¡°Si en Espa?a quieren mi trabajo, que se porten bien y me lo pidan¡±
El core¨®grafo y bailar¨ªn, plet¨®rico por su reciente nombramiento como intendente del Stattballett de Berl¨ªn, pas¨® por Madrid para presentar un documental sobre su paso por la CND
El core¨®grafo valenciano Nacho Duato, exdirector de la Compa?¨ªa Nacional de Danza de Espa?a \[CND\] y actual director art¨ªstico del Teatro Mijailovski de San Petersburgo, ha pasado velozmente por Madrid para presentar un documental del que es protagonista. Se trata de un relato m¨¢s bien hagiogr¨¢fico de su ¨²ltima gira a Rusia como cabeza de la CND, con laudatorios testimonios de sus bailarines y fragmentos de filmaciones, algunas hist¨®ricas, como aquella del ballet Opus Piat donde el artista se restregaba la entrepierna con un inmaculado tut¨² blanco.
Ahora Nacho aparece sereno, plet¨®rico por su reciente nombramiento como intendente del Stattballett de Berl¨ªn, puesto al que se incorporar¨¢ en 2014 y que compaginar¨¢ con el Mijailovski ruso.
Pregunta. Ahora que ha hecho las paces con Marius Petipa [el gran core¨®grafo acad¨¦mico franc¨¦s del siglo XIX], al desembarcar en Berl¨ªn, el compromiso con el repertorio cl¨¢sico es mucho mayor.
Respuesta. No es que hubiera hecho las paces con Petipa. Nunca he estado enfadado con ¨¦l. Lo que pasa es que lo que se me exig¨ªa aqu¨ª en la CND yo no lo pod¨ªa hacer. Pero ha sido aterrizar en Rusia, en una compa?¨ªa (y en un pa¨ªs) con la infraestructura necesaria que comporta un ballet cl¨¢sico, y me he puesto manos a la obra enseguida. He hecho La bella durmiente y en diciembre estrenar¨¦ mi Cascanueces.
P. Grandes ballets de repertorio...
R. Y all¨ª en San Petersburgo sigo los ensayos de Giselle y de Laurencia. Estoy en una compa?¨ªa con orquesta propia, con un proyecto y medios que pueden pagar de su presupuesto estas grandes producciones cl¨¢sicas.
P. Le gusta el cl¨¢sico.
R. A m¨ª me hubiera gustado ser un pr¨ªncipe en escena, ser Albrecht [el protagonista masculino de Giselle], ser un bailar¨ªn cl¨¢sico, pero en la Espa?a dictatorial eso era imposible y tuve que empezar a bailar demasiado tarde, a los 17 o 18 a?os, y ya se sabe que en ballet cl¨¢sico hay que empezar m¨¢s temprano. La suerte es que yo ten¨ªa un cuerpo dotado para bailar y me enganch¨¦ al contempor¨¢neo.
P. El panorama internacional cambia con directores m¨¢s j¨®venes en Viena, Par¨ªs y usted en Berl¨ªn.
R. Yo soy mayor que ellos.
P. Pero generacionalmente entra a dirigir en su ¨¢mbito, incluso es usted m¨¢s contempor¨¢neo o ajustado a los tiempos actuales que Manuel Legris [Viena] o Benjamin Millepied [Par¨ªs].
R. S¨ª, es un hecho global, es un cambio generacional y siempre ocurre todo a la vez, como con los directores de las casas de ¨®pera. Pero debo decir que yo nunca he ido a buscar trabajo, salvo como bailar¨ªn al principio cuando fui a Maurice B¨¦jart primero y al Cullberg Ballet de Estocolmo despu¨¦s. Luego siempre me han llamado, tanto como core¨®grafo que como director.
P. Como ha sucedido ahora en el Ballet de Berl¨ªn.
R. Ya en Berl¨ªn me llamaron en 1992 y dije que no porque me ven¨ªa a Espa?a, y me volvieron a llamar 10 a?os despu¨¦s antes que a Vladimir Malajov y volv¨ª a decir que no porque en Espa?a estaba muy contento con mis resultados. Esta es la tercera vez. Son gente muy seria, saben a qui¨¦n llaman y por qu¨¦. Hemos estado hablando un a?o porque yo no quer¨ªa dejar San Petersburgo.
P. ?Ya hablado de n¨²meros con las autoridades alemanas?
R.Tengo all¨ª 80 bailarines, pero me han dicho que si quiero puedo llegar a 100. He firmado un contrato por cinco a?os. En Espa?a se ha dado mal la noticia. A Sasha Waltz nunca se le pidi¨® dirigir la compa?¨ªa y Malajov sab¨ªa desde hace un a?o que se ten¨ªa que marchar. No estoy all¨ª interinamente. Firm¨¦ hace tres meses y te ment¨ª. Lo siento. No pod¨ªa dar la noticia.
P. ?Qu¨¦ pasa con el impedimento de poner sus coreograf¨ªas en Espa?a?
R. En el Mijailovski les dejo todo el trabajo y me voy de una manera arm¨®nica, les dejo 10 coreograf¨ªas y me mantengo como core¨®grafo residente , pero de la manera que me despidieron aqu¨ª ?c¨®mo voy a dejar mi trabajo? Imposible. Habl¨¦ hasta de la posibilidad de un puesto como asesor art¨ªstico para mantenerme vinculado a la CND, pero no se me escuch¨®, la ministra [?ngeles Gonz¨¢lez Sinde] no quiso. Pero claro, los rusos en danza saben un poquito m¨¢s y son m¨¢s inteligentes, aprecian mucho m¨¢s el trabajo, saben que una coreograf¨ªa bien hecha es un tesoro intangible que hay que cuidar como un patrimonio. Si en Espa?a quieren otra vez mi trabajo, que ellos empiecen a portarse bien y a ped¨ªrmelo, aunque no ha habido ning¨²n contacto y todo fue muy feo. Cuando pido alguna informaci¨®n de mis obras, se me niega. Pero como soy tan tonto y no soy rencoroso...
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