellos.

P. ?Eso ha cambiado?

R. Claro. Ayer estuve con ellos para comunicarles lo del premio y mi padre me dijo ¡°este que parec¨ªa tan raro y al final ten¨ªa raz¨®n¡±.

P. ?C¨®mo fue su infancia?

R. Normal. Me dejaban espacio. Yo iba a los salesianos de C¨¢diz, cantaba gregoriano y el Cara al sol. No sab¨ªa lo que significaba, pero me gustaba aquello de ¡°cara al sol con la camisa nueva¡±... A los 13 a?os dej¨¦ de ir a misa. En mi familia hubo tolerancia.

P. Creativamente, ?le sac¨® partido a su paso por la Diputaci¨®n?

R. Mucho. Por la desesperaci¨®n. El primer a?o, un desastre total. Le ech¨¦ cojones. El segundo a?o el desastre fue menor. Pens¨¦ que era lo que estaba esperando, un sueldo para no tener siempre la nevera en suspensi¨®n de pagos, y que era el momento de hacer m¨²sica por las tardes. Aprend¨ª a valorar el tiempo.

P. He le¨ªdo a un poeta llamarle poeta.

R. La poes¨ªa es un estado mental transitorio, pero definitivo por su consecuencia y por su alcance. Me da mucha verg¨¹enza. La palabra poeta te la tienen que decir siempre. Es un mal rollo ir de poeta por la vida pero no renuncio a la poes¨ªa.

P. ?Le inspira respeto?

R. Las personas que van llam¨¢ndose de esto y lo otro, yo soy poeta, yo soy salvador de la patria como Aznar, me dan mucho miedo. Me gusta la gente humilde como Gordillo del Betis, que nunca ha dicho ¡°soy un fen¨®meno¡±.

P. ?Tiene alg¨²n verso que considere el mejor?

R. Nooo... ¡°Enamorado de la vida aunque a veces duela¡± quiz¨¢s es lo m¨¢s redondo. Soy un escritor sencillo.

P. Tal vez su grandeza sea su capacidad para sublimar lo cotidiano, los huesos de aceituna, los pelos en la ba?era.

R. Es que somos los huesos de la aceituna en el plato vac¨ªo. Despu¨¦s de Volando voy hice una letra sobre un hueso de aceituna en un platito blanco, en un bar, hablando solo, me preguntaba a qui¨¦n estar¨ªa esperando. De alguna forma es un camino para ir al meollo, que es la persona, la soledad, el amor, los sentimientos.

P. Necesitamos m¨¢s superh¨¦roes de barrio que nunca. ?Los ve en alguna parte?

R. Est¨¢n ah¨ª, pero con miedo, sin herramientas porque durante 30 a?os los han despojado de la cultura, del amor a la m¨²sica, a la paciencia, a la naturaleza.

P.?Le habr¨ªa gustado tener otra voz?

R. Al principio cant¨¦ con muchas dudas. Me cost¨® aceptarla. A estas alturas de mi vida, la percibo como algo cl¨¢sico. No canto muy bien pero tengo capacidad de entonar y emocionar.

P. No es un modelo del sexo, drogas y rock and roll. Lleva con su pareja desde los setenta y no sucumbi¨® a las drogas duras.

R. A la hero¨ªna siempre le tuve una prevenci¨®n extraordinaria. A la coca¨ªna se la fui cogiendo. Al cabo del tiempo lleg¨® a hacer m¨¢s da?o que la propia hero¨ªna. Y la chica de mi vida es mi mujer. Del rock and roll, s¨ª. Tienes que ser lo que t¨² eres.

P. Dicen que es arisco.

R. Es uno de lo sambenitos de mi primera etapa. Fui un luchador contracorriente. Nunca acept¨¦ que para triunfar hab¨ªa que chuparle el culo a nadie o hacer pol¨ªtica en los despachos. Hubo campa?as difamatorias de las compa?¨ªas que hablaban de m¨ª como alguien arisco y de mal talante.