Gracia Querejeta: ¡°La industria del cine ha llegado a unos l¨ªmites lamentables¡±
La cineasta presenta en el Festival de M¨¢laga ¡®15 a?os y un d¨ªa¡¯, una mirada adulta al mundo adolescente
Una mezcla de preocupaci¨®n y felicidad. Gracia Querejeta no oculta ninguno de estos dos sentimientos tan dispares. El orgullo y alegr¨ªa le ha llegado de la mano de 15 a?os y un d¨ªa, un emotivo viaje a la familia a trav¨¦s de un adolescente que hoy se ha presentado en el Festival de Cine de M¨¢laga y que le ha costado m¨¢s de tres a?os sacarla adelante. ¡°He sido muy feliz rodando porque rodar en Espa?a ya es una haza?a. He tratado de disfrutar cada segundo porque me parec¨ªa un aut¨¦ntico lujo¡±, confesaba hace apenas unas horas bajo la cegadora luz malague?a. La amargura, c¨®mo no, viene de la situaci¨®n que atraviesa el cine espa?ol. ¡°La industria ha llegado a unos momentos lamentables de crispaci¨®n y desencuentro que tenemos que acabar con ellos porque nos hace un da?o tremendo. Debemos de buscar entre todos puntos de encuentro, que seguro est¨¢n en alg¨²n sitio¡±.
Protagonizada por Maribel Verd¨², Tito Valverde y Ar¨®n Piper, entre otros, 15 a?os y un d¨ªa, el largometraje n¨²mero siete de la carrera larga en el tiempo ¨CGracia Querejeta comenz¨® en 1990 con El viaje del agua¨C nace de una mirada, de la que capt¨® cuando caminaba junto a su hijo adolescente por la calle. ¡°Fue el cruce de miradas entre un grupo de chavales y mi hijo. No hubo ning¨²n incidente grave, no pas¨® nada, pero vi esa mirada y me asust¨¦¡±, confiesa la realizadora que indag¨® y ficcion¨® en el p¨¢nico que puede provocar en el mundo adulto la adolescencia. ¡°Sobre todo, cuando pensamos que se nos escapa la vida de un adolescente¡±, a?ade Querejeta. El hijo, pero tambi¨¦n el padre. Hay mucho de la historia personal de la realizadora en 15 a?os y un d¨ªa. En realidad, en todas las que ha dirigido, pero en esta algo m¨¢s especial. Es la primera pel¨ªcula que dirige sin El¨ªas Querejeta, su padre, como productor y a ¨¦l, que atraviesa un momento delicado de salud, est¨¢ dedicada. Un productor que le marc¨® su carrera y que, lejos de mimarla y de protegerla en una urna de cristal, le ayud¨® a enfrentarse a retos m¨¢s duros. ¡°A El¨ªas le debo el 80% de lo que yo soy en esta profesi¨®n, me ha dado una escuela formidable. En alg¨²n momento se ha llegado a pensar que El¨ªas criaba directores mimados que solo pod¨ªamos rodar de una determinada manera. Yo soy el claro ejemplo de que eso no es as¨ª. Me ha dado tablas para moverme de otra manera, y no solo a su manera y en sus tiempos¡±
Y ese ejemplo est¨¢ en los tres a?os que ha pasado dirigiendo series de televisi¨®n, a falta de oportunidades en el cine. Ella supo esperar y aceptar que su pel¨ªcula fuera m¨¢s peque?a, m¨¢s ¨ªntima, con un presupuesto mucho m¨¢s m¨ªnimo, de acorde a los tiempos que se viven. Y est¨¢ orgullosa de su paso por la televisi¨®n. ¡°Al no poder levantar el proyecto, dribl¨¦ a la televisi¨®n en un momento bueno y los a?os que he pasado dirigiendo las series ¨Cempez¨® con Hospital Central- han sido decisivos en mi manera de enfrentarme al oficio. Tengo la sensaci¨®n que de alguna manera he cambiado para siempre. Te acostumbras a otro ritmo de trabajo m¨¢s r¨¢pido. Creo que he conseguido sacar de la televisi¨®n lo m¨¢s positivo que es la versatilidad, la capacidad de reacci¨®n en segundos, cosa que en el cine que yo hab¨ªa hecho antes era mucho m¨¢s pensado. Me ha dado sentido de oficio, que consiste en dirigir, unas veces con m¨¢s medios, otras con menos, otras incluso de encargo. He ganado en ahondar en aquello de sacar todo lo que uno pueda en cada momento¡±.
Tres con las pel¨ªculas fundamentales en la vida de esta realizadora madrile?a de 50 a?os y no, sorprendentemente, las m¨¢s afamadas. ¡°La primera¡±, confiesa, ¡°fue la primera porque fue todo un salto al vac¨ªo. Se dijo de ella que no la hab¨ªa dirigido yo y que la hab¨ªa hecho mi padre. As¨ª empec¨¦ yo. Luego H¨¦ctor, porque vino en un momento muy delicado justo antes de que mi padre se pusiera enfermo por primera vez y era la primera que no escrib¨ªa con ¨¦l. Y la tercera, esta que presento hoy aqu¨ª en M¨¢laga, no por el hecho de ser la ¨²ltima, sino porque me he tenido que adaptar a una situaci¨®n distinta a la que yo estaba acostumbrada cuando empec¨¦. Entonces, uno terminaba rodando aquella pel¨ªcula o aquella historia que quer¨ªa. Eso hoy se ha acabado por completo. Esa sensaci¨®n se ha esfumado¡± Y, en su lugar, se ha instalado la par¨¢lisis y la frustraci¨®n. Pero Gracia Querejeta se muestra radical en este tema. ¡°Creo que la industria est¨¢ contribuyendo a crear m¨¢s crispaci¨®n de la que ya tenemos. Hay que ir por otro camino. Hemos llegado a unos l¨ªmites lamentables, de sensaci¨®n de desencuentro. No nos conviene para nada como profesionales. Es el momento de detenerse y de buscar alg¨²n punto en com¨²n. Debemos ir por otro lado, porque as¨ª no vamos a ning¨²n sitio. ?Hay alg¨²n punto donde nos podamos encontrar? Lo debemos encontrar porque si no esto s¨ª que va a ser una aut¨¦ntica cat¨¢strofe¡±.
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