¡°Tras la Vieja¡¯l Visillo hay tragedia¡±
Jos¨¦ Mota debuta en Telecinco con algunos de sus personajes m¨¢s emblem¨¢ticos Seg¨²n el nuevo fichaje de la cadena el humor "se nutre de la ruindad"
¡°Puede ser c¨®mico, pero lo que hay dentro de la Vieja¡¯l Visillo es tragedia. Muchas veces, de la ruindad, de la mezquindad, de lo m¨¢s negro, nace el humor¡±. Jos¨¦ Mota ha buceado en el ¡°reservorio del recuerdo¡± y de ese oscuro lugar han salido personajes como la Vieja¡¯l Visillo o Blasa. ¡°De cuando era ni?o tengo la estampa de una mujer mirando por el visillo que cuando se sent¨ªa observada lo volv¨ªa a colocar en su sitio. Era como consumir vida de ventana para dentro y eso me inquiet¨® mucho¡±, dice Mota, que esta noche desembarca en Telecinco (22.00) tras una larga etapa en las pantallas de TVE.
Estos dos personajes son un reflejo, seg¨²n Mota, de la Espa?a negra. ¡°La Vieja¡¯l Visillo es terrible. Ella se proyecta en los dem¨¢s; necesita de las desgracias de terceros para sentir que tiene algo de vida. Es como Blasa, que la pongo con Punset hablando del bos¨®n de Higgs para sacarla de ese mundo sombr¨ªo. He visto tanta se?ora vestida de negro que en vida han renunciado a la vida, que me da mucho pataleo¡±.
Ahora, el humorista cambia de cadena, pero mantiene intacto su estilo. Renueva, eso s¨ª, su plantilla de personajes, aunque los m¨¢s emblem¨¢ticos estar¨¢n en La noche de Jos¨¦ Mota. Detr¨¢s de todos ellos, de ese barniz c¨®mico, se esconde una sutil cr¨ªtica social. Sus parodias satirizan desde la subida del IVA al cine hasta la congelaci¨®n de los cr¨¦ditos bancarios.
Detr¨¢s de esa apariencia c¨®mica se esconde un tipo muy serio. Mota es de los que opinan que el humor tiene un alto contenido de malicia. ¡°Se nutre de la ruindad y la maldad humana¡±, dice. Pero entiende que el humor es tambi¨¦n una herramienta del ser humano para defenderse de su entorno. ¡°No tomarse a uno mismo en serio es muy sano¡±, advierte. El humor es ¡°terap¨¦utico y necesario, un catalizador para poder digerir el entorno¡±. M¨¢s que re¨ªrse, su objetivo es desdramatizar. ¡°Alguien dijo que comedia es tragedia m¨¢s tiempo. Y es verdad. Ahora estamos viviendo un momento de mucha crispaci¨®n social. Yo trato, en la medida que puedo, ser un altavoz y contar las cosas que veo alrededor. Lo hice en TVE y en Telecinco tambi¨¦n quiero hacerlo¡±.
Lo que no ha querido es romper en esta nueva etapa con el formato que tan buenos resultados le dio en la televisi¨®n p¨²blica, pero la privada quer¨ªa una hora de programa. ¡°Lo f¨¢cil hubiera sido haber mantenido los 45 minutos de ficci¨®n que hac¨ªa en TVE y hacer otros 15 en un plat¨® con p¨²blico. Pero no quise romper la cuarta pared de la ficci¨®n. Ser¨ªa un insensato si cambiara el formato de arriba abajo. Nos ha dado muy buenos resultados. Hay que evolucionar, pero manteniendo esa semilla¡±.
El producto no var¨ªa sustancialmente en cuanto a contenido. Pero el continente est¨¢ remozado en un 60%. El paisanaje que deambular¨¢ por La noche de Jos¨¦ Mota ha cambiado. ¡°Quito, pongo, me reinvento. Algunos personajes los mantengo porque los doy con cuentagotas¡±. Otros, como T¨ªo la Vara, han muerto en el camino. Entre los que han nacido est¨¢n El hombre del armario, un tipo exc¨¦ntrico que camina por la calle abrazado a un armario, o Berengario, un tractorista que se r¨ªe de las desgracias ajenas y se recrea con las desventuras de los dem¨¢s.
No faltar¨¢n Blasa, la anciana viuda de Alcafr¨¢n, que intentar¨¢ desentra?ar los misterios del universo en sus profundas conversaciones con Eduard Punset o emular¨¢ los ¨¦xitos musicales de Lady Gaga. Fiel a la cita ser¨¢ Tom¨¢s, el jubilado miraobras y los pol¨ªticos de primera fila. Mota se convertir¨¢ en Mariano Rajoy o en Alfredo P¨¦rez Rubalcaba, seg¨²n toque, y recrear¨¢ Juego de tronos o Frank de la jungla. Pero por encima de todos, recomienda seguir hoy los pasos de la Vieja¡¯l Visillo en Broadway altavoz en mano inmiscuy¨¦ndose sin misericordia en la vida de los estadounidenses.
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